Thomas Queen es un hombre guapo, muy guapo podríamos decir que si no fuera empresario podría haber desempeñado cualquier trabajo ya sea de actor, modelo, cantante, etc. Porque su cara y cuerpo resultan de lo más atrayente, gracias a esos penetrantes ojos verdes que tiene y el escultural cuerpo que se manda ya que se encuentra en los límites de marcado y musculoso, pero para desfortuna de muchos es un ser humano frío y calculador que solo utiliza a las personas para fines propios actuando como un hombre sin corazón, aunque para los negocios ser frío representa una cualidad importante pues es un empresario muy ávido, cuenta con una de las empresas más importantes y sobresalientes en el mundo de los spa teniendo el más lujoso y reconocido ubicado en el lugar donde se crean las estrellas, en Hollywood donde acuden actores, actrices, cantantes, presentadores, locutores, empresarios, etc. Aquellos considerados los más importantes y ricos del mundo. En pocas palabras un hombre estúpidamente rico y arrogante.
Pero Thomas siempre ha tenido el éxito con el que cuenta, porque proviene de una familia reconocida e importante en el mundo de los ricos y famosos gracias a la abogacía de su padre siempre gozo de una vida privilegiada, aunque en este momento de su vida es reconocido por su buen ojo para crear los spa más bellos y sofisticados del mundo con un éxito inminente en cada uno. Demostrando que la escuela de Harvard crea puros líderes importantes y demostrando además que los hombres que nacen en cuna de oro pueden adquirir más dinero y fama si se lo proponen.
Hace poco tiempo su socio y amigo Chris Ricardez un hombre menos rico pero con muchas más humanidad y humildad que él, le informó de un lugar alejado de toda civilización ideal para montar un nuevo spa, el cual se ha convertido en la nueva obsesión de Thomas, ese lugar cuenta con unas aguas totalmente cristalinas, naturales al cien por ciento, las cuales cuentan con una belleza espléndida e inigualable se cree que estas aguas tiene la capacidad de desmanchar la piel y rejuvenecerla con el simple hecho de sumergirse en ellas gracias a las sales minerales con las que cuenta, ubicadas en Jarbidge Nevada en un área un poco remota y solitaria. Chris conoció el lugar por su esposa Samanta, que de pequeña creció en ese lugar un poco alejado del mundo y de la civilización.
Samanta de Ricardez es una mujer felizmente casa con el empresario Chris Ricardez el cual conoció en un viaje el día menos pensado de su vida y después de ciertos roces con él termino enamorada, a ella le gusta la pintura y gracias a la posición ecomomica de su esposo puede tener una vida plena y feliz. La vida de Samanta cuando era soltera fue muy tranquila y divertida en Jarbidge gracias a Emma Cooper una chica alocada y aventurera que nunca desaprovecha las oportunidades que se le presentan para conocer cosas nuevas y que para suerte de Samanta es su mejor amiga y la propietaria de las aguas mágicas como ella las llama.
Emma Cooper es la propietaria de cincuenta hectáreas de tierra donde nacen las aguas, su casa es una cabaña la cual está situada encima del ojo de agua por lo que solo ella decide quién puede disfrutar de ellas, que generalmente son Samanta y Emma cada mes, pues son las fechas en las que Samanta la visita para pasar un fin de semana relajante sumergida en las deliciosas aguas y como si eso no fuera suficiente tiene un plus, la compañía de su mejor amiga y hermana de corazón, se podría decir en resumidas palabras, un fin de semana solo de chicas.
Emma Cooper por otro lado es una chica muy interesante, su belleza resulta desconcertante porque posee una estructura perfecta pero al mismo tiempo enigmante
aunque su belleza no se encuentra solo depositada en su rostro si no en toda su anatomía porque su cuerpo se encuentra, de acuerdo a los estándares de perfección del ser humano en lo que se llamaría exquisito y ni hablar del porte y la elegancia que la caracteriza típica de una persona de la realeza, es una chica dedicada al cultivo y siembra de sus hectáreas en un pueblo de Nevada, vive en compañía de su padre don Víctor Cooper un hombre de cincuenta y cinco años de edad que solo vive para su hija el cual solo desea verla feliz lejos del pueblo donde viven, pues él considera que su hija no es una mujer de pueblo más bien de ciudad, el único problema es que ella no ha encontrado al hombre indicado que la convenza de alejarse de ahí, por eso en lo que ese día llega él se propuso apoyarla en las decisiones que tome ya que considera que Emma tiene buen ojo para los negocios y ha sabido sacar adelante la cabaña y a todos los trabajadores que dependen de ella económicamente, sin contar lo inteligente que es para aprender cosas diferentes cada día, Emma es una total manitas para hacer cualquier cosa que se proponga es de esas pocas mujeres que no se creen ese dicho machista que existe, ese donde llaman a la mujer sexo débil. Siempre procura acercarse a sus amigos para aprender cosas nuevas aunque también para convivir con ellos, ya que es una mujer muy sociable y amable, aunque un poco cerrada para el amor, pero eso fue por culpa de un hombre, uno que le destrozo el corazón a temprana edad.
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