lawdeskin1572847836 Zislawdeskin L. Mordrake

No hay descripción para un hombre que se sumerge siempre en la misma dolencia de los placeres mundanos y contaminado por su propio y nefasto pesimismo hacía el final de sus días.


Conto Para maiores de 18 apenas.

#378
0
4.3mil VISUALIZAÇÕES
Completa
tempo de leitura
AA Compartilhar

Charla Frente al Espejo

No había pasado más de un mes, no era otro día dentro del va y ven del tiempo, incluso el oxido de los días que se respiraba era demasiado presente para el corazón errático que se colgaba de los labios en busca de otro trago de fermento, las cenizas en la boca y las uñas amarillas no eran señal de un claro futuro, solo era otra noche frente a frente con una charla amena, era volver a beber de ese pozo profundo donde alguna vez el pecado había sido ahogado.


No había pasado más de un mes, todo había sido lo mismo, el amanecer en sus ojos, el único recuerdo que había de tener cuando estaba frente a frente y de como poco a poco había tornado una sombría mirada fija hacía la nada, como quien intenta una mirada coqueta que no se sostiene y se evita. Que no era solo un hombre que seguía con las cenizas en la boca, ni los sabores en los dedos de los recuerdos húmedos de noches de algún motel.


"No había pasado más de un mes"-decía. No había más que esperar, las horas seguían y se iban con cada pensamiento errado que no dejaba de ser el peso claro de un día más de sus noches bajo el oxido y el fermento. Aquella canción sonaba de nuevo, no recordaba el título pero era un ritmo que no dejaba de hacer que moviera su pie al ritmo de una vieja canción dibujando una mueca tipo sonrisa en su cara. "Creo algo dejaste ver" -ella dijo. Él seguía de pie frente a frente, solo recordando el eco de una voz, mientras ella arrojaba todo a sus pies.


Había pasado más de diez años y no dejaba de ser el mismo demonio que habían levantado de la basura, aquel que se vendió por un poco de felicidad, aquel que buscaba solo un poco de misericordia entre todos los pecadores bajo sus sacramentos. No era distinto a ellos, pero luchaba día con día para hacer las cosas diferentes, para ser mejor.


Había pasado toda una vida frente a frente, sometido a una culpa que no había hecho más que ganarse por si mismo. No culpaba a los demás, la culpa era suya, por dejar de ser algo que no querían que fuera, pero ser lo que era no hacía feliz a quien lo quería, simple, tenía que ser para los demás y no para el mismo, y no era que deseara algo malo, conocía mejor que nadie el dolor humano, la compasión y el amor, pero no había hecho más que aplastar la felicidad de quien lo rodeaba, por que él no podía causar daño cuando estaba frente al espejo.



20 de Novembro de 2019 às 05:17 0 Denunciar Insira Seguir história
0
Leia o próximo capítulo las noches sin dormir

Comente algo

Publique!
Nenhum comentário ainda. Seja o primeiro a dizer alguma coisa!
~

Você está gostando da leitura?

Ei! Ainda faltam 14 capítulos restantes nesta história.
Para continuar lendo, por favor, faça login ou cadastre-se. É grátis!