Mi Amado Demonio en la Colina Подписаться

Aura tiene la desgracia de ser joven, hermosa y en edad para tener un marido. Predestinada a ser la concubinadel príncipe Lionel, comparte el mismo destino que todas las doncellas que han nacido hermosas, en el reino de Uremi.

Desde niña ellaquería ser como una bestia del bosque. Amigade las ninfas, poseía el don de la videncia y una gracia particular. Pero su belleza escondíaun gran defecto, uno que su madre ocultó, peropudo remediar.

Y es que Aura al nacer vino al mundo con una extraña cola y unos pequeños cuernos que sólo pudieron ser removidos por medio de artes oscuras. Prácticas de hechiceríaprohibidas a todos los subditos, pero no a los miembros de larealeza.

Y así,la criatura creciócomo humana y su madre en ella lograría un amargo proposito que guardaba en silencio yle daba ánimos de vida...

En la noche, junto a lachimenea de una choza de madera,Aura se espanta el frío mientras trenza los largos cabellos negros y ondulados de su hermana Mirella.Al fondo,una mujer de enredados cabellos grises ronca inconsciente en su cama. En el suelo junto a esta,una jarra vertida chorrea unpoco devino.

- No seréla concubina del principe Lionel!

- Auraque tonterias dices! No puedes ir en contra del mandato de la reina. Además,tendrías que tal vez sacarte un ojo. Sólo asípodrías dejar de ser tan perfecta.

- ¿No entiendo Mirella, porquéel príncipenecesita de tantas concubinas?

- Mmmm, quizás porque quiere tener muchos descendientes, o tal vez, porque quiere encontrar el amor verdadero.

-Pues yo creo que el príncipe está maldito, y por más concubinas que tenga, no tendrá descendientes.

-Nodigas eso!Si alguien te escuchase hablando mal del principe....¿Es que quieres que la reina te mande a cortar la cabeza?

- ¿Note das cuenta Mirella ?El principe ya lleva tiempo que tiene un harem y aún no tiene ningún descendiente.

-Tal vez aún no es la voluntad de los dioses.Pero sea lo que sea, no séporquéte resistes.En palacio vivirás en lujos, y no en una pocilga como esta. Si yo fura tan bonita como tú, que felicidad saber que mi destino sería el palacio. ¡Ay que injusta es la vida!Yo tuve que nacer sin gracia, y tan tosca como una piedra. Sin embargo túhermana querida, eres una flor que todos quisieran en su jardín.

Pues yo sólo quiero ser una flor de bosque. ¿Te puedo contar un secreto Mirella ?

- ¿Secreto?

- Ayer fuía buscar hierbas en la colina del demonio...

-¡Aura! Nuestra madre te lo tiene prohibido.

-¡Sssssshh...no la despiertes! ¿Quieres que te cuente?

Mirella voltea amirar a su madre, esta ha dejado de roncar, ydormida murmura disparates, luego con voz suave se dirige a su hermana.

-Cuentame...

- Mientras recogía las hierbas, sentíque alguien me miraba.Entonces me dívuelta, y allífrente a mívíal demonio.

Mirella con gran susto se tapa la boca.

- ¡No! ¿De veras lo viste?

- Síy por alguna razón no sentímiedo, más bien quedémaravillada.Mirella, el demonio de la colina no es cómo cuentan las leyendas. El es hermoso, es una criatura majestuosa.

- ¿Cuenta, cómo es?

- Es s un hombre alto, de aspecto joven,muy pálido, sus faciones erandelicadas, sus labios eran rojos colorsangre, sus ojos negros como un abismo y sus cabellos largos, muy largos y blancos.Iba vestidocómo un príncipe.

- ¡Hermana!Eso no puede serel demonio de la colina, tal vez te encontraste un forastero.

- No Mirella es el demonio, es que se me olvidómencionarte, pero de su frente protuberaban dos pequeños cuernos.

- ¡ Oooh entonces síera un demonio!

Mirella horrorizadase levanta, se aprieta el pecho y mira a su hermana con gran espanto.

-Por favor Aura no vuelvas a esa colina...¿Oh que tal si te ha seguido?Ay que seráde nosotras Aura!

Esa noche Mirella desconcertada trazo unos símbolos al pie de la cama que comparte junto a su hermana y luego de unas cuantas horas al fin pudo dormir.

La noche es serena y Aura duerme tranquila, una brisa fría invade la habitación.Unos ojos de abismo la contemplan en silencio. Aura sonríe traviesa, el demonio se muerde los labios...