Appetite ✧ jinmin Suivre l’histoire

Jimin no quería llegar a esto pero era la única forma. Hace milenios que no sentía que le daban duro por atras, mas ahora estaba casado aunque claro no es como si su esposo no lo consintiera y no, no estaba diciendo eso, solo que este parecia amar mas a comida que el.

Habia creado un ambiente más "romántico" prendió las velas.

Y no esperaba que funcionaria porque ninguna de sus ideas para que este le haga el sexo fallaba.

Fallar no era una opción

—Puedo saber que es ese olor delicioso que trajo mi nariz hasta aqui?

— Querido! — Jimin se quito los guantes y retiro un poco la silla para que ella pudiera sentarse, luego él se sentó al otro extremo — sientate.

Miro con disimulo a través del cristal de la copa a su esposo, quien veía la comida con hambre y desconfiado.

—Se ve delicioso y lo aprecio mucho solo que...

—No te lo vas a comer? oh tanto esmero que le puse — se las arregló para que su puchero parecía real.

— Quien dice que no voy a comermelo — cogió una fresa y la envolvió con chocolate para después llevársela a la boca —sabe bien.

Tan ingenuo querido. Fue lo que pensó Jimin con una sonrisa dulce.

El peliplata espero paciente a que el afrodisiaco surgiera efecto.

Por suerte no tuvo que esperar ya que Seokjin comenzo a respirar agitado.

—Te sientes bien — fingió estar preocupado — parece que tienes calor.

Se levanto de lo mas tranquilo de la mesa y se sento en su regazo.


—Dime querido —Fue desabotonando la camisa de su esposo poco a poco revelando el pecho poco marcado de su compañero.


Y aprovechó la cercania dio una lenta y torturosa lamida a este.

— Jimin — jadeo al sentir los besos seductores de su esposo.


—Si cariño — da otra lamida pero esta vez a la curva entre el cuello y hombro.


—Besame — decía volviendo a sentir los efectos del afrodisiaco sobre el razon por lo que se dejaba hacer.

Permite que la lengua de su menor entre y juegue en el interior de su boca, seokjin deja que la camisa le sea quitada. Siente el frio de las manos de jimin abrirle el pantalón.

Jimin se arrodillo y froto el falo miro los ojos brillantes cielos solo eso fue suficiente llevo su boca al pedazo de carne palpitante.

—Cariño.

De sus labios salio un gemido de placer al sentir la lengua de su amante lamer su miembro.

Cuando iba a venirse el menor lo torturó alejando su boca.

Se quita la parte de arriba de su ropa, deslizo su pantalón hacia abajo quedando desnuda antes la azulina mirada de su marido.

— Que haces — pregunto sobresaltado.

Jimin cogió una fresa del recipiente y lamio lujuriosamente el chocolate.
—Si que eres una cosita bastante lujuriosa amor.

Gimió en respuesta, la lengua traviesa del mayor torturo uno de sus pezones, tirando de ellos con sus dientes.




el pene de pellirojo se dirigía a su humeda entrada amenazante .

—Entonces que estas esperando, follame — extendio las piernas a cada lado dando una excelente vista a su esposo de su orificio.

No lo pensó mucho y entro en ella en una embistiendola.

—Jimin, jimin — Gime su nombre comenzando con el vaiven lento .

El peliazul abraza con sus piernas las caderas del contrario.

—Me encantas cariño pero puedes darme más fuerte — pidio acercándose a su oido.

El mayor dio una fuerte embestida haciendo que este arañase su espalda.

— Mierda jin.

— Joder,sabes como ponerme caliente — Le levanto una pierna y le coloco de lado sobre la cama comenzó a entrar y salir con rapidez.

El peliplata veia como el miembro del mayor salía y entraba de su interior con velocidad sin comtemplamientos. Sin compasión.

Y eso le encantaba

El de cabellos plateados lo tumbo sobre la cama.

Ahora estaban en una diferente posición, donde el se encontraba acostado en la cama.

—Jimin — gimio viendo al menor autopenetrarse con su miembro unas veces dando brincos y otras veces sólo moviendose en circulos.


La abrazo por la espalda, mordió los hombros hasta dejar la marca de dientes en su piel, cosa que excito aún más al rubio.

—Oh Si eso me gusta.


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El mayor cambió las posiciones la tumbandolo sobre la cama nuevamente de cara sobre el colchón.


Jin lo tomo de los cabellos, imponiéndole un ritmo más rápido.


—Oh eres magnífico — y jimin se dejó ir manchando la mano de su esposo.

Jin llego al clímax despues de el, al sentir las paredes anales de su esposo apretar su miembro, llenandolo con su esencia. Salió del menor y se hecho en el colchón.

Jimin acaricio el pecho de su mayor, satisfecho.

—Si querias tener relaciones era que lo digas — Decía viendo a su tierno pero lujurioso esposo.

—No eres tan facil de convencer esposo mio.

Hico un puchero con sus dedos delineando las marcas de sus arañasos en su espalda.

—Pero hiciste trampa — Protestó.

—Oh bien sabemos tu y yo que lo disfrutaste — lo abrazó por el cuello sin lograr desaparecer la sonrisa de plena satisfaccion por haber.


Por su parte el se acercó a su mejilla para lamerla haciendo que naruko soltara un jadeo de sorpresa.

—Nunca eh negado eso.

Cuál gracias? Lean la Biblia pecadoras 👿