No sabía cómo decirle a Margarita, que nuestra relación había terminado.
Mi vida con ella se transformó en algo insoportable. La cabeza me daba vueltas como una noria, buscando la solución. No podía seguir con aquella farsa.
Me dolía herir sus sentimientos, pero tenía que decirle que la dejaba. Mi salud corría serio peligro y mi único objetivo era acabar con aquella pesadilla. Por eso, vi el cielo abierto, el día que me dijo que había conocido a otro, primero disimulé aparentando una enorme sorpresa, después fingí una inmensa tristeza, para acabar con un insoportable (y falso) desconsuelo, pero cuando se alejó, comencé a dar saltos de alegría, tan altos, que me disloqué un tobillo, aunque la satisfacción suplió con creces el dolor producido por el percance.
Ahora disfruto de una recién estrenada, merecida y sanadora soledad, eso sí, con la pierna en alto durante un tiempo.
"Texto publicado en el libro Antología "Crisálida y otros Microrrelatos".
Editorial Letra Minúscula. Barcelona (España).
I Concurso de Microrrelatos 2017".
Спасибо за чтение!
Мы можем поддерживать Inkspired бесплатно, показывая рекламу нашим посетителям.. Пожалуйста, поддержите нас, добавив в белый список или отключив AdBlocker.
После этого перезагрузите веб-сайт, чтобы продолжить использовать Inkspired в обычном режиме.