rol-caneloso1671769599 Rol Caneloso

La miseria y el caos destruyen poco a poco un decadente México dominado por el crimen y la corrupción. Habiendo perdido a sus únicos protectores, ¿Habrá alguien capaz de ponerle un alto esta amenaza? Un proyecto secreto se cuece en lo más recóndito del gobierno con la esperanza de poder acabar con el mal que azota a la nación. ¿Se podrá hacer la diferencia? ¿O habrá que combatir al fuego con una llama más ardiente?...


Fantastik Kentsel Fantezi Sadece 18 yaş üstü için. © Rol Caneloso 2022
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En las tinieblas

"En otras noticias, una pareja fue brutalmente asesinada en la colonia Gustavo A. Madero. Los primeros reportes oficiales indican que se pudo tratar de una venganza por parte de criminales fuertemente armados, o de un cobro de favores por parte de los ya tan conocidos Oscuros" narraba una reportera con total tranquilidad ante las cámaras de un noticiero nacional muy conocido.

Detrás de ella estaban varios policías de la Ciudad de México, junto con el servicio de peritaje. La escena era horrenda, tétrica, desconsoladora y sangrienta; la pareja de la que hablaba yacía en el suelo con múltiples horificios causados por balas de gran calibre. Sangre se estancaba en sus cuerpos, así como en la banqueta que estaba cerca del horrido suceso.


Entre la multitud, una joven intentaba apartar a todos los tan morbosos espectadores que observaban atentamente toda la escena.


"¡Quitense, dejenme pasar!" gritaba la chica mientras se abría paso poco a poco, hasta que logró ver con más claridad todo...


Sus padres eran los que fueron masacrados.

Un grito desgarrador emergio de ella. No, más bien, salió directamente de su alma. Un dolor incomprensible que se sentía tanto en su llanto, como en su expresión de dolor incalculable.

"¡No puedes pasar chamaca!" le gritó uno de los policías que estaba acordonando la zona. Pero la joven no escuchó y corrió sin pensarlo dos veces hacia donde estaban sus padres.

Temblando y aún con lágrimas en los ojos, tocó el cuerpo de su madre. La sangre manchó sus manos y, al darse cuenta, volvió a quebrar en llanto.


"¡PAPÁ, MAMÁ!" gritó con todas sus fuerzas, tantas que parecía como si se hubiera desgarrado sus cuerdas bucales, pues luego de eso solo pudo emitir quejidos de dolor.


Los policías lograron agarrarla y llevarsela lejos del lugar. Todos la estaban observando con la misma morbosidad que veían esos cuerpos tendidos en el frío pavimento.

Encerrada en una patrulla, la joven simplemente quedó en shock tras todo lo sucedido. Fue tan rápido, que ni siquiera pudo responderle a los policías el como se enteró de todo lo sucedido.

"¿Por qué?..." se preguntó a si misma entre susurros llenos de pesar.

Una policía que estaba investigando el caso se acercó a la patrulla en la que estaba la chica. Abrió un poco la puerta y notó como es que la joven estaba viendo a la nada, repitiendo la misma pregunta: "¿Por qué?"


"Sé que no es el momento. Pero debido a que eres la hija de los individuos, tenemos que hacerte unas preguntas sobre lo que ocurrió antes de... todo esto"


La chica volteó lentamente, mirando fijamente a los ojos a la oficial. Sus ojos estaban abiertos, muy abiertos; además de irritados. Su mueca estaba entre tristeza y resignación. Intentando mantener su firmeza y apariencia "profesional", la policía no quiso reaccionar de forma evidente ante la joven. Pero en el fondo, muy en el fondo, quería llorar al ver un rostro que ni siquiera es de una mujer madura sufriendo de forma incalculable.


"E- entiendo. Tomáte tu tiempo para pensar sobre esto..."


La policía se retiró tras este breve, pero bastante desgarrador contacto.

Unas 3 horas después, la joven fue llevada a la morgue para reconocer de forma oficial los cuerpos. Se acercó poco a poco, paso a paso. Sintió un masivo, aplastante e hiriente peso sobre sus hombros estando ya a unos escasos metros de esas frías planchas de metal.

Todos sus pensamientos estaban revueltos, sumidos en tinieblas imposibles de disipar. Y antes de siquiera darse cuenta, ya estaba frente a sus difuntos padres.

Lentamente, y con ayuda de un forense, abrió un poco ambas bolsas. Las lágrimas que brotaron de sus ojos al ver bien los rostros, confirmaban que ellos eran sus progenitores.


"Lamento mucho tu pérdida"


"..."


"¿Tienes algún familiar al que puedas contactar?"


"No"


"Entiendo..."

El forense se acercó a un policía, a quien le murmuro algo al oído.


"Necesito que vengas conmigo, por favor"


La joven no se negó, pero tampoco asintió. Simplemente fue con el policía, así sin más. Ambos llegaron a la salida de la morgue.


"Dado que no tienes familiares, tendré que escoltarte a un lugar especializado"


Luego de escuchar esto, la chica se quedo quieta. Y, de un momento a otro, salió corriendo del lugar.


"¡¿A dónde vas chamaca?!"


El policía tenía la intención de perseguirla, pero el forense lo detuvo.


"Deja que se vaya. Capaz y si tiene algún familiar que simplemente no quiso mencionar"


El policía acata la orden con resignación, pues sabe que no puede hacer mucho realmente.


La joven siguió corriendo sin mirar hacia atrás. Recuerdos inundaban su mente, memorias de su niñez y parte de su adolescencia.

¿Cómo es que todo eso acabó en un instante?.

Por más que intentaba responder esa pregunta, no podía hacerlo. El dolor era tanto que le quemaba por dentro, le desgarraba el cuerpo y destruia su alma poco a poco mientras se alejaba de aquel lugar.


"Pero... ¿a dónde iré?"


Las calles se veían desoladas para ser la Ciudad de México, un lugar que usualmente es vivido incluso en la noche.

Había carteles en cada esquina con la misma leyenda: "el toque de queda empieza a las 8:00 p.m. recuerdalo".


"Deben ser más de las 12 de la madrugada ahora mismo... No puedo quedarme aquí mucho tiempo"


Avanza con algo de cautela a través de las inhospitas y frías calles, como si tuviera temor de encontrarse a algo o alguien.

Observando su entorno se da cuenta de algunos detalles que no había notado antes de todo esto, algunos de ellos era que varias paredes y bardas de muchas casas y tiendas tenían agujeros hechos por balas.

Ella misma estaba asombrada de todos los destrozos que veía con cada paso que daba. ¿Quién podría provocar tal destrucción?...

Pero al estar tan ensimismada pensando en eso le provocó toparse con algunos de los responsables de tales acciones.

Un hombre vestido enteramente de negro estaba rondando por la zona. A primera vista pareciera ser otra persona perdida en medio de la noche, pero mientras más se acercaba, más dejaba ver que no era así.

Un chaleco de grado militar del mismo color que su vestimenta, casco táctico y gafas de la misma indóle; rematando con un rifle de asalto exclusivo de uso militar.


"Um... ¿señor?"


"..."


No titubeó al apuntarle a la chica sin preguntar o intentar hablar primero. Ya tenía suficiente con lo que le pasó, ahora tiene que escapar por su vida, si es que puede.


"¡Espere, no me dispare!"


Este individuo hizo caso omiso. Aunque ella no podia ver sus ojos, no dudaba algo: la mirada tras esas gafas ya no tenía vida, solamente estaba enfocada en cumplir su misión.


"Supongo que se acabó..."


"Al menos estaré con ellos una vez me dispare..."


La joven cae de rodillas a modo de resignación, perdiendo toda esperanza y esperando que su ejecutor lo haga lo más rápido posible.

Pero bien dicen que la esperanza es lo último que se pierde...


"¡Oye cabrón, metete con alguien de tu tamaño!"


Alzando la mirada levemente lo pudo ver: un joven alto y fornido estaba tras el que iba a ser su verdugo.


"¿Кто ты, черт возьми?"


Al parecer ese hombre no hablaba español, lo cual podría medio explicar el porque de su reacción ante la chica. Aún habiendo hablado en ruso, el joven pareció entenderlo.


"Tu verdugo, ese soy yo"


El hombre ríe a carcajadas ante las palabras del joven; siendo lo que le costaría la vida.

Como si fuera un rayo, aquel heróe anónimo le asestó un golpe de lleno al estómago, mandandolo a volar.


"¡¿Но что?!"


"¿De qué te impresionas imbécil? Te dije que yo sería tu ejecutor"


Si aquel hombre parecía ser frío y con pocas o nulas emociones, este chico era peor. No dudó ni un segundo en darle un tiro en la cabeza al hombre con una pistola que tenía guardada en una pistolera.

Las luces del lugar estaban fallando, por lo que la joven no vió a del todo bien al joven en un principio. Pero una vez se acercó pudo verlo mejor.

Algunos mechones de su cabello sobresalían de su casco, el cúal era color gris oscuro. Extrañamente, su cabello era de color ceniniento. Es de tez blanca y de una altura considerable. Su chaleco tiene el escudo de la bandera mexicana del lado en el que está el corazón, junto con un emblema extraño: la letra griega alpha encima de un número 9.


"¿Quién eres tu?..."


El joven le da la mano para ayudar a la chica a levantarse. Le limpia unas lágrimas que escurrían de su rostro con delicadeza, mirando directamente a los ojos a la chica.


"Un protector"


La chica no puede contener más su llanto y dolor que lleva arrastrando, además del shock de este momento.

El joven la abraza para reconfortarla.


"Estás a salvo, tranquila"


Mientras reconfortaba a la chica, el joven recibe un mensaje en su celular.


"Esta ciudad nunca deja de tener problemas..."


"Te llevaré a un lugar en el que podrás estar segura"


La joven asiente, yéndose con aquel joven hacia lo que podría ser un "lugar mejor".












12 Kasım 2023 05:50 2 Rapor Yerleştirmek Hikayeyi takip edin
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Yazarla tanışın

Rol Caneloso "El Cielo ayuda al hombre que supera sus miedos".

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İleti!
Iktan Salmeron Iktan Salmeron
Me gusta que la historia se sitúe en México, es un país con mucho para explorar en el género de fantasía y los personajes se me hacen peculiares, en especial Yun. Me convenció.
June 22, 2023, 02:34
Andri Carter Andri Carter
Me declaro Yunlover
December 25, 2022, 00:31
~