alennenahu Alenne Nahu

En la ciudad de Mul Sup, Corea del Sur; un joven trabajador de nombre Jeon Jungkook, fue secuestrado y llevado a una casa oculta en el bosque. Allí estará en compañía de Kim Taehyung, su captor que tiene trastornos psicológicos y le empuja a hacer, cosas inimaginables. ⚠️ Por favor no hagan PDF si se puede leer gratuitamente aquí. Mejor comparte el link 🔗 ❗️ La portada fue editada por mi y creada por mi, no la uses como tuya o la manipules. Las fotos dentro del texto fueron editadas por mi, por favor no las uses en tus escritos. Esta historia la puedes encontrar en: Wattpad, Inkspired y Inkitt.


Фанфикшн Знаменитости Всех возростов.

#taekook #btsfanfic #vkook # #terrorpsicologico #suspenso #misterio #thriller #taehyung #jungkook #wattpad #fanfic
2
218 ПРОСМОТРОВ
В процессе - Новая глава Every 2 days
reading time
AA Поделиться

.

Disculpen los errores dentro del texto.




Una de tantas mañanas en la ciudad de Mul Sup, las aves trinaban con el pleno amanecer en los árboles entre el ruidoso ambiente de la ciudad, cientos de personas yendo y viniendo; música sonaba en distintos establecimientos, además de muchos niños y jóvenes entre charlas de camino a sus escuelas.


Faltaban unos minutos para que el reloj diera las 8 en punto, iba de camino a mi trabajo como de costumbre con audífonos inalámbricos en mis oídos escuchando «The same» del cantante Mehro.

Llegué a las puertas de mi lugar de trabajo, era una paquetería que entregaba pedidos por medio de una aplicación. Quité la música para concentrarme en mis labores, me detuve frente a las puertas que se deslizaron de forma automática permitiéndome el paso. Justo al frente mío, estaba el jefe del lugar en la recepción. «¿Qué hace aquí? No sale de su oficina a menos que... hoy haya recorte de personal».


—Buenos días jefe Seok.

Hice reverencia y sonreí leve.

—Buenos días, joven Jeon.

Respondió el jefe de la misma manera entregándome un folder pequeño sobre uno más grande.

—Quiero agradecer por su gran trabajo estos años.

Completó mirándome.

Observé los folders y sabía a lo que se refería, no quería que me corriera, debía buscar la forma de quedarme.

—Ah... jefe Seok, déjeme trabajar una semana más, no encontraré un trabajo ahora. Tengo gastos de mi departamento.

Tomé la correa de mi mochila algo nervioso por su respuesta.

—Usted no es el único, véalo por ese lado. Últimamente los pedidos son pocos y el personal es bastante, me entiende ¿no?

Esto me dejó anonadado, jamás pensé que en estos momentos me pasará esto, tenía gastos del departamento.

—Seok hyung ... le pido que me de otra semana, por favor, puedo hacer otros trabajos, deme otro puesto.

Rogué mirando a mi jefe quien solo negó con la cabeza alzando la cejas.

—Lo siento mucho, le gradezco por su servicio.

Suspiré al ver que no cambio de opinión. Estaba algo molesto pero claro, no lo demostré.

—Muchísimas gracias... por la oportunidad.

Tomé lo que acerco a mi y agradecí con reverencias, él se retiró dejándome solo.

Estaba algo frustrado, «¿dónde trabajaré ahora?», no había trabajos en la zona donde vivía.


Guarde en mi mochila cruzada los folders dando media vuelta a la salida, para buscar otro empleo, mi paga no bastaría para mucho tiempo, pasé por varios establecimientos pero en ninguno necesitaban personal.

Entré a una tienda pequeña a unas cuadras de allí, compré unas galletas y un yogurt saliendo afuera de está sentándome en la orilla de una jardinera.

—No me pago ni la mitad de lo que trabajé.

Expresé con enojo mirando a las personas pasar.


Mi día transcurrió con rechazos de muchas personas, esto me hacía perder las ganas de seguir intentándo buscar trabajo:

—Entonces no puedo darle el trabajo, no tiene el certificado de preparatoria.

—Le llamaré cuando necesite su ayuda, ya váyase.

—No, lo siento. Por ahora no requiero de más personal.


Finalmente me rendí y regresé a mi departamento horas más tarde agotado, subía las escaleras desganado arrastrando los pies, el verano azotaba con calurosos días a esta ciudad. «Tendré que ducharme». Me detuve frente a mi puerta buscando en mi mochila la llave.

Está la encontré en una bolsa pequeña del costado. La introdujé en la manija de esfera y abrí al está chasquear. Saqué la llave entrando con un suspiro. «¿Quién puede darme trabajo? No tengo estudios, quería trabajar como traductor pero ya no podré pagar las clases». Pensé preocupado cerrando la puerta sentándome en el borde del desnivel quitándome mis tenis, después tomé la mochila colocándola sobre mis piernas abriendo el cierre para sacar el sobre y, contar el dinero que me habían pagado.


«Se lo básico.. tal vez pueda seguir por mi cuenta buscando videos o aplicaciones».


Debía pagar la renta hoy, ya habían pasado dos días. La señora, dueña de los departamentos no te molestaba pero te quitaba los servicios de luz, agua y gas obligándote a pagar o a desalojar.

Esto claro, no me había pasado en estos años de vivir aquí.

Conté y separé conforme los gastos que tenía, me levanté andando a la habitación para guardar el resto.

Entré a mi habitación, siempre me daba una sensación de tristeza, y de aburrimiento de cierta manera, se encontraban lienzos con pinturas monocromáticas y a color, recargados de las paredes y una alfombra estaba manchada con pintura acrílica, está claro, yo había comprado; además de un escritorio pequeño que no tenía una laptop como esperarían, lo usaba para hacer mis bocetos.

Para mi, era un lugar fuera de lo ordinario, un lugar de tranquilidad.

—Le pagaré más tarde a la señora. Quiero pintar para no seguir estresado.

Hablé conmigo mismo girando la cabeza hacia una pintura que estaba sin terminar en su tripié.

Arrojé mi mochila en la cama, la cual estaba con las cobijas tendidas sin ninguna arruga. Tomé mi godete preparando todo para pintar.




Al día siguiente, desayunaba cereal mientras miraba la televisión, noticias de siempre y peliculas aburridas. Preparé mi mochila con documentos elementales que pedían en los empleos. Me vestí con un pantalón ajustado, una playera holgada y unos botines altos, me gustaba el color negro así que todo iba en conjunto.


Mi pintura sin duda, tenía un acabado asombroso, fuera de lo que había hecho anteriormente, esto me hizo estar feliz e inspirado.

Pasando los canales no encontré otro que me llamara la atención así que apague la televisión. Dejé mi plato hondo junto a la cuchara en el lavabo y, agarré mi mochila colocando la cinta en mi hombro.

Ese día de regreso por la noche, un auto color negro estaba al otro lado de la carretera. No se me hizo extraño pero esto se repitió toda la semana, ahora frente al edificio. Pensaba que venía a ver a alguien pero no era así. La persona que estaba dentro de éste, no se bajaba, me era algo preocupante. Los vidrios eran obscuros y no me dejaban ver al interior, en este tiempo conseguí un trabajo como lava platos en un restaurante pequeño. A unas cuadras de el edificio donde vivía. Hice un amigo de casi mi edad, Park Jimin, era su nombre. Solíamos quedarnos hasta tarde y eso nos hizo convivir más. Íbamos a la feria y aveces caminábamos juntos a nuestros hogares ya que vivíamos cerca.


Pasaron los dias y pronto llegó el mes de Julio.

Tomaba turnos de mis compañeros para poder tener más dinero y poder rentar una casa pequeña, no era tan diferente al departamento, pero me era más cómodo estar yo solo.


...


—No debí aceptar quedarme tan tarde.

Interrumpí mi queja por un bostezo llevando una de mis manos a mi boca tapándola, estaba fuera del restaurante cerrando la puerta.

—Que sueño.

Suspiré agotado por lavar tanto, cerraba con llave la puerta y una vez que revise que ya no se habría la guarde en mi bolsillo de la chamarra.

—Mañana debo volver temprano a abrir... lo bueno es que trabajaré solo medio día.

Me puse el gorro de mi chamarra andando a el departamento, tallé un poco mi ojo derecho del sueño tan pesado que comenzaba a cansarme más. Todo estaba silencioso, el ruido que causaba el aire al pasar por las hojas de los árboles daba miedo.

Para distraerme saque mi teléfono mirando los mensajes de Jimin.

—Ya se que haremos mañana, aún no lo olvido. Ya deberías de estar dormido.

Respondía con un mensaje de voz, teníamos planes y no dejaba de repetirlo una y otra vez.

Él había salido temprano por una celebración de su hermana quien se casaría pronto. Pensaba mandarle otro mensaje de voz para preguntar sobre ese evento, cuando un auto a un lado mío comenzó a seguirme, tenía las luces apagadas.

Suspendí el teléfono y lo ignore ya que pensaba se detendría frente a la casa por la que pasaba.


Avance unos cuantos metros y el auto no se detuvo, «¿estará borracho? Espero no me cause problemas». Caminaba sin dirigirle una mirada hasta que una voz vino del interior del auto, junto a un sonido del vidrio bajándose.

—¿Yangsung...?

La voz de dentro del auto sonó algo opacado y volteé por instinto a la ventana del auto.

—¿Ah...? ¿Disculpe?

Pregunté confundido mirando a el interior de este buscando ver a la persona, esto fue difícil por la poca luz. Parecía ser que solo era el conductor.

Logré ver como nego con su cabeza.

—Oh, lo siento.. te confundí... ¿No es muy tarde para caminar por las calles?

Dijo siguiéndome de cerca con el auto ya que no dejaba de caminar. Apreté mis labios nervioso y guarde mi teléfono sin mirarlo más de un segundo. Con ese vistazo recordé el auto que se estacionaba frente al edificio donde vivía, este era el auto.

Estaba seguro de lo que decía por falta de pintura en el arco de la llanta derecha.

«Si quiere asaltarme le daré todo. No quiero ganarme una golpiza.. tal vez podría correr y buscar ayuda». Pensaba tratando de buscar una forma de terminar la conversación, y que no fuera obvio lo que quería dar a entender.

—Si... bueno así es mi trabajo. Debo ir con un amigo, esta esperándome y ya me retrase.

Di una risita nervioso y una reverencia, caminado apresurando el paso alejándome de él. «Eso debió bastar, tal vez con esto me deje en paz».

Su voz se escuchaba clara y no creo que estuviese borracho.

La actitud hacía el joven del auto del chico en la calle, no le pareció del todo bien. Aceleró y bajó la velocidad estando a su lado nuevamente.

—Si quieres puedo llevarte. Dime donde está tu amigo, no desconfíes de alguien que quiere ayudarte.

Volteé mirando su sonrisa ladina gracias a la luz que está vez entro por la lámpara de la calle, estaba algo inseguro pero esta vez vi al chico del auto con más atención, tenía cabello negro algo largo. Su mirada era penetrante y fría ... su sonrisa era tan llamativa y cuadradita que me hizo pensardiferente sobre el sabiendo como lucía.


«Podría encontrar a un asaltante de verdad más adelante, ¿cómo le diré que no voy con un amigo? Tranquilo, no te exaltes, fingiré una llamada o mensaje».

Suspiré y asentí tímido jugando con la correa de mi mochila cruzada.

—Bueno... esta en la calle ×××. Gracias por hacerme el favor.

El joven del auto le sonrió a su menor tímido. Abrió la puerta del copiloto dándole palmaditas al asiento para que entrara, hizo su comportamiento más tranquilo para no incomodarlo.

—Bien, sube.

Sonreí levemente entrando al auto, se miraba todo normal. Cerré la puerta y me acomodé mirando al frente pasando mi mochila a mis piernas, seguidamente me puse el cinturón de seguridad.

Un olor agradable invadió mi nariz. Parecía ser su ropa la que desprendía ese olor. Mientras manejaba este chico, tarareaba una canción, esta era algo escalofriante... no se como describirla.

Pasaron los minutos y comencé a cabecear, tenía tanto sueño que el movimiento del auto me arrullaba, perdí la noción del tiempo segundos después.

El joven del auto miró el comportamiento de su extraño pasajero de reojo y le molesto haciendo que suspirara.


...


—Oye, ¿qué haces?

Escuche la voz del chico entre sueños y desperté de golpe mirándolo. Hablaba normal pero su tonalidad era muy alta.

—¿E-Eh?... N-No hago nada.

—Estas durmiéndote... ¿Crees que no lo note? ¿Me crees estúpido? No soy tu maldito chofer.

Dijo serio aumentando la velocidad sin apartar la vista del frente.

«¿¡Qué le pasa!? ¿¡D-Dónde estamos!?»

Me asusté por su reacción y la manera en la que aceleró, no íbamos a mi departamento. Lo miré temeroso y después al frente acomodándome en el asiento.

No sabía que hacer para salir del auto.

—L-Lo siento... nunca dije o pensé algo así, por favor detente aquí.. ¡Quiero bajarme..!

Dije tratando de no asustarme más pero fui interrumpido por su voz grave, esta me hizo asustarme de lo fuerte que me hablo.

ー¡¡No vas a bajarte!! ¡¡Cállate!!

Dijo gritando enojado, pulsó un botón del tablero y el seguro de las puertas se puso.

Estaba tan aterrado sin comprender que quería y lo único que se me ocurrió fue ahorcarlo con la correa de mi mochila. La tomé con mis dos manos de los extremos disimuladamente y en un movimiento rápido se la puse en el cuello, el quería evitar que le apretara con una de sus manos y el auto empezó a serpentear al el chico soltar el volante; sin darme cuenta me golpeó con su codo en el pecho sacándome el aire.

En ese momento perdió el control del auto, no pudo controlarlo y salió de la carretera adentrándose al bosque bajando un pequeño barranco hasta estamparse con un árbol. La velocidad que llevaba hizo el golpe muy fuerte y el auto quedo destrozado de la defensa delantera.

Quedamos inconscientes por el golpe y ningún auto pasaba por lo que nadie vio el accidente.


...


No se cuanto tiempo paso.. pero un zumbido invadió mis oídos... uno muy fuerte y molestó.

Abrí los ojos lentamente, desperté escuchando el motor vibrar y sacar vapor. Estaba con mi cabeza caída al frente y el cinturón no me dejó golpearme con el tablero, estaba aturdido y confundido. Algo caliente comenzó a bajar por mi patilla derecha cuando me incorpore pegando mi espalda y nuca al asiento. Llevé mis dedos para limpiarme y era sangre. Mi pierna comenzó a arder y parecía estar cortada con algo observe ver mi pantalón con sangre y una ruptura en la tela. Puse atención con más detenimiento mi entorno, recordé y miré al chico a un lado mío.

Sangre marchaba el volante ya que estaba recostado sobre este, la sangre parecía ser de su cabeza... su cara tenía unos leves raspones.

Sin pensarlo tanto con la fuerza que recuperaba rápido intente abrir la puerta de mi lado pero, estaba con seguro y atascada, forcejeé y no pude abrirla. Buscando una salida miré el vidrio y empecé a golpearlo con mi codo, lo hice tres veces y se rompió ya que estaba estrellado. Desabroché el cinturón de seguridad y por suerte no se había atascado, limpiaba mi frente por donde ahora bajaba algo de sangre.

«Tengo que irme.. pedir ayuda.. tengo que escapar antes de que despierte..»


Me lo decía con desesperación comenzando a despejar los restos de vidrio para no cortarme, me apoyé en la ventana con mis manos y del asiento con mi pie no herido. Pasé la mitad de mi cuerpo y me impulsé con mis pies poco a poco sosteniéndome de la puerta con una mano acercándola al suelo sobre las hojas secas de los árboles, caí entre un jadeo de costado.

ー¡Ahhg!... mi pierna..

Hice una mueca de dolor y con mis manos me ayude apoyándome del suelo para levantarme, al hacerlo me detuve del auto para mantenerme de pié. Miré mi pierna y note algo enterrado, «No debo sacarlo... voy a lastimarme más» un gruñido de angustia salió comenzando a caminar, no sentía tanto dolor si no lo tocaba.

Rengueaba apartando algunas ramas. El auto había caído metros abajo, la carretera estaba arriba, caminé saliendo de la maleza con dificultades, todo estaba tan obscuro que solo la luz de la luna iluminaba la calle a lo lejos y partes del bosque. Miré a los lados poniendo mis dos manos en mi pierna que sangraba por el esfuerzo. Nadie pasaba por allí, me hizo sentirme ansioso.

«No me puede pasar esto...»

ーMi teléfono...

Dije buscándolo en mis bolsillos tontamente, lo saqué notando que estaba estrellado de la pantalla, presione el botón lateral encendiéndolo; por suerte encendió y llamé al numero de emergencias.

Caminaba mientras hacia esto de regreso a la ciudad pero estaba tan débil, mi vista empezaba a ponerse borrosa. El teléfono vibró en señal de que la llamada era atendida.

—«119 ¿Cuál es su emergencia

Poco a poco mi caminar se hizo más lento, suspiraba algo angustiado por el dolor que comenzaba a aparecer en mi cabeza y cuerpo.

ーEstoy en... en Mul Sup, en la calle... que lleva a las afueras... me querían secuestrar. Escape del auto.

Decía con molestias gimiendo ahogado por el ardor en mi pierna.

—«¿Está a salvo? Una unidad de policía esta siendo enviada a su ubicación. ¿Está herido?»

Mi cuerpo perdió fuerza, entre un suspiro caí a la orilla de la carretera, estaba mareado y un dolor punzante apareció en mí cabeza, el teléfono cayó primero al soltarlo. Quedó con la pantalla pegando en el pavimento.

—«¿Hola? ¿Cuál es su nombre? ¿Hola?»

Cerré mis ojos escuchando a la joven y el sonido que causaban los grillos se volvió envolvente.

19 апреля 2023 г. 5:03 0 Отчет Добавить Подписаться
4
Продолжение следует… Новая глава Every 2 days.

Об авторе

Alenne Nahu Escribo por pasatiempo ♡ tengo errores novatos jaja. Sígueme si gustas en Wattpad y por aquí ♡

Прокомментируйте

Отправить!
Нет комментариев. Будьте первым!
~