Es curioso que los amores fugaces, clandestinos, son los más apasionados, valientes y esos que jamás se olvidarán por más pieles que besemos...

Fuí detenido por sus gritos. —¡No! Ya no quiero que me toques. —dijo ella. Sus lágrimas. Mis lágrimas. Nuestras lágrimas. —Perdóname. —rogué. —Ya lo hice hace mucho. —gimoteo ella. Le rosé la cintura. Ella chilló. Yo retrocedí.

Era fan de esa superficie suave, en la cual mis dedos medio se hundían al de ahí tomarla, decía que estaba gorda, pero para mí, había sido hecha a meticulosa perfección cual escultura del renacimiento. Cuando de la cintura la tomaba, para transportarnos en el ambiente al bailar una pieza. Para sorprenderla alzando su cuerpo desde atrás en un movimiento rápido con un grito que la hiciera saltar. O para no caer del galope que ella desataba sobre mí cuando estaba por como el lejano oeste, solos.-

Te amo desde tiempos inmemorables dime qué eres mío, que algún día me amarás, que despertaré del infame sueño, solo para volverte a encontrar.

Otro paso y un pensamiento que lo golpea como un látigo. Voces de fantasmas lo rodean, lo humillan, lo despedazan. Cae por enésima vez. El dolor de cabeza, los recuerdos que tiñen de rojo la mirada que ya no ve. La piel desgarrada, cede frente a las embestidas del pasado, nunca tan presente. El peso sobre su hombro es titánico, cae por trigésima vez. Él, que soñaba con ser hombre, tendrá que conformarse con ser dios.

En medio de las sombras desvelo la figura que le producia tanto temor y a la vez una paz inexplicable. Su presencia despertaba cada célula de su cuerpo y activaba sus sentidos. No podia explicar las sensaciones que generana la bestia en ella. Como hacia hervir su sangre y palpitar su entrepierna. Fue acercandose lentamente a él, dejando caer con cada paso las prendas que la cubrian, abalansandose sobre el imponente cuerpo embarcandose un viaje sin retorno.

Un aroma a camelias que me recordaba mi adolescencia. El sonido de la lluvia indicando la imposibilidad de evitar aquel encuentro. Su presencia serena que analizaba mis miedos. Una noche, un hombre del pasado, un corazón que seguía latiendo al son de su recuerdo... Y nada más importó. Sólo el fuego de la pasión consumiendo mi alma. Cedí, acepté y lo amé. Fui infiel a mis promesas racionales. Es que, ante ese hombre, siempre había imperado el corazón. Entonces entendí, que él, sería siempre mío.

Un aroma a camelias que me recordaba mi adolescencia. El sonido de la lluvia indicando la imposibilidad de evitar aquel encuentro. Su presencia serena que analizaba mis miedos. Una noche, un hombre del pasado, un corazón que seguía latiendo al son de su recuerdo... Y nada más importó. Sólo el fuego de la pasión consumiendo mi alma. Cedí, acepté y lo amé. Fui infiel a mis promesas racionales. Es que, ante ese hombre, siempre había imperado el corazón. Entonces entendí, que él, sería siempre mío.

Y cuando alguien más toque tu cuerpo y no suene esa misma bella melodía que yo lograba, te dolerá más haberme fallado, porque nadie hallará las partituras que deje grabadas en tu piel. Y aunque trates de enseñarle como hacerlo, nunca te podrán interpretar como yo, quizás mejor quizás peor pero jamás como yo.-

Malditos ojos, que insitan a pecar y del mismo modo implican besar el cielo.

"Amo tus labios porque saben a delirio y pasión".

"Qué la personas que ames sea tú debilidad en la cama, y tú fuerza en tu día a día"

Un pequeño baño portátil azul fue lo que la iluminó. Se acercó a su oído y, llevando la mano de él a dentro de su falda, le susurró lo que se le había ocurrido. Él accedió a la propuesta de su chica, ambos estaban calientes después de eso que hicieron en la penúltima fila en la sala de cine. 8:40 PM, no hay casi gente ese jueves afuera del centro comercial. Sin levantar sospechas se metieron al baño y él levantandole una pierna, entre besos entro en ella. travesura pública placer único.-

Frente al espejo peleaba conmigo, sin misericordia ni compasión. Hoy me veo y sonrió, ahora veo a un soldado con heridas y no esta arrepentido.

Quisiera tomar aquel veneno de tus besos para calmar mis pensamientos.

Es un deseo adictivo, saber que esta ahí y que siempre ha estado presente. Es una adrenalina excitante y un calor de cáliz difícil de eliminar. Son esos recuerdos y gemidos donde mi cuerpo perdía todo control. Es él... solo el y su maldita droga que me atrae, que me quema y que me vuelve adicta

Miradas van y viene, ese intenso cosquilleo en el estomago, aquella humedad que no puede ignorarse. Anticipacion. Cada paso acorta la distancia de la habitación donde espera. Donde el fuego de la pasión ardera sin control, donde los cuerpos seran adorados en todo su explendor, sucumbiendo ante un orgasmo demoledor. Sensaciones que se postergaran hasta... Un próximo encuentro.

Quién se iba a imaginar que al salir a caminar todos los días bajo la puesta de sol y disfrutando de los paisajes iba a encontrar el amor? Todo empezó cuando ese día perdí mi cadena de oro, corrí y quedé agitada pero por las prisas me quite del lugar y me fui. Al día siguiente un joven de ojos bonitos se me acercó para darmela porque el vio que se me callo y por agradecimiento lo invite a cenar. Es así como empezó una bonita historia de amor con final feliz que se podrán imaginar.

Su cabello ardía, aunque seguía mirándome consumida por las llamas. ¿Cómo pude amarla siendo su confesor? Nos delató nuestro mejor amigo. —Te reunirás con ella muy pronto —dijo. Lo comprendí, él también la amaba. Saqué el arma escondida. Moriría, pero antes le enviaría al infierno. Nuestro único pecado fue amarnos.

Sus ropas, bien ajustadas, dibujaban un bello cuerpo que ondulaba, provocativo, delante del joven que la seguía alelado. Se detuvieron junto a la puerta de Pub. A una señal de viejo, que iba detrás, ella avanzó hacia el muchacho; lo abrazó y besó con pasión y lo volvió a abrazar dejándose tocar los abultados senos. Al final, cuando el anciano le puso un billete en la mano, se desprendió como adormilada, abrió lentamente la puerta y los dejó salir.

Tempestuoso llega hasta mí con frecuencia este deseo, que a menudo hago realidad, que rompe con nuestras madrugadas, como rayo con las penumbras. Se convierte en velo que cubre todo a su paso, poniendo en evidencia nuestra desnudes, no solo del cuerpo sino del alma.  Es lucha intensa de egos, que termina en ríos desbordantes de caricias, que calman los torbellinos en nuestros pechos.  Pasión hecha abrazos, arrumacos hechos amor. 

Cuando era joven recibí una lección , una sugerencia, muy difícil de digerir. Un amigo íntimo me animó a que fuera un poco más egoísta . Esgrimió como argumento de convicción que al menos un poco de egoísmo era necesario para sobrevivir en la jungla que describió Darwin. Nunca he resuelto el dilema. Pero incluso si fuera cierto que ser egoísta es necesario para salvar el pellejo, sería inhumano no practicar de alguna manera las benditas virtudes de la Solidaridad y la Compasión .

Por causa del destino se encontraron, y al mirarse a los ojos, no pudieron ocultar su inconfesado amor adolescente. Aquellas miradas esquivas; temerosas de dejar entrever lo que sentían, se tornaban ahora deseosas. Por vez primera, sus labios se tocaron levemente y se entregaron al beso muy despacio; descubriendo sus bocas poco a poco, mientras el deseo que había esperado aquel momento tanto tiempo, los llevó a fundirse en un beso apasionado y ansioso; deseoso; intenso y posesivo; lujurioso...

El sabía el poder que ejercía en mí. Y vaya que sabía aprovecharlo.

Una mano deslizándose por su espalda desnuda, todos los poros de su cuerpo abiertos, un nivel de éxtasis nunca antes alcanzado, escalofríos de placer; le temblaban las piernas y sentía que se iba a desmoronar en cualquier momento, pero al mismo tiempo una determinación en su mirada que incita al pecado, su cabeza en contra la pared, su espalda arqueada, se podía visualizar una guitarra en su cintura y arena en sus ojos, las estrellas eran poca cosa comparada con ella y quizás un efímero momento.

Sus caderas se mueven sensitivas, su mirada es intrigante, arrebatadora, era fuego en el escenario, se lleva con ella el paroxismo de todo el que la observa. Camina lentamente entre las mesas, no permíte ni un solo toque, sonríe, pasos firmes, llenos de actitud contagiosa. Se apagan las luces y ya no está, se ha ido con todas las miradas puesta en ella, le gusta la atención, no causa excitación sexual, te llena de amor, de ese que no necesitas tocar, sabes que estarás satisfecho de todos modos

Ella abrió su libreta de historias después de tanto tiempo de haberla arrumbado en esa oscuridad. La abrió, comenzó a leer dándose cuenta que por alguien más había renunciado a sus sueños sabiendo que sus escritos reflejaban un mundo en el que podría triunfar. —Y pensar que por él los dejé a ustedes...— dijo al leer sobre sus diversos personajes. La nostalgia la invadió, lloró, sin embargo tomó la pluma y retomó sus historias ahora plasmando su sentir. Sus historias ahora no dejan de ser leídas.

Ella mantenía la cara contra la mesa.Él tenía su mano sobre su cabeza impidiéndole moverse y así mantenerla a su merced hasta poder satisfacerse.El choque de su pelvis contra los glúteos de la morena le extasiaba,su virilidad parecía endurecerse más y ya la arremetía cual salvaje animal.Pero,si ella supiera que el éxtasis se debía al dolor que sufría en esa mesa de metal donde la partían en pedazos,ella sabría que el perfecto amante era ese hombre que la miraba a diario por aquel ventanal.

Finlay se dió cuenta de que el amor, además de llevar toda clase de sentimientos dulces y cálidos, estaba mezclado con fuego, se encendía con una mirada, usaba como combustible la pasión y se oxigenaba en el deseo. No había forma de separar el uno del otro, eran dos páginas de la misma historia, dos colores en el mismo cielo, dos sabores de una misma emoción. Y no había nada que pudiera detenerlo. Él tampoco tenía intención alguna de hacerlo.

En la banca del parque te vi anoche, anoche mientras paseaba. tan hermosa piel portabas que rozarla mis dedos suplicaban. tú cabello montando al viento en rebeldes oleadas, mi mente imaginando que voy a saludarte, En la banca te veo tranquila mientras esperabas, En la banca en la que sólo soñaba que me acercaba, En esa banca ahora hay otra persona que al igual que tú mi corazón aceleraba...

Nuestro fin en la inspiración de esta vida llega cuando ni uno mismo se encuentra frente al cristal del yo. Nunca podré definir cómo carajo estoy aquí y porqué estoy presente en la interacción literaria que nos involucra a ti y a mi. Ni la mayor fuerza de comprensión entenderá como es posible que de las miles de combinaciones existentes en este maldito mundo... Lo único que yo quiero es que estemos los dos.

Tú haces mis sentidos arder, tus caricias estremecer, cada beso tuyo que viene desde mi cuello inunda todo mi ser, con intensidad, con ternura, de mi pasión eres locura, a tu lado quiero estar y en tu piel por siempre terminar.

Dos personas destinadas a estar juntas pase lo que pase, bajo ningún concepto se separarán nunca. ¿Es esto destino u obsesión? ¿Creéis en esta leyenda?

Él me besa y yo solo pienso en que no me quiere. Él me acaricia y sus dedos duelen en cada centímetro de mi piel. A él sólo le importa el instante en que mi aroma es tiempo presente. Un momento de placer, fugaz, mordaz, pasajero y violento. Yo quiero su cariño, dulce pero despacio, que lo entregue a gotas y que duren años. Él me quiere ahora, completa, inmediata. Yo lo quiero siempre, de a poco y nunca jamás soltarlo.

No tenía razón para resistirse. Amaba ese tipo de contacto. Su beso quemaba como el fuego, y la hacía sentirse viva.

Tan enamorado la miraba, que solo veía el reflejo de su alma en sus ojos, me deslumbraba, como si de un sol radiante se tratase. Cegó mis ojos, me convenció tanto que no era capaz de ver que detrás de esa mirada, se encontraba la muerte…

Tú, que conoces mis locas fantasías y mis más oscuras pesadillas. Confidente de alegrías y penas. Me transportas a mundos en los que vivir miles de vidas. Logras evadirme de la realidad y a la vez poner mis pies sobre la tierra. Contigo puedo ser yo misma en todas mis versiones. Agradezco aquel primer libro que me hizo amarte y aquellas primeras líneas cargadas de pasión que me hicieron necesitarte.

En medio de tu descarado examen visual,te miro sin ningún tipo de filtro pero en especial me detengo en tus pupilas brillando ...doy una bocanada de aire a centímetros de tus labios,demasiado larga,pero el dorso de tu mano atrae mí barbilla de nuevo hacia tu boca. Un beso,ardiente de deseo . Encendes la fogata dentro de mí pecho. Podes sentirlo a través de mí sudor que comienza a juntarse levemente sobre tu pecho desnudo.-Te amo- digo sin poder hablar como quisiera,y tus labios sellan los míos.

Aun sabiendo que no me correspondes, sigo siendo esclava de tu mirada tiránica. No cambiaría este infierno por nada del mundo.

Pulso acelerado, manos heladas, decisión en el corazón y un pensamiento en mente, patinar, tenía puestos lo patines, las cuchillas tocaban el hielo parecía levitas deslizándome por la pista, aún vacía, ¿donde estás? Ya te encontré, en mi corazón, ahí guardo mi pasión. (Extracto de mi libro Víctor...Te amo)

Realmente ¿cuánta importancia le adjudicas a la escritura? ¿Te apasiona o es un mero pasatiempo? Cualquiera sea el camino que elegiste, gozalo, exprime ese arte como si no hubiera un mañana. Con tu pasión puedes lograr tus objetivos y llegarás muy lejos. Con el pasatiempo adquirirás experiencia y quién niega que en algún momento te decidas a tomarlo con mayor seriedad. No te rindas aunque creas que es difícil, mejor intentarlo a que no hacerlo. Escritxr, cree en ti. Nadie lo hará como tú.

Limpia tu rastro de mí, vida mía. Con besos y caricias, con palabras dulces y ahogadizas. Limpia tu rastro de mí, mi amor. No querrás que todos se enteren de nuestra prohibida pasión, de nuestro fruto del fervor.

¿Te duele? -le preguntó él. Sí, -dijo ella asintiendo con la cabeza, sofocada por el cóctel de sensación que estaba sintiendo no podía gesticular palabras. si quieres paro, -le propuso él empatísandose. No, por favor, amor sigue, -dijo ella decidida a continuar. Encajando sus manos en su cintura y volvió a entrar en ella, un ligero suspiro desahogante dió y mirándolo a los ojos, empezó a cabalgarle, mantenido el ritmo del sonido que producían sus cuerpos en cada impacto.-

Lo miro , lo beso, acaricio su cuello, metio los dedos por la cabellera , sintio la calidez y la sensacion de placer , pero no fue recíproco el apego.

Escribo las palabras que me nacen del corazón sin ningún temor al que dirán, pues disfruto más con el exquisito aroma de una coma en el papel y bellas oraciones unidas como hilos que forman un hermoso tejido digitalmente creado. He aprendido que es mejor desconectarse un rato para divagar por hermosos sueños y fantasías en donde no existen ni ideologías, ni religiones, ni filosofías ni doctrinas. Solo sentimientos, emociones y amor puro. Y al tapujo se le saca como a un tapón del lavatorio.

Y entre tantos idiomas que existen, él me hablaba con el idioma de la pasión. Sentía en cada palabra como cada hormona se encendía, mis entrañas llovían y mi flor lloraba.

seduce si así... mueve esas caderas como solo tú lo sabes hacer muéstrame si camina con ellas .... invítame... por qué solo tú puedes hacerme caer en este juego.... tócame... si así Bragas.....

—¡Eres tú! Le dije con voz temblorosa. No lo podía creer, ella estaba justo en frente de mí; jamás creí que iba a tener ese encuentro con ella. —¿De dónde me conoces? Me preguntó con una sonrisa en su rostro. —¿Acaso viste mi perfil en una red social? Solo me preguntaba cómo iba hacer su reacción si le digo que la ví en mis sueños, quizá no me creerá, pero decidí arriesgarme y le dije: —en mis sueños te ví. A lo que ella me contestó: —"Yo también te soñé.

No necesitas desgastarte mentalmente y físicamente por algo que solo lo tomarás como un trofeo, mejor pon toda ese esfuerzo en algo que realmente te apasione.

Cuando escribas una historia, no lo hagas para quedar bien con los demás. Escribe por que te apasiona, por que crear mundos es tu fuerte para descargar lo que traes desde tiempo atrás. Mundos de Fantasía, extraterrestres, acerca de otra realidad puedes escribir. Recuerda que en cada palabra hay algo de tu sentir que tus personajes expresarán y así mucha gente se identificará con tu historia haciendo que la lean de principio a fin.