Una tarde mientas esperaba el transporte a casa, vi pasar un hombre, yo diría bastante mayor, que con mucho esfuerzo empujaba una silla de ruedas, en la cual estaba postrado un joven de unos 30 años, con apenas algo de movilidad en una de sus manos, note que en medio de sus piernas llevaba un pote, el cual deduje inmediatamente que era para recibir la limosna o ayuda caritativa de la gente, me acerque a el, y al darle algo de dinero note que aquel joven no podía ni siquiera hablar para simplemente dar las gracias, mucho menos entablar una conversación, bueno con una sonrisa me aleje; y en el camino reflexionaba sobre ese momento, en ese punto llegue a la conclusión de que ese hombre en la silla de ruedas era un MENDIGO DE LA VIDA, un instrumento de limosna, un medio para conseguir dinero, y el hombre mayor que lo empujaba siempre había llevado VIDA DE MENDIGO, estaban en mi mente una moneda de dos caras en una puedo decir estaba el MENDIGO DE LA VIDA que obligatoriamente tenia que esperar la caridad de la vida, de las personas y de hasta de Dios, y en la otra cara aquel hombre que prefirió llevar VIDA DE MENDIGO aprovechando la caridad de la vida, de la gente y Dios también, todo con un mismo fin subsistir y no vivir.
Bien cabe aquí lo que solía decir Aristóteles:
¨SOMOS LO QUE HACEMOS DIA A DIA, DE MODO QUE LA EXCELENCIA NO ES UN ACTO SINO UN HABITO…¨
Merci pour la lecture!
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