wolfkingal Mike LC

Los primos Cooper deciden pasar las vacaciones juntos en la casa del abuelo Fred cuando ocurre algo que causara que sus tan preciadas vacaciones se vuelvan una pesadilla. La desaparición del menor de los Cooper tras seguir una especie de susurros, pero hay algo mas, él no es el único que los escucha.


Фентези Всех возростов.

#romance #familia #lgbt #seresmagicos
1
1.8k ПРОСМОТРОВ
В процессе - Новая глава Каждую среду
reading time
AA Поделиться

El Campo Del Abuelo


Sus cosas al fin estaban listas, había tardado cerca de una hora para preparar un equipaje que solo era para unas par de semanas. La habitación estaba echa un desastre total aunque era de imaginarse, Jonathan siempre era así, era un desastre a la vista de todos, nunca se podía quedar quieto, su hiperactividad iba mucho más allá y eso hacía que cosas tan sencillas como el ordenar una simple maleta le causara mucho estrés.

Tomó la maleta y bajó donde le estaba esperando su primo, él le iba a llevar donde su abuelo, las vacaciones pasadas entre varios habían quedado de acuerdo en ir a pasar el siguiente verano con el abuelo, querían al fin juntarse los cuatro primos sin tener que estar rodeados de muchos adultos y al final lo habían conseguido. Los tíos de Jonathan y sus mismos padres iban a estar ocupados ese verano, por lo cual los cuatro chicos iban a pasar esas vacaciones junto a su abuelo sin interrupciones de sus padres.

-Hasta que al fin bajas, los mellizos ya deben haber llegado al campo y tu recién vienes bajando con tus cosas listas -Peter parecía muy enojado y estresado, algo que era raro en él.

-Si bueno… pues estaba tratando de hacer mi maleta sin ayuda de mamá, ya tengo dieciséis como para andar recurriendo a ella siempre -camino hasta el auto y dejo la maleta adentro de éste, después se giró esperando que Peter se acercara, detrás de este estaba su madre que venía a despedirlos.

-Bien, al menos se que con Marina tendrán a alguien que les impida hacer muchas tonterías -Dijo Helena la madre de Jonathan, la mujer se cruzó de brazos al ver como su sobrino iba a reclamar algo- no dudo que seas el mayor Peter, se que tienes dieciocho años por lo tanto eres el mayor pero aunque los mellizos tengan la misma edad que Jona, ósea que Marina tiene la misma edad que mi hijo, ella sigue siendo la más madura entre todos ustedes.

El chico se colocó rojo mientras que él más joven se ponía a reír por lo que le había dicho su madre a su primo, su madre a diferencia de otras mujeres de la familia era la única a la que sus primos le hacían caso totalmente, ella siempre se mostraba firme con lo que decía y al parecer Marina, quien tenía a Helena como su tía favorita, estaba llevando la misma actitud.

Antes de que Peter le contestara a la mujer, Jonathan se acercó y le dio un fuerte abrazo despidiéndose de ella, a lo cual después siguió su primo.

-Ambos se cuidan y también cuiden a los mellizos -les dejo un beso en la mejilla a ambos.

Los chicos se dirigieron al auto y comenzaron a andar en el camino esperando llegar lo antes posible donde el abuelo, el campo estaba a cuatro horas de viaje pero esperaban demorar un poco menos.



-¡Cristopher Cooper, te metiste en mi bolso y sacaste mis jeans favoritos! -Marina estaba más que enfadada, había guardado varios pantalones, pero su mellizo le faltaba espacio en su bolso por lo que se metió al de su hermana para guardar unas cosas, pero a la vez de guardar algunas saco la secadora de pelo y los pantalones favoritos de la chica.

El chico levanto la mirada del sofá, habían llegado temprano en la mañana, donde ellos vivían estaba cerca de la casa del abuelo, aun así sus padres prefirieron irlos a dejar bien temprano donde el mayor de los Cooper.

Frederick Cooper, Fred para los amigos, era el abuelo de los mellizos, él había tenido tres hijos, ninguna mujer había nacido en la familia desde hace alrededor de dos siglos, hasta que llego la joven Marina Cooper, la pequeña joven de su hijo menor.

-¿Enserio vas a hacer problemas en las gloriosas vacaciones sin padres que pasaremos con nuestros primos? -el chico estaba buscando algo interesante en los pocos canales que tenia la televisión de la casa, su abuelo acababa de salir a ver a las ovejas.

Marina negó furiosa y salió de la casa dirigiéndose a los columpios que había afuera de está, se sentó un rato meciéndose tranquilamente, muchas veces su hermano le sacaba de quicio, no lograba comprender como aun no maduraba, a veces se ponía a pensar que aquello que decían que los hombres tardaban en madurar mucho mas que una mujer era cierto.

El viento chocaba en su cara, los cabellos se movían a la par de las corrientes de aire, le daba una tranquilidad pero a la vez le colocaba nostálgica, hace muy poco tiempo su mejor amiga había muerto en un crucero, la ultima vez que se habían visto era en aquel parque que estaba cerca de las casas de ambas. Lamentablemente nunca mas estarían ambas en ese parque.

Estaba demasiado concentrada en sus pensamientos cuando escucho un suave susurro que decía su nombre, miro a los lados donde no había nadie, tardo un buen rato en ver una silueta que entraba al bosque, la parte del bosque que llevaba al lago que había cerca de la casa de su abuelo, estaba segura que esa silueta le había susurrado.

Decidió volver adentro de la casa, estaba segura que pelear con su hermano la distraería de aquella silueta.



Unas cuantas horas ya habían pasado hasta que al fin llegaron a la casa del Abuelo Fred. Apenas se habían bajado cuando Marina y Cristopher se les lanzaron encima dando un gran abrazo a ambos chicos que acababan de llegar, detrás de ellos el abuelo estaba, al igual que los mellizos les dio un abrazo.

-¿Por que se demoraron demasiado? Creía que habíamos quedado en llegar temprano -pregunto Cristopher cuando ya todos estaban adentro sentados en los sillones.

Peter tenia una cara de cansancio que se notaba desde lejos, no planeaba conducir tanto sin hacer ninguna parada, lo cual no hicieron por ya estar llegando tarde.

-Pregúntale al renacuajo -dijo Peter mirando a Jonathan quien se encogió y dio una sonrisa nerviosa a lo cual los mellizos y el abuelo rieron.

-No fue mi culpa... bueno si lo fue pero trate de ordenar yo mismo lo que iba a traer -estaba jugando con sus dedos y moviendo levemente la pierna, no le gustaba estar tan quieto.

Los cuatro primos de un momento a otro se encontraron hablando de los planes que tenían para hacer ese verano, estaban seguro que lo iban a disfrutar demasiado. El abuelo había ido a ver la comida, ya estaban cerca de cenar.

-Jonathan... -una voz de un chico llego a los oídos del menor de los primos, creyó que alguno de sus primos les había hablado pero los tres estaban entretenidos conversando- Jonathan, encuéntrame.

El chico pensó que estaba loco pero su prima estaba con el mismo rostro, ambos se miraron, habían escuchado una voz, y Marina estaba segura que era la misma voz que había oído afuera.


26 октября 2020 г. 0:47 0 Отчет Добавить Подписаться
1
Прочтите следующую главу Una Historia Familiar

Прокомментируйте

Отправить!
Нет комментариев. Будьте первым!
~

Вы наслаждаетесь чтением?

У вас все ещё остались 5 главы в этой истории.
Чтобы продолжить, пожалуйста, зарегистрируйтесь или войдите. Бесплатно!

Войти через Facebook Войти через Twitter

или используйте обычную регистрационную форму