En algún lugar de la tierra, en una ciudad como cualquier otra. El sol se comenzaba a ocultar y la luna había salido hace mucho.
Un joven como cualquier otro salía de la universidad.
Ese soy yo “Jack”, una persona de apariencia promedio, excepto por que tengo los huesos un poco anchos, bueno, tal vez este un poco subido de peso.
Pero soy un estudiante universitario cualquiera, o eso es lo que los demás ven. Yo tengo el cerebro más privilegiado que puede existir o eso quiero pensar.
Ahora estoy en mi último día del ciclo de la universidad y así es como esta por termina el peor día de mi vida.
*Suspiro* (Jack)
<<Hoy saque 4 de 20 en el examen de matemáticas ¿Qué le diré a papá?>>(Jack)
<<Ha.… solo es porque no me esforcé y no estudie, si me pusiera serio nadie me podría igualar.>> (Jack)
Así mientras salía del edificio de la facultad con mis delirios, pude ver que, a lo lejos, al lado de la puerta un amigo me esperaba con la mano extendida al aire saludando. Por alguna razón no me quería encontrar con él
¿Por qué su cara me molestaba? ¿por qué te hiere con su bondad inconsciente? ¡no! Es porque mi cuerpo no puede evitar reconocer su superioridad en nuestra sociedad al agacharse un poco cuando lo saluda.
Él era un tipo de unos 167 centímetros, piel ni blanca ni morena, nada agraciado y con un pelo negro intenso desordenado, pero bien cuidado. Y hoy traía un atuendo común, pero por alguna razon, apesar de ser un tipo comun, ligeramente reservado, tenia una legua de oro cuando hablaba con chicas. Simplemente molesto.
[Hola Snorlax ¿cómo fue el examen?] (Amigo A)
[Me fue mal ¿Qué quieres espantapájaros? No me llames así ¿no ves que hieres mis sentimientos?] (Jack)
Con un tono burlón le hice hinca pie en que me hacía daño, mientras escondia el verdadero disgusto.
<<Ese apodo de nuevo, hasta tres veces es divertido, pero más que eso es molesto>> (Jack)
[¡Hay perdóneme! señorito, solo venía a preguntarle si quiere jugar.] (Amigo A)
Mientras me respondía de forma sarcástica, me invitaba a jugar señalando la cancha de futbol de la universidad, donde se encontraban algunos compañeros.
<<Tal parece que les dieron permiso de jugar en el último día.>> (Jack)
*Suspiro* (Jack)
[Está bien, jugare… Si pago tu apuesta ¿vas al arco?](Jack)
Sin embargo, no pasaron ni dos segundo y el comenzó a chasquear su lengua al ritmo en que agitaba su dedo índice derecho en señal de negativa.
[Lo siento por ti, pero hoy todos estamos pobres] (Amigo A)
Terminando de decir eso comenzó a correr a la cancha, pero empezó a hablar otra vez, esta vez gritándome desde lejos.
[¡La apuesta es 0,50!¡Vas al arco, porque tu cubres más espacio!] (Amigo A)
<< Algún día le golpeare como se debe.>> (Jack)
Con ese disgusto, comencé a correr detrás de él.
***
La noche ya había caído.
Después del partido y haberme despedido de todos, recordaría algo vital para la supervivencia.
*Suspiro* (Jack)
[Ha, es cierto.] (Jack)
Recordé que hoy me tocaba comprar la comida de la semana.
<<Rayos, me olvide de la bolsa de mercado; tendré que meter todo en mi mochila. Doy gracias a haber priorizado su tamaño antes que su diseño.>> (Jack)
Recordando lo que tenía que hacer me puse en camino a la tienda donde siempre compraba.
Era de esas donde puedes conseguir de todo, pero esta tenía un distintivo muy claro, un gran ventanal en la entrada.
<<Bastante extravagante y exagerada>> (Jack)
Era lo que pensaba cada vez que me encontraba en frente de este ventanal, aun así, no me desagradaba, porque también servía de espejo.
Disimuladamente veía mi reflejo en él, ese gran pedazo de vidrio, donde solo tú te puedes ver con tanto asco.
<< Rayos, tan guapo como siempre >> (Jack)
Era lo que pensaba mientras miraba mi reflejo, a la vez que se dibujaba una pequeña sonrisa bajo mis mejillas. Luego inmediatamente miraba el resto de mi cuerpo y mis expresiones se borraban, presas de la realidad.
<< ¿Qué es eso?>> (Jack)
Aprete la mirada y lo vi en el reflejo del ventanal, se podía ver como al otro lado de la calle, tres vándalos acorralaban a un joven y le quitaban todo lo más rápido posible, mientras que el joven con los brazos levantados se resignaba a conservar sus cosas.
<<Mejor alejarse de los problemas>> (Jack)
Siguiendo la misma rutina de siempre agarre la parte baja de mi casaca y la estire para cubrirme lo más posible, luego remangue la casaca y entre a la tienda. Pero una vez dentro me llamo la atención alguien que alcance a ver de reojo.
Era un joven de edad cercana a la mía, de mí misma estatura, 175 centímetros, cabello castaño liso y bien peinado, piel blanca, ojos marrones y una expresión triste mientras leía un libro, una novela ligera. Ya lo había visto antes en el campus de la universidad, pero no lograba recordar cuál era su nombre, aun si lo supiera no le hubiera hablado si él no lo hacía primero, después de todo pienso que es raro acercase a alguien solo por conocer la novela ligera que está leyendo. Mientras desviaba mi mirada de él, solo podía hacerme una idea de su personalidad.
<<Que mal educado, esto no es una biblioteca, ya vas por la mitad.>> (Jack)
Bajé la mirada y caminé hasta estar en paralelo con el joven, así pude ver al señor que atendía detrás del mostrador. Un señor de tes morena, cabello negro corto que decía serví en el ejército y una sonrisa de tener de amigos a todo el mundo.
[Buenas tardes, Don, ¿todavía le queda carne?] (Jack)
Con una voz casi ahogada hice mi pedido, ya que a pesar de siempre comprar aquí, jamás me había dignado a seguir la conversación a el señor, hasta el se canso de tratar.
<< Mierda, mierda, mierda ¿Me escucho? >> (Jack)
Me sonrojé de la vergüenza al no recibir una respuesta del señor.
<<Por favor, dígame que sí o me tendré que aguantar la mirada de reprensión de mi hermano por no haber hecho las compras temprano.>> (Jack)
Sin embargo, seguía sin recibír respuesta alguna que pudiese escuchar por parte del señor, así que levanté la mirada que había clavado en el suelo desde que la desvié de aquel joven.
Lo único que pude ver fue su boca moviéndose bruscamente.
<< ¿Qué es lo que dice? no lo escucho.>> (Jack)
Lo único que distinguí fue a este haciendo señas y gritando, pero no le podía escuchar.
Siguiendo la dirección a donde apuntaba el señor con sus señas, voltee la cabeza, entonces logre divisar atraves del ventanal un camión que estaba a escasos centímetros de estrellarse con la tienda, pero eso no fue lo que me llamo la atención, sino más bien el hecho de ver que el joven sinvergüenza de antes, estaba brillando.
Lo único que se me vino a la mente fue.
<< ¿Estoy soñando? ¿los humanos podemos brillar? ¿Por qué no vine más temprano? ¿voy a morir? >> (Jack)
En un momento el cuerpo del joven brillante fue despedido a gran velocidad tomando como dirección a donde me encontraba, al mismo tiempo que el vidrio volaba por todos lados. Fue en este momento cuando comencé a ver lo que todos llaman: Ver pasar tu vida frente a tus ojos, era un intento desesperado de mi cerebro por encontrar alguna forma de sobrevivir.
<< Mamá >> (Jack)
Lo único que pude hacer fue levantar los brazos por reflejo. Entonces el cuerpo del joven brillante se estrelló en mis brazos, posiblemente rompiéndomelos y lanzándonos a ambos a la pared del fondo de la tienda.
Fue por un solo momento, pero juraría que vi todo en tercera persona antes de que chocáramos con el muro.
Con el impacto escuche como mis costillas se rompían, por si fuera poco, antes de que nuestros cuerpos siquiera tuvieran tiempo de comenzar a caer tras golpear la pared, el camión arremetió contra nosotros clavándonos en ella.
Un hecho impresionante del que no me daría cuenta en ese momento fue que las partes de mi cuerpo no salieron volando por la potencia del golpe, tal vez podía deberse a las paredes baratas de la tienda del señor, además del almacén en la parte trasera, llena de paquetes de papel higiénico que acolchonaron el impacto.
***
Una luz naranja comenzaba a cubrir mi vista mientras me esforzaba por abrir los ojos, mientras un pitido resonaba en mis oídos.
<< ¿Qué está pasando? ¿Dónde estoy?>>(Jack)
*Piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii*
El pitido se intensificaba mientras me despertaba.
Apenas habiendo despertado mis sentidos no respondían con lucides o eso pensaba.
De pronto luces blancas comenzaron a entrar por mis ojos de forma espontánea, eran linternas que buscaban a alguien.
[¿Cómo es… el conduc…?] (Desconocido)
[Nada…no podem…nada] (Desconocida)
<< ¿Quién es? ¿hay alguien ahí?>> (Jack)
Solo podía ver siluetas de personas debido a la luz que en momentos se enfocada en mis ojos. Pero segundos después mis ojos se acostumbrarían, dejándome ver un escenario que jamás quisiera haber visto.
Todo se escuchaba muy tranquilo a excepción del pitido de mis oídos, sin embargo, veía la escena de desesperación teñida de rojo fuera de la tienda, hubo quienes fueron heridos por el vidrio roto que voló a la calle. Tal parece que aquellos vándalos se demoraron demasiado robando y ahora uno de ellos se esta desangrando en la calle, mientras los otros tratan de hacer presión.
Ahora fue cuando me di cuenta que los que los que entraron con linternas fueron una pareja de policías en busca de sobrevivientes en el interior de la tienda. Por lo visto el señor de la tienda esta siendo atendido por un tercer policia fuera de la tienda.
Para entonces el joven sinverguenza ya habia dejado de brillar.
***
Minutos más tarde, llego una ambulancia de la cual bajaron algunos paramédicos. Estos se apresuraron a revisar a los heridos, sin embargo, ninguno se dirigió hacia mí.
<<Por fin llego la ambulancia ¿Por qué no se apresuran a sacarme de aquí?>> (Jack)
Entonces fue cuando uno de ellos se acercó a ver al chofer y tuve la oportunidad de llamar su atención. Le miré a los ojos, pero el solo apartó la mirada cuando se percató que todavía seguía consiente. Lo único que veía en su cara eran los sentimientos de la rabia y tristeza causada por mi sufrimiento y su impotencia.
<<Así que no hay salvación para mí ¿tan mal estoy? por lo menos no duele. Supongo que es porque estoy cada vez más cerca de la muerte.>> (Jack)
<<Que extraño…la vez que me asaltaron tuve miedo por dos semanas y no queria salir de casa, debido a que pensé que podría morir en caulquier momento…pero ahora estoy muy tranquilo, ojalá este pitido se calle pronto >> (Jack)
***
<< ¿Mmmm? ¿Me dormí? ¿Cuánto tiempo ha pasado ya? ¿Ah? Perdí la vista>> (Jack)
Sin embargo, el pitido de mis oídos había parado, así que todavía podía escuchar el bullicio de la gente.
<< Diablos ¿cómo es que todavía sigo vivo? no sé si debería agradecer a mis padres por darme un cuerpo tan resistente.>> (Jack)
***
Ya comenzaba a hacer frio, por fin comencé a temblar y a sentir que el aire me faltaba.
<< Por favor, alguien, quien sea, sálveme ¿Por qué nadie me ayuda?>> (Jack)
Soltando las lagrimas de mis ojos e intentando con mis débiles manos sacar el camión incrustado en mi torso
<<No, ¿Por qué yo? ¿Por qué a mí?>> (Jack)
El miedo por fin hizo acto de presencia.
<<¡¡¡MALDICION!!! ¡¡¡MALDICION!!! ¡¡¡MALDICION!!!…>> (Jack)
[…N…o qui…ero morir] (Jack)
Expulsando todo lo que quedaba en mis pulmones, pronuncie mis últimas palabras con la misma patética voz ahogada con la que pedía las cosas. Recordando lo que me dijo una vez mi padre cuando envenenaron a mi perro.
<<Los animales son testarudos cuando se trata de morir.>> (Jack)
Vislumbrando ese ultimo recuerdo, por fin, estaba muerto.
Merci pour la lecture!
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