De ti tomaré Tu precioso mirar café vivo, Hurtaré de ti Tu encantador biotipo corporal. Uniré tus manos a tus brazos Con hilos de honestidad. De ti tomaré Tus párpados a medio abrir Portadores de sutil hipnosis. Hurtaré de ti La inocencia aparente Que despertó feroz en mí Desvelos y anhelos. Cuando complete tu existencia Y perciba en ti A cada una de ellas Mi corazón laterá en ti Luego de abandonar mi existencia.

Sonoridad Cada palabra, gesto o choque de algún cuerpo contra otro, crea sonoridad, la intensidad de esta depende de qué tipo de cuerpos tengan el roce, igual pasa entre humanos, el sonido emitido por el encuentro de distintas esencias, origina una melodía hermosa, al descuidarse comienza a resonar con vacíos prolongados, sonidos escabrosos, cambiantes al ritmo de la vibración, alcazando no sólo a los oídos, canta para todo sentido, así que mientras estés aquí, danza disfruta su ritmo.

(Situation: Eine berühmte Person – eine Frau – kommt in ein abgeschottetes Hotel, welches nicht ihren normalen Aufenthaltsorten entspricht. Sie mag den Angestellten nicht, in der sie in dieser Diskussion spricht und hält sich für toller.) „Wie war ihr Aufenthalt hier?“ Schweigen. Langes Schweigen. Sehr langes Schweigen. Dann eine schnippische Antwort. „Gut ist etwas anderes.“ Übertriebenes Augenverdrehen. „Das tut uns natürlich leid.“ Ohne jede Emotion. Ausdruckslos.

Nicht besonders überzeugend. „Jaja, klingt ja wirklich überzeugend.“ Genervt klingende Stimme. Schaut gelangweilt aufs Handy. Zuckt die Achseln und wartet darauf, nicht mehr von der ihm gegenüberliegenden Person genervt zu werden. Hand winkt herablassend.

A pesar de que se había tumbado en el césped para descansar, su cabeza no podía detenerse y dejar de dar vueltas como una noria. Pensaba en su futuro, sus planes de vida, qué deseaba y hacia dónde se estaba encaminando. Quería convertirse en martillo e ir rompiendo cualquier muro o pared que se le pusiera por delante. Aquella mañana le habían dicho que no servía para nada y que no tenía esperanza al menos que un milagro llegase, e iba a demostrarles que se equivocaban. No iba a rendirse.

Ha pasado casi un mes después de ti,y aún no puedo admitir que ha sido realmente un "después" cuando te sigo buscando tanto como el primer día en que te vi partir. Aquí sigue tu eco, sigue tu voz y aunque no puedo decir que te he llorado mares cada noche y día, ampoco he de mentir que la sonrisa de mis ojos se extienden tanto en la mención del sol. Te sigo buscando desde aquí hasta Marte, desde aquí a la Luna y entre nuestros sueños en París. Tuya siempre, J. [En un inexistente después de ti].