wereyes W. E. Reyes

La valentía hecha justicia en la premura de lograr lo imposible. Derrotar a aquella que nos oprime.


Histoire courte Tout public.

#castillo #challengeroctubre #witchober
Histoire courte
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I

Usé el relicario que me había concedido Marcus para descifrar aquellos extraños signos, puestos en un escueto letrero, frente al castillo. La entrada se encontraba sellada con gruesas cadenas que cerraban unas pesadas puertas unidas a voluminosas columnas de mármol.

La voz del espíritu de Casandra, que se aparecía en una niebla verde circular frente a mí, recitó: “Fortaleza en mantenimiento. Sin horario de apertura o motivos de cierre”.

Que clase de mente estrafalaria tendría este humor tan retorcido. Me preguntaba como aquella edificación diseñada, por los mismos padres del reino, para protegernos podía tener semejante anuncio en letras doradas.

Tal vez la demente locura de su actual dueña pudiese darme alguna pista. Aunque la intimidante figura de la cabeza de Quimera, por cuya boca debía salir agua, chorreaba sangre espesa como la salsa y que llenaba la redonda fuente a sus pies... era una clara advertencia. ¿Por qué estaba, yo, ahí? Era mi curiosidad o era mi deber. Tenía que haberme reportado horas atrás a mi grupo de Paladines del Honor.

Quizás confiaba demasiado en la espada Destello y en mi escudo Marea de Fuego. Imbuidos ambos con la magia blanca del hechicero maestro protector de nuestro mundo. El pesar arrastraba mi alma, como toneladas de oro mal habido, a oscuros abismos infernales. Recordaba la conflagración desatada ocurrida decenios atrás.

Aquél ser indolente embriagado por la lujuria de los deseos de juventud eterna, que había regado los cuerpos de sus víctimas por el campo de batalla... en su mayoría niños, en búsqueda de la inmortalidad y la belleza sin fin. Tal aberración sólo merecía mi desprecio infinito, por ella… la señora dueña de este fortín de negrura: en el color, y oscuridad profunda de espíritu corrupto.

Las palabras de Marcus retumbaban en mi mente:

“No habrá paz, orden ni solaz mientras el demonio esté vivo en la fortaleza negra”.

No dejaría que nadie pagara por las culpas de otro, o por la vileza del opresor que subvierte voluntades y futuros ajenos. Me armé de valor eterno y me dispuse a enfrentar mi destino: con un golpe de mandoble destruí el sello de la puerta del mal.

Entes condenados salieron a mi encuentro, no perdí tiempo, mis golpes en corte vertical, horizontal y diagonal destruían aquellos secos huesos. Sus armaduras volaban en azarosas direcciones. Subí por serpenteantes peldaños de escaleras carmesí. Un dragón, destruyendo los muros aledaños, se interpuso en el camino.

—Soy Furia de Flamas el guardián de mi ama, infecto y minúsculo humano. Date por vencido. No pelees deja que te queme y te devore.

—¡No me detendré! Ante ti o ante nadie. La verdad será mi escudo.

—¡Muere entonces!, estúpido y arrogante humano.

El dragón arrojó una ingente cantidad de plasma ígneo. Puse mi escudo frente a él, el cuál devolvió el fuego multiplicado por cien sobre el flamígero escupe fuego protector de la todopoderosa Amaris.

El reptil no salía de su asombro, ni siquiera sus escamas mágicas de dureza superlativa pudieron protegerlo de esa quemante flama, y comenzó a derretirse en una roja lava que lo arrastró a su quemante final.

Llegué al último torreón que coronaba aquella titánica estructura rodeada de cientos de atalayas custodiadas por las más demoníacas, viciosas, depravadas y diabólicas entidades.

Entonces de una densa y lóbrega niebla, en medio de la habitación, apareció ella. La desesperanza de cualquier destino y dijo:

—¿Acaso Marcus no te advirtió que mi voluntad es mil veces mas poderosa que la de cualquier hombre? Qué ingenuo resultaste ser… casi hasta te tengo lástima estúpido gusano. Pobre ignorante ¿No sabes que fui yo quién les arrebaté este sitio a ustedes? Que combatí contra ejércitos de mas de diez mil hombres. Desgarré aldeas enteras y me bebí gustosa la sangre de mujeres y niños… uh, esos eran los más sabrosos —desplegó una sardónica mueca, mientras no paraba de carcajearse y bailar contoneándose y relamiéndose los labios— y que…

—¡Qué...! ¡Dilo de una vez degenerada criatura!

—… Destruí a más de cien Paladines del Honor. No tienes idea en qué te has metido. O eres muy valiente o un tonto de capirote...

Me arrojé sobre ella, sabía que el destino de mi gente dependía si pudiese o no derrotarla. Destello hizo lo suyo y la dejó ciega por unos instantes. La bestia se defendió arrojando un putrefacto vaho, que podía convertir cualquier cosa viva en una pestilente argamasa de podredumbre, Marea de Fuego me protegió devolviendo el daño a mi enemiga. Pareció caer convertida en una pútrida masa momificada.

Estaba cansado y adolorido, la magia corrupta había hecho mella en mis defensas y en mi corazón. Pensaba que lo había logrado y que en definitiva liberaba a mi nación de una esclavitud de más de cien años… y que al final los niños tendrían esperanza en este abusado país.

La piedras del piso comenzaron a hervir, bullendo roca líquida, y del centro de ellas una luminosa figura de color rojo blanco emergió. Su cuerpo despedía chispas que derretían hasta el aire. El ardor era tal que mi escudo parecía un trapo tratando de defenderse contra una antorcha. Las paredes escarlatas, por la luz de la flama que despedía el demonio, quedaron con quemadas marcas negras de fuego. A pesar de mi armadura encantada, podía sentir como se empezaba a quemar mi piel y mi carne... el vapor de mi sudor me nublaba la vista. El insoportable dolor casi me hacía desmayar... pero no, no... tenía que seguir. Debía liberarlos, debía salvarlos. Nunca más esclavitud para mi amado pueblo.

—¡Qué iluso eres hijo de mujer!, crees que soy tan fácil de derrotar —rió con una sonora y siniestra carcajada que reverberaba en las paredes.

Agarré mi mandoble y caí sobre ella. Vi con horror como mi espada penetraba en su cabeza derritiéndose como una vela.

—¡Infectus est! —exclamó, enseguida un enjambre de insectos me atacó tratando de devorarme.

Puse mi escudo como protección, con estupor observé como los animales se comieron a Marea de Fuego.

—¡No puede ser! —grité— y la ataque a puño limpio.

—Eres un idiota —respondió; y dejó de brillar su candente figura. Volviendo a su estado original.

Me capturó con sus cabellos de serpiente y luego de jugar conmigo por unos instantes dijo:

—Fuiste un digno oponente, Sir Valiente, pero me has aburrido, ahora estás muerto. —Su pelo de sierpe tomó mis piernas, y en un movimiento veloz como un suspiro las arrancó de cuajo.

Ya era tarde… me había confiado demasiado en el poder de la luz. Estaba con mis piernas cortadas, colgando sobre un charco de sangre coagulada. Vi como Amaris con su bífida lengua empezaba a beber de mi sangre... En mi estertor grité:

¡Infernus humunculos non est!

Mis armas convertidas en energía lumínica se recompusieron y estallaron sobre aquel engendro del inframundo. Alcancé a ver como perdía la mitad de su cabeza y un brazo, antes de escapar convertida en una nube de estorninos azabaches como su alma.

Había liberado el castillo, pero eso, yo, ya no lo percibía, estaba muerto. Una lágrima de sangre bermellón rodó por mi mejilla.

10 Octobre 2021 02:43 2 Rapport Incorporer Suivre l’histoire
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À suivre…

A propos de l’auteur

W. E. Reyes Cuentacuentos compulsivo y escritor lavario. Destilando sueños para luego condensarlos en historias que valgan la pena ser escritas y así dar vida a los personajes que pueblan sus páginas al ser leídas. Fanático de la ciencia ficción - el chocolate, las aceitunas y el queso-, el Universo y sus secretos. Curioso por temas de: fantasía, humor, horror, romance sufrido... y admirador de los buenos cuentos. Con extraños desvaríos poéticos.

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Francisco Rivera Francisco Rivera
Valentía final y conclusión de una expedición terminal, como relato antiguo. Buen contexto y quizá, hubiera oportunidad de hacer una saga para divertimento y lectura de los interesados en este ipo de historias. Felicidades. Un saludo cordial.
October 10, 2021, 14:33

  • W. E. Reyes W. E. Reyes
    Gracias, Francisco. Al menos en parte creo que cierta continuación podría haber. Saludos. October 10, 2021, 23:39
~