Después de que un asalto violento le costó la voz al aspirante a cantante Jimin, nunca imaginó que alguien pudiera llenar el silencio, especialmente un criminal. Yoongi está en libertad condicional con un monitor de tobillo después de un año en prisión por crimen organizado. Escuchar a Jimin cantar lo inspiró a dejar una vida que no quería, y conocer a Jimin en persona les da a ambos la oportunidad de un nuevo comienzo. Lo que Yoongi no admite es que no era solo músculo, era un asesino a sueldo, y no puede dejar de lado que el hombre que robó la voz de Jimin todavía está libre.
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