Érase una vez en un lugar muy muy lejano- bueno, para ser más precisos, ocurrió hace un par de años y fue justo aquí, en Madrid- descubrí que mi madre volvió a encontrar el amor tras la huida de mi padre, y planeaba casarse en pocas semanas. Al parecer ya tenía todo preparado desde hacia meses. En cuanto a su noviete,me dio una buena impresión cuando lo vi por primera vez, traía un traje azul marino acompañado de una camisa blanca y una corbata roja, haciendo contraste con su conjunto. En sus manos traía un gran ramo de rosas tan rojas como la sangre, para mi madre; para mi, trajo una caja terciopelada que contenía en su interior una costosa pulsera con figuritas de plata adornadas con pequeños trozos de diamantes.
Ya te puedes hacer una idea de cuán rico era, pero conociendo a mi madre, el dinero solo era una pequeña parte de él, su fidelidad y amor le eran suficientes. Su corazón aún estaba currándose después de la infidelidad del sujeto de mi padre, por lo que, no buscaba precisamente dinero y lujos, sino, un hombre en quien pudiera confiar y pasar a su lado el resto de su vida.
En mi parte, la entendía, así que lo único que hice pues aceptarlo y alegrarme por ella. Si ella era feliz , yo también.
Claro, eso fue antes que conociera al hijo del prometido de mi madre, Evan. Digamos que mi felicidad y paz duraron poco.
Obrigado pela leitura!
Podemos manter o Inkspired gratuitamente exibindo anúncios para nossos visitantes. Por favor, apoie-nos colocando na lista de permissões ou desativando o AdBlocker (bloqueador de publicidade).
Depois de fazer isso, recarregue o site para continuar usando o Inkspired normalmente.