Estoy harta de ser una esclava de mi teléfono, de todas formas nunca suena; quizá me moleste el hecho de que lo ocupo para cegarme y no para aprender cosas nuevas, me gusta tomar fotos aunque no sea fotógrafa, en realidad mis fotografías solo representan cosas para mí, momentos y lugares. También mi querida música, que no puedo vivir sin ella.
Recuerdo que estando en el hospital solo lo utilicé para escuchar música.
Odio mi celular, lo odio en verdad, pero también es cierto que lo necesito. Si salgo sin él y tengo una emergencia ¿cómo podría pedir ayuda?
La policía no usa telepatía y los hombres… ellos creen que somos mercadería.
Obrigado pela leitura!
Podemos manter o Inkspired gratuitamente exibindo anúncios para nossos visitantes. Por favor, apoie-nos colocando na lista de permissões ou desativando o AdBlocker (bloqueador de publicidade).
Depois de fazer isso, recarregue o site para continuar usando o Inkspired normalmente.