……
El menor salió corriendo para llegar al instituto lo más pronto posible. Al cabo de un rato, llegó y se encontró en la entrada con su mejor amigo Jimin. Se dieron un abrazo y empezaron a hablar:
-Jiminnie. Estoy nervioso. Puede que no haga mucho tiempo que nos conocemos, pero es la primera vez que viene a Seoul y llevo estos meses queriendo decírselo.
-Va a ir todo genial, Kookie. Solo respira y podrás confesarte a él. Te va a decir que si. Lo sabemos los dos. Solo confía en ti.
-No puedo describir las ganas que tengo de verle. Me hace sentir en el paraíso con solo hablar a través de un teléfono y puedo imaginar cuando nos veamos ahora.
Pasado un rato, llegó Taehyung y se acercó a saludar a Jimin. Jungkook se había escondido detrás de su mejor amigo, hasta que el rubio se percató de la situación y preguntó:
-Jimin, ¿Tienes a alguien detrás de ti?
-S-sí..Jeon, sal.
-¿J-Jeon? ¿N-no s-será?
El menor salió y bajó su mirado al suelo sonrojado. El pelinegro tomó aire y habló con dificultad:
-H-Hola, T-Taehyungie. ¿C-Cómo estás?
-E-Estoy g-genial. ¿E-Entramos a c-clase?
-E-Espera, T-TaeTae. T-Tengo a-algo q-que d-decirte.
……
-E-Está b-bien, K-Kookie. D-dime.
-V-Ven c-conmigo, T-TaeTae.
Jimin ya se había ido a clase. Entonces, el menor agarró la mano del contrario para llevarlo un sitio apartado en el que pudieran estar solos y eso era cerca de un río hermoso. Taehyung se acercó a contemplar el paisaje y Jungkook, sin pensarlo, se abrazó por detrás del rubio sin poder evitarlo. El pelinegro suspiró y susurró:
-T-TaeTae. S-siento h-haberte a-abrazado s-sin a-avisarte, p-pero n-necesitaba h-hacerlo.
-T-tranquilo, Kookie. Me gusta que me abraces.
El menor cerró los ojos sonriendo mientras le abrazaba y volvió a susurrar:
-E-es que es la primera vez que estamos juntos y habíamos hablado tantas veces cómo sería nuestro primer encuentro, que necesitaba abrazarte.
-L-lo sé, pequeño. También estaba deseando que esto sucediera.
El mayor se dio la vuelta, apartó mechones de pelo de la cara a Jungkook para poder verle y mirarle fijamente a los ojos. El pelinegro se puso nervioso y soltó:
-Hemos hablado de tantos planes que deseábamos hacer juntos cuando nos encontrásemos, que no me creo estar delante de ti. ¿Sabes, TaeTae?
-Es cierto, Kookie.
-Sé que apenas ha pasado casi un año desde que empezamos a hablar por el teléfono, pero ansiaba estar a solas contigo porque…
El menor se quedó callado y agachó su cabeza mirando al suelo otra vez. Taehyung al verle así, agarró su rostro con suavidad levantándolo y dijo dulcemente:
-¿Pasa algo, pequeño?
-S-solo quería saber si hoy querías venir a mi casa y ver películas debajo de una mantita como cuando lo propusimos aquel día en esa llamada tan especial.
-Pues claro que quiero, allí estaré.
-V-ven a l-las s-seis.
……
POR LA TARDE
Llegó la tarde y Jungkook estaba muy nervioso. Había pensado cómo confesarse a ese rubio que le volvía loco, pero se sentía inquieto porque quería ser correspondido. Ya tenía todo preparado en su habitación para ver las películas o lo que les apeteciera tranquilamente.
(SUENA EL TIMBRE)
El pelinegro bajó corriendo, abrió la puerta y le dio paso al mayor a su casa muy nervioso.
-T-TaeTae. Estás muy guapo así. Te ves muy lindo.
-G-gracias, Kookie. Tú también estás precioso.
El menor se sonrojó, agarró la mano del contrario para subir a su habitación, y al llegar, le dijo tímido:
-T-Toma a-asiento, T-Taehyungie. Ahora mismo vengo con las palomitas.
Pasaron unos minutos, Jungkook llegó y se sentó al lado del mayor. No pudo evitar abrazarse nuevamente al rubio, se taparon con la mantita y le dieron al play para ver la película. Estaban comiendo, y sin darse cuenta, sus manos se tocaron dentro del cuenco de las palomitas, provocando que ambos se mirasen sonrojados.
En ese instante, el menor muy decidido, miró al contrario con sus mejillas de tono rojizo para decir suavemente:
-T-TaeTae..¿P-puedo decirte algo?
-C-claro que sí, Kookie. Dime.
-E-es c-complicado c-contarte e-esto, p-pero..
El pelinegro tomó aire y continuó:
-p-pero h-hace u-unos m-meses e-empecé a s-sentir a-algo p-por t-ti.
-Oh, Kookie…
-D-desde q-que t-tengo e-estos s-sentimientos p-por t-ti…necesito a diario hablar contigo y a ti. Ahora, t-te t-tengo a-aquí y..
Jungkook se quedó callado y miró al suelo avergonzado por haberse confesado a aquel hermoso chico. En ese momento, el rubio agarró su mentón con delicadeza y susurró:
-Estamos juntos, pequeño. Continúa, quiero escuchar eso tan importante que debo saber.
-M-me g-gustas, T-TaeTae.
-¿T-te gustó, Kookie? Pues…
-S-sí, m-me gustas mucho, mi Taehyungie.
-Mi pequeño Bambi, t-tú t-también m-me g-gustas y t-tanto que quiero gritarlo para que lo sepa todo el mundo.
El menor se abalanzó sobre Taehyung para abrazarle y susurró en su oído:
-Q-quiero b-besarte, Taehyung.
El contrario, rápidamente se dio la vuelta, se tiró encima del pelinegro y con su característica sonrisa cuadrada, dijo:
-Adelante, mi Kookie.
……
Jungkook no pudo aguantar más, llevó sus manos hasta las mejillas del mayor para atraparlas con sus dedos cuidadosamente. Poco a poco, fue pegándose más a él hasta sentir sus respiraciones y ambos cerraron los ojos. Se dejaron llevar por el momento que estaban viviendo, unieron sus labios fundiéndose en un beso suave, lento y dulce. Estaban solo ellos dos, convirtiéndose en uno solo.
Pasaron unos minutos, se separaron por la falta de aire y el pelinegro con las mejillas teñidas de un rojo intenso, preguntó:
-T-TaeTae. ¿Q-quieres ser mi novio?
-¡SI! ¡MIL VECES SI! Kookie, soy el chico más feliz del mundo entero.
Jungkook abrió los ojos como Bambi y volvió a juntar sus labios para susurrar durante el beso:
-Tú sí que me has hecho el chico más feliz del mundo entero. ¿Qué digo? Del universo, mi hermoso Taehyungie.
Y así fue, como empezó una relación entre Taehyung y Jungkook, después de estar casi un año hablando detrás de una pantalla a la que le sonrían leyendo los mensajes del otro y en la que se habían dicho todos los días palabras hermosas. Hoy, por fin, se habían visto en persona y se han confesado su amor para ser felices pase lo que pase.
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