davidbg379 𝕯𝖆𝖛𝖎𝖉 𝕭𝖑𝖚𝖒

PARTE 2: Historia en progreso. . THE BLOODY BIBLE UNIVERSE COLLECTION . David Blum .



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CAPITULO I | AVE MARIA

┌──────── ∘ ° ❉ ° ∘ ────────┐

Terminaré de cobrar tarde o temprano mi venganza, aunque parezca imposible. De venganza es de lo que más sé hablar, por eso, cueste lo que cueste calmaré estas ganas de querer castigarlos por la muerte de mis seres queridos.

└──────── ° ∘ ❉ ∘ ° ────────┘


Miré a esa escoria con el desprecio que se merecía, le apunté con el arma y disparé con la furia que me venía consumiendo. Quedó tendido en el piso, se había caído de la silla y sus ojos quedaron desorbitados, parecía un muñeco de trapo. Su sangre llegó hasta mí, quería seguirle disparando, pero era un desperdicio de balas. Pero, mi ira no se apaciguó. Creo que mis expectativas eran muy altas. A mi cabeza llegó el recuerdo de todas esas sensaciones que había tenido horas antes de entrar a aquel lugar…


Al llegar, de una patada abrí la puerta, caminé por el pasillo y mi grupo comenzó la búsqueda. Yo me dirigí hábil y sigiloso a su oficina; me senté en su silla de un fino cuero, esperando al llamado del grupo. En el escritorio vi una foto de él y Martina, me dio mucha cólera y la lancé con toda la fuerza a la pared, se rompió en varios pedazos.


—¡Will! —gritó Susan—. ¡Ya lo hemos encontrado!


Tiré la silla, la cual ocasionó un golpe ensordecedor; empujé el escritorio, y aun paso ligero me dirigí a las escaleras, las mismas que me llevarían a la gloria. Disfrutando de la adrenalina que causaba cada uno de mis pasos y me recibió Susan, la cual estaba justo donde terminaban los escalones y donde iniciaba el segundo piso, seguí andando hacia su habitación, con carcajadas que no paraban, con la mirada de un asesino, con la maldita sed de ver por fin una puta bala en su frente. Y, eso sí que me hacía vivir, era mi hobby macabro. Susan abrió la puerta y allí estaba, el malparido de Jeison Paul, atado a la silla de terciopelo, estaba allí, tan indefenso. El grupo estaba reunido alrededor de él, como si de una secta se tratara. Metí lentamente mi mano al bolsillo del pantalón y cogí el arma, metí la bala que pagaría por la vida de cada individuo asesinado por Satanás.


—Qué dicen ustedes —inicié, asesinándolo con la mirada—. ¿Lo mato? ¿No lo mato?


—Vamos bebé —respondió Susan con risa satánica, única en el mundo—. ¡Mátalo!


—Y ¿Qué dices tú… —le apunté justo en la mitad de su frente—, …Jeison? —le escupí el rostro y luego me reí de las risotadas que daba Susan. Hay que admitirlo, su risa es muy contagiosa.


El descarado logró abrir la boca, pero de su jeta no salían palabras, sino silencio, solo eso… Estaba helado, ni con la bala en su frente y ya parecía tan muerto. Solté otra carcajada, aún más fuerte, mientras jugueteaba de una manera un tanto loca con el arma, sí, esa que le pondría final al oscuro reinado de Jeison Paul. Cada cierto rato le hacia el amague de que le iba a disparar, en una de esas fui tan convincente que el pobre se meo en los pantalones, tanto miedo que le tenia y esa solo un marica.


—Vaya, vaya. Pero mira nada más —me temblaba un poco el revólver, quizá por la emoción del momento, claro está—. ¿Ahora quién no puede hablar? —añadí y volví a reír—. ¿Quién ríe ahora? —Jeison solo temblaba.

—Lo siento —por fin logró susurrar esas palabras.


—¿Lo sientes? No mientas, cabron. —Me acerqué y le pegué un fuerte puño en el estómago, se tambaleó mientras se quejaba con algunos sollozos—. Eso sí lo sentiste. Dolió, ¿no? Igual que a mí me dolió lo que hiciste. ¿Sabes? Me arruinaste la vida.


—¡La puta policía está llegando! —Gritó Justin Gray y empezó a oler a humo en todas las esquinas—. ¡Ya está! —Y esa fue la señal. Estaba tan concentrado que el tiempo se me pasó volando, y ahora nosotros tendríamos que salir volando de allí.

Miré a esa escoria con todo el desprecio que se merecía, lo maldije una y otra vez, disfruté de ver su mirada de ternero degollado, le apunté con el arma y…


—Púdrete en el infierno —estaba a tres segundos de cobrar mi venganza—. Maldito seas Jeison Paul, la mataste, ¡TÚ LA MATASTE! —solo fueron tres segundos para ver su exquisita sangre, para ver cómo la bala le atravesaba el rostro, lo iba a volver mierda… tres, dos… uno—, Maldito seas.


Le disparé con toda la furia que me venía consumiendo y en ese momento se descargaron todas esas emociones que tenía reprimidas, pero una en especial fue la que reinó por encima de las demás… la locura. Quedó tendido en el piso, fue tal el impacto que simplemente se fue de bruces, sus ojos quedaron desorbitados, ojos en los cuales ya no había vida sino negra oscuridad, tan negros como la muerte misma. Parecía un muñeco de trapo, maldito sea su nombre, maldito.


Su sangre llegó hasta mí, y pude degustar de su sabor, ese sabor de metal oxidado, es simplemente exquisito. Sí, lo de locura… me queda perfecto, ya lo sé, no me lo tienen que decir. Y aun así quería seguirle disparando hasta vaciar el cargador, pero era un desperdicio de balas.


Me acerqué de prisa, vi su rostro que está grabado con lujo de detalles en mi memoria, justo en la mitad de su frente estaba el agujero que dejó la bala, mientras la sangre le recorría la cara, cada uno de sus blancos cabellos se empezaban a teñir de rojo, al igual que el suelo, en el cual ya había un mar de sangre, poco a poco fue avanzando hasta manchar mis zapatos, al fin estaba muerto.


Luego empezó el fuego en aquel lugar, el paraíso se convirtió en un infierno y todo se llenó de espesa humarada, lo que sea que había sido ese lugar se convirtió en naranja y rojo. Y el piso empezó a caerse a pedazos. Al igual, el techo se derrumbaba. Todo empezó a arder en llamas, todo se consumía tan rápido… el abismo debía lucir exactamente así.


Salí corriendo con todo mi grupo lo más rápido que pudiéramos, antes de que la bomba explotara, y tuvimos que cruzar todo un jardín con fuentes, que apenas si logré ver, corrí muy rápido, lo que podían darme las piernas, empecé a marearme, al llegar a la portería. Luego abrí la puerta… y allí estaban.


Saqué mi arma y disparé, y todos ellos abrieron fuego contra todos nosotros. Entonces tiré el arma al suelo, alcé las manos y me di una vuelta de 180°. Y miré, estaba toda la mansión llena de fuego, aquel hermoso y costoso lugar que ya no existía. Todos los demás integrantes realizaron lo mismo que yo hice. En segundos… la bomba explotó.


Otra carcajada macabra me invadió…

1 Janvier 2023 21:25 0 Rapport Incorporer Suivre l’histoire
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A propos de l’auteur

𝕯𝖆𝖛𝖎𝖉 𝕭𝖑𝖚𝖒 Nació en 2005, en Cali - Colombia, empezó a escribir a la temprana edad de trece años una novela romántica, la cual decidió abandonar para no causar daños oculares a sus lectores y así ahorrar varias demandas. Siempre fue un chico al que todos lo tacharon de raro; ha ganado premios como Mención Especial en el XIX Concurso Escritores Autónomos de la Universidad Autónoma de Occidente, obtuvo una Mención de Honor en Sea Shepherd Uruguay, participó en el Intercolegiado del Teatro Municipal de Cali.

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THE BLOODY BIBLE UNIVERSE
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Un día normal, como cualquier otro día del año, pero un suceso lo cambiará todo, la línea de la historia de la humanidad se verá en peligro. ¿Acaso tomamos mucho anoche o sí está ocurriendo? ¿Es acaso una guerra divina? ¿Es el fin del mundo? Literalmente... el cielo se cae. . ...No nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén. . THE BLOODY BIBLE UNIVERSE COLLECTION . David Blum En savoir plus THE BLOODY BIBLE UNIVERSE.