Cuando encontraron mi cadáver no pudieron entender en qué circunstancias morí.
Evidentes señales de asfixia en mi cuello, sin arma homicida, solo marcas de manos en la pálida piel.
Alguien me ahorcó, eso era obvio. Pero los oficiales forenses no entendían quién pudo hacerlo. Puertas y ventanas cerradas desde adentro, sin señales de forcejeo.
Al fin y al cabo la única persona que vivía conmigo era mi compañero de departamento, quién llevaba semanas descomponiéndose debajo de mi cama.
2 октября 2019 г. 2:30:54 11 Отчет Добавить 3Thank you for reading!
Мы обрабатываем все наши транзакции с PayPal. Пожалуйста, не закрывайте это окно, подождите, пока вас перенаправлят…