La Soledad Suivre l’histoire

Me he visto detrás de la ventana, me veo triste, roto, como si algo me faltase, no es fácil hablar de esto, pero la vida me ha dado tantas vueltas.

Sentir este vacío, lleno de pedazos rotos; lleno de desilusiones que riegan este dolor, fingir el sonreír se volvió normal.

Veo aquellas flores marchitas a mis costados, y las puedo entender, pues ni ellas quieren sonreír, me acompañan en mi soledad.

La ventana se llena de lágrimas que provienen de mi alma, y aquel flashback me impacta como flecha directamente al corazón.

Desapareció aquella mirada llena de esperanza, y en ella solo yace aquello que tanto extraño.

Recuerdo mi felicidad bajo la lluvia, pero ahora solo la acompaño con mi llanto… y en ocasiones yo suelo ser aquella lluvia.

Aquel paraguas negro me acompaña mientras escucho aquel llanto de funeral, esos gritos de súplica, de perdón y remordimiento.

Suelo estar acompañado de risas falsas, de hipócritas que fingen que todo está bien a través de la bebida.

Estoy harto de la compañía inservible de algunos, de muchos, solo recuerdo a mis verdaderos amigos.

El piano triste suena por el balcón, y es imposible no ver aquel gato que me regalo mi querida amiga que hoy ya no me acompaña.

Escucho por las mañanas a un pajarito que picotea mi ventana, y suelo preguntarme… ¿Tendrá frio?... mi respuesta siempre ha sido que sí, pero nunca le abro… ¿Quién quisiera estar con algo más frio?

Mis preguntas nunca las pude resolver, y a Dios le exijo por este dolor, no lo culpo, pero sé muy bien que me podría responder y no lo hace.

Miro siempre la neblina, y me siento libre en ella, sentir ese frio por mis poros me hace creer que todavía estoy vivo.

Mis manos y mi piel cada día están más pálidos; y cada día suelo alucinar con mis lágrimas caídas de mis ojos, porque de tanta costumbre de llorar suelen marchitarse mis pupilas.

Aprendí a dormir todo el día y tener insomnio por las noches, a acompañar con pastillas y alcohol a la tristeza de la tarde.

Ya no veo los atardeceres de colores encendidos; pues el arcoíris se volvió gris.

Narrativa corta Vol 1.

1 de Mayo, 2020