- Esmeraldas, escucha. Aparentemente mientras estaba con ellos no encontré nada. Pero ellos bajaron la guardia cuando me fui y Johan, él es un zombi y esta viviendo como humano. Es uni de esos zombis humanos que el gobierno esta buscando. Deberíamos parar, sabemos que si el gobiernos los quiere no es para nada bueno. Hay mas chicos dentro de la fortaleza, Aiden pasa comparado con otros.

—¿Dónde estás? ¿Cuántas veces te he dicho que tienes que mandarme tu ubicación, una foto y decirme con quién estás. Más te vale que no hayas salido con tus amiguitos los perdedores, aunque ya es típico de ti. Sus risas y burlas resonaron en mi cabeza. Y sabía que otra pelea se avecinaba.

—No puedo creer lo que hace contigo, ya lo único que le falta es que te golpee. —Un golpe me dolería menos.

—¿Por qué quitaste nuestra foto de tu perfil? —Sólo la cambié por un rato, también tengo derecho de poner fotos mías, ¿no? —Claro que no, seguro es porque te da vergüenza, ¿quién no quieres que vea nuestras fotos? ¿Qué escondes? —Estás comenzando a cansarme.

—Lo siento, creo que no podremos pasar el fin de semana juntos... —¿Cómo dices? —Lo que pasa es que tomaré unas vacaciones con mi familia, pero te prometo que cuando vuelva... —¿Irás a tu pobre pueblo otra vez? —¿Disculpa? —Te quiero de regreso en este momento, no vas a cancelar algo que ya teníamos planeado. —¡No! ¡Siempre haces lo mismo! —O regresas, o no vuelves a saber de mí. ¿Hasta dónde más iba a llegar?

—Ya déjalo. —¿Cómo voy a hacerlo? —Es que es tan fácil... ¿cuántos años llevas soportando maltratos? Algunas veces parece que tu miedo a estar sola es más grande que el amor que te tienes a ti misma, que honestamente, yo creo que es nulo.

—No lo entiendes. —¡Claro que lo entiendo! Entiendo muy bien que te estás dejando pisotear por un cabrón cualquiera, y dime, ¿has pensando acaso en poner en una balanza todo? es decir, ¿qué pesa más? Todo el daño que te hace o los casi inexistentes buenos momentos que pasan juntos? —Él no me dejará ir tan fácil... —Haremos algo al respecto entonces.

—Te has dejado lavar el cerebro, como siempre. —¿Lavarme el cerebro? !Todo el mundo se da cuenta de lo que haces! —Todas las parejas son así. —No tienes idea de nada. —¿Y tú si? Yo te sigo viendo aquí, porque yo sé que sin mí, no eres nadie. —Eres un bastardo. —Te pudo tocar algo peor, así que agradécelo.

Todos estamos hambrientos, pero no tanto como yo. ¡Soy la que está más hambrienta! Desde hace años que no vemos ni una pizca de carne. ¿Comer verduras? ¡Puaj! ¡Qué asco! Tengo una idea: recorrer este destruido mundo hasta encontrar humanos para satisfacerme. Dios, aún recuerdo el sabor de sus cerebros... Necesito probarlos de nuevo, para no perder la cordura y no ser una "zombie estúpida". Tampoco quiero descomponerme por no tener carne, no quiero... ¿Remorir? Como sea. ¡Es hora de aventuras!

Dolor, palabra tan compleja que, o abunda o te derrota; o por momentos se calma. Implica más que una queja, más que un malestar. El dolor implica batallar con tus alrededores, tu entorno social y a veces contigo mismo. Implica aparentar que no existe y poder continuar a pesar del cojeo, del quejido o de las tantas ganas de gritar que tienes. Implica desilusiones, tristeza, apatía y enojo. Es un tormento de emociones que al igual que una tormenta en el mar, no es fácil de controlar. Aunque..

No se trata de gritar, ni mucho menos de sudar. Se trata de un buen momento pasar. Pasar tus caricias de mi mejilla a mi cuello, de un beso corto a un beso largo, de mirar mis ojos a mirar mis labios. Pasar mis manos sobre tus hombros y recorrer todo tu brazo. Pasarlas a tu pecho, hacia tu cuello, mientras mis pienas estás sosteniendo. No solo trato de estar más cerca, pero creme que me estorba esa cremallera. Por un momento me separó, quiero que veas mis ojos pues te quieren decir algo...

Meditaba cada día, buscaba paz y tranquilidad. La joven maga buscaba un lugar donde descansar. Entonces el bosque la llamó y en un suave arrullo ella durmió. Al despertar tocó mucho pelo, este era negro, suave y frondozo. Levantó la vista y era un gran lobo. Estaba quieto aún más dormido, sin pensarlo lo abrazó y al sueño se entregó, aquel era su amigo. Al despertar la acarició, se sentó a su lado y la miró practicar entonces su postura le corrigió. Aquel era un espíritu del bosque y su mentor.

Practicaba sin descansar, la joven maga mejoraba sin parar. Su magia desplegaba con orgullo y decisión, a sus familiares sorprendía y era motivo de envidia cada día. Una tarde el padre de la niña, Wener C. se había encerrado en la habitación, unos destellos se veían bajo la puerta y en su interior una joven mujer lloraba sin parar, entre bocanadas de aire pidiendo ayuda. La niña se enfureció al reconocer a su madre y sus ojos brillaron y volteó la puerta usando gran poder. —Déjala en paz —musitó

Luego de siete años de noviazgo, no nos veíamos hacía más de dos años. Se suponía que nos íbamos a encontrar en ese año. Todos los sueños se fueron a la basura, los vuelos cancelados, los dos encerrados, tan lejos y al mismo tiempo tan cerca. Quería volverme a perder en su esencia, aunque fuera una vez más. La tristeza me estaba consumiendo. —Podremos estar cerca a pesar de toda esta locura —dijo por medio de una videollamada, tratando de calmarme mientras yo lloraba. —¿En cuantos años?

Es un recorrido, es como un viaje que a pesar de tener inicio y fin lo más glorioso es disfrutarlo. Cada centímetro, estando cerca o estando lejos hace mi corazón latir. Al cerrar los ojos no me preocupo por tu persona, no me interesa juzgarte, por el momento no quiero contemplarte; solo quiero sentirte, quiero disfrutarte, quiero, quiero. De mi cabello a mi cuello, del cuello a mis senos, se los senos a mi cintura. De mis labios ...

"É só uma excursão", pensou Gabi, olhando-se no espelho. Porém, enquanto encarava seu corpo redondo dentro do maiô novo, sentia o desespero crescendo no peito. Já podia imaginar as piadas sobre suas celulites... Mas o Pedro estaria lá, e ele havia dito que queria conversar com ela. "Em particular", ele dissera. "É importante." E desde então só conseguia pensar no olhar meigo dele. Precisava ir. Tinha esperanças de ser amada como era. Sentindo-se tola, colocou o vestido e se encheu de coragem.

—Sucedió hace tanto tiempo que casi lo olvidé. Tendrás que perdonarme si pasó algunos detalles por alto, Isabel —comentó. Parecía que traer a la memoria esos recuerdos le dolía profundamente. —Hace varios siglos atrás, fui maldecido con la inmortalidad por el ángel de la muerte. Mi padre era un famoso alquimista que cometió varios tabús, entre ellos romper la delgada línea que separaba a los vivos de los muertos. Cómo castigo, toda su línea sanguínea fue maldecida, hasta la séptima generación.

Decidí quedarme en esa época, no porque me hubiera rendido, sino porque las palabras de Nathaniel tenían sentido. Estaría más preparada para volver a casa una vez hubiera aprendido todo lo que necesitaba saber. En una ocasión, mientras estudiaba mineralogía decidí abordar finalmente la pregunta que no dejaba de aparecer en mi cabeza y que no me había animado a realizar antes. —Amo Nathaniel ¿puedo preguntarle algo, cómo es que termino aquí también? —¿Realmente quieres saber? Asentí.

—Puedes quedarte aquí y adaptarte a esta época o esperar que los dados recuperen su energía mágica para que puedas usarlos una vez más. Pero si lo haces tendrías que arriesgarte y vagar por el tiempo, hasta que con suerte encuentres la época correcta. Era una decisión difícil de tomar, pero el amo Nathaniel fue amable conmigo todo el tiempo que necesité. Nunca me presionó y me espero pacientemente, pero tras pensarlo con calma ya había hecho mi elección. —Tengo que irme —le comenté.

—No puedo dejarte marchar, no tienes los conocimientos de taumaturgia necesarios —dijo el mago. —Voy a estar bien. No importa cuánto tome, volveré a casa. —Si te pierdes por la eternidad no podré perdonármelo. En esta época seguramente serás capaz de vivir una vida plena. La humanidad ha progresado, reconsidera tu decisión —insistió. —Pero aquí no queda nadie. —Me tienes a mí, yo me haré responsable. —Nathaniel me tomó las manos. —Sé mi aprendiz, entonces te dejare marchar solo si lo deseas.

— Vocês estão com medo de uma lenda idiota? Faremos uma fortuna com o pelo do bicho e estão se cagando por pensar em protetores da floresta? Isso é absurdo. Peguem as malditas armas e me sigam, não recuaremos. Essas matas nos tornarão homens ricos. Comigo!

Trascurría la noche de navidad y como era usual para nuestra familia, rota y disfuncional, solo unos pocos la pasaríamos juntos alrededor del pesebre y aquel viejo arbolito de navidad que tantas miradas de felicidad infantil había visto pasar. Si bien éramos una familia pobre, siempre celebrábamos navidad sin importar nada más, pues esa felicidad de temporada nos daba vida y fuerza para soportar el resto del año.

No basta con llegar a tu habitación y cerrar la puerta, con desvestirse y ponerse ensima a lo que sea que llames "pijama". No basta con meterse a la cama, estirarse o sentir la textura de tus sábanas. Si son de franela, si son de algodón, o si prefieres no cubrirte los pies o mejor enrollarse con ellas. Sabes que esos pocos minutos sobre tu cama antes de dormir te llevan a pensar en todo lo que ha pasado. No solo hoy sino también en días pasados. Pensamientos que, o se vuelven a tu favor o ...

El confort, el perdón, el "auto-aprecio", la aceptación, son cuestiones que no son fáciles de lograr, de obtener o de mantener. No cabe duda que la vida trae consigo muchas sorpresas, es una montaña rusa con sus altas y sus altibajos. Tal vez has de odiar o por lo contrario amar, pero sabes que no siempre se da como tú quieres, si por la mañana te fue bien por la noche ya tendrás la cabeza echa un nudo. Pero algo que no debes olvidar es que...

- ¿Qué estas esperando de él? Si tu ya sabes que no existe. Porque cuando ruegas por él, no envia a nadie por ti y ni siquiera el mismo se atreve a venir por ti. Y todos los Dias hablas con él y parece que él no te escucha. Más lo que aparece alrededor de ti no es nada más que sombra y oscuridad.

— Ô Vitor, conhece aquela piada do anão no ônibus? Forcei uma expressão de expectativa: — Acho que não. Enquanto ele falava, eu fingia prestar atenção. Aceitava que meus amigos brincassem com minha realidade, rindo sempre das piadas como se de fato achasse graça, mas no fundo me sentia enojado. Só queria ser aceito, e era capaz de me deixar machucar por isso. Estreitei os olhos, desejando ser forte o suficiente para me impor e mudar aquela situação... Ele terminou a piada. Dessa vez, eu não ri.

—Haru, no puedo creer que volviéramos a meternos a este servidor… ¿No quedaste lo suficientemente hastiada con todo lo qué pasó? Yo de tí estaría relajándome en otro de los servidores, es más... ¿por qué no más bien, en cambio de luchar por esta copa, nos vamos a uno de los servidores de viajes? Nos relajamos, vamos a sitios de la antigüedad… no sé…

—Celeste, por XAE, ¿tú crees que tienes suficiente ADN puro, para considerarte Vikinga? No me hagas reír… No me digas que tu madre es una purista o hace parte de una de esas sectas raras, ya con Los Adores del Código tenemos… ¿Sabes que bromeo, no? Por cierto ya creé un servidor para las cuatro, podemos ir solas. El código es EUR-10983O88K27H89D3.

—Ya las veo a todas, casi no me deja unirme… ¿Podríamos recorrer todo esto sin necesidad de hablar de ellos… Aún siento que me espían, aún siento que me persiguen. No sé cómo fui capaz de volver a meterme aquí con ustedes, prometí no volver a conectarme… Ustedes me obligan.

—¡Tranquila Haru! Más bien disfruta, mira, tengo regalos, no solo para ti… para todas. Podemos vestirnos como antiguas romanas o como antiguas egipcias, dice que el Área Nórdica está en reparación, lo siento Celeste… Sé que querías visitarlo.

—Yo quiero conocer el antiguo Egipto, me parece interesante, pero después de eso quiero hacer el recorrido interactivo que habla del Cosmos y todo lo que promocionan al venir a Europa. En serio tengo muchas ganas de ver a Júpiter como si estuviéramos realmente en Europa…

Que interesante es el ser humano. Un día avisas que la abuela tuvo un ataque al corazón y probablemente si ocurre de nuevo ya no pueda soportarlo. Es entonces cuando toda la casa está llena, todos los familiares cuentan sus historias y Jesús se vuelve el tema principal. Sin en cambio han pasado 3 meses de ese ataque, la abuela sigue en su cama comiendo pan blando y bebiendo té. No se ha vuelto a llenar la casa, Jesús ya no es mencionado. Creí que en esos 3 meses...

-No deberías preocuparte más Esmeralda. Porque yo soy quien te ama, mas que a nada en este mundo. Haría lo que fuese por ti, solo porque te amo.

Delante de mi estaba Eleanor, casi sentía enrredarme en su cabello crespo, pero más atrapado aún en su juego, ella quería que perdiera cada vez más fácil, sólo eramos nosotros dos, y las consecuencias, retos y secretos, deseaba conocer hasta mis entrañas, principalmente eso qué sabía esconder muy bien dentro de mi boca, mis ojos no dejaban de hablar, y mis manos anhelaban entrelazar las suyas, mirarla era peligroso, sus curvas de mujer parecían señales de advertencia...

—No entiendo exactamente qué hago aquí. Pensé que ya habían terminado de recoger mi declaración. ¿El momento del asesinato? Yo... ehhh. Estaba con otro amigo mío, un abogado bastante respetado. Sí, claro que pensaba que ella era hermosa.

—¿Así que también actúa de abogado de los sospechosos? Más le vale buscarse un abogado propio. La víctima era una mujer hermosa que le gustaba ser querida y amada. Usted se sentía especial cuando estaba con ella. Pero no pensó que también había otros. Usted y el amigo de Robert Thompson estaban en la misma situación. Se pusieron de acuerdo y la asesinaron. Para cubrirse se prometieron ser la coartada del otro. Así fue.

Amanece el día y los amigos llegan. No son muchos en cantidad, pero sí de calidad superior. Cuando necesito su compañía, siempre están allí, en las buenas y en las malas, dispuestos a todo con tal de combatir a mi lado en las condiciones y situaciones más adversas. Llegado el mediodía, alcanzan un grado de compromiso tan fuerte que son casi como una gran familia para mí, pues los considero de mi parte, hermanos no de sangre.

Dejó la carta sobre la mesa y esgrimió un cuchillo grande como la espada de un gigante. –O te abres o te convierto en confeti. Atemorizado, el sobre se abrió en canal y dejó salir un papelito que, al ver el espadón, se dobló a toda prisa, se transformó en pajarita de papel y echó a volar. –¡Que se escapa! –No, yo la cojo. –Chup, chup. –¡Requetemalo, atrápala! –ordenó mamá bruja. La cartita revoloteaba de un lado a otro, pero el requetemalo era un cazador infatigable. Y la atrapó. Y se la zampó.

Hubo un silencio desilusionado hasta que Viec tuvo una idea. –A lo mejor este señor tiene más cartas… –¡Hip! –dijo el cartero. Y se quedó dormido sobre la mesa, con la boca abierta. Ese día las cartas se entregaron con advertencias garrapateadas en los bordes. Las notas mal escritas arruinaron negocios y rompieron noviazgos, pero también evitaron timos y fraudes, descubrieron secretos, resolvieron enigmas, dieron soluciones y avisaron a la princesa Glamurosa de la traición que planeaba el visir.

Toc, toc. –Viec abre, que yo estoy limándole las uñas al dragón –gritó mamá bruja a todo pulmón. El horno a dragón funcionaba de maravilla, dejaba en su punto las pizzas de gusanos con telarañas derretidas y churruscadas, pero había que retocarle las uñas todas las semanas para que no arañase las baldosas del suelo. Toc, toc. –¡Que alguien abra la puerta! –volvió a chillar mamá bruja. –Agg, ve a abrir, que yo me estoy sacando bolitas negras del pie –dijo Viec, muy en su papel de hermana mayor.

Lúcia respirava profundamente naquela manhã de quarta-feira,viu saltitações errôneas pela parte de quem dizia amá-la, era por uma prima, por quem seu namorado Marcus abrilhantava os olhos.Lúcia desconfiava dos olhares, de alguns feitos que não eram os mesmos por ela, Lúcia ia guardando todos os remorsos , as gotas caiam próximo a ela e a mesma queria que as gotas se cristalizassem e pungissem figuras. Será que Lúcia se impedirá de deixar fluir a sua própria história pelo que acredita que existe?

—¿Va todo bien? – pregunta la voz de un hombre. Al girarme, ahí está Marcos, medio dormido, sin saber qué ocurre, pero aun así, preocupándose por mí. Asiento y me acurruco junto a él, mucho más relajada. Menos mal que solo ha sido una pesadilla.

—Alma, ven conmigo. Deprisa. Sígueme. Sin saber quién, cómo, cuándo, dónde y por qué, como si me hubieran hipnotizado, me levanto y comienzo a seguir a esa voz. —Ahora, abre los ojos. Mis ojos se abren de golpe. ¿Dónde estoy? Intento inspeccionar el lugar, pero está tan oscuro que no soy capaz de distinguir nada. La voz ha desaparecido.

Estoy en mitad de la nada cavando en mitad de la noche, no recuerdo porque estoy aquí cavando, solo sé que tengo que... - Cavar, cavar y cavar. -¿Qué tengo que desenterrar? -No lo sé, la verdad. - Solo tengo que cavar, cavar y cavar. -¿Cuándo podré parar? -Quiero irme a casa la verdad. -Me pregunto ¿por qué tengo que cavar? *Disparo* - Ya recuerdo porque tengo que cavar.

Entre las estrellas, la luna y el mar sucedió una historia, como en mi primera escapada viví un sin fin de aventuras, como estuve al borde del límite de la adrenalina, de día un estudiante promedio, un empleado a medio tiempo, reservado, no muestra sus sentimientos ni emociones, cansado de la rutina que por dentro lleno de vivir una aventura, donde el valor entra a mí, solo necesito cinco segundos de valor.

Universidad Nacional de Japón. Ahí está él una vez más, a la distancia en reunión con un amigo. Los veo sonreírse entre sí. Te veo a ti sonreír de manera tan alegre. Me pregunto si algún día me mirarás con aquella expresión. El carisma de tus peculiares comisuras hacia arriba, Euijoo, cautivan mi alma y visión. Eres mi chico sonrisa. Nada te detiene en mostrarla, a menos que algo te cause timidez. Me pregunto cómo reaccionarías conmigo [...] Uhm... ¿Cómo podré acercarme a ti?

Llegué por primera vez a la cafetería sin saber que esa era la cafetería de uno de los padres de los artistas favoritos de mi hermana. Mi nombre es Julieta, y soy fanática de la Fórmula 1. Pero estoy en Corea del Sur. Al principio había optado a este país por los productos de skin care que venden y promocionan, aunque mi plan original era Japón para ver la carrera de la Fórmula 1.

Estaba frente al mar de la playa; esta se mantenía nublada. Eran como las siete de la tarde; hacía un calor que te morías, pero estaba lindo como para estar frente a la arena, con el abdomen desnudo, y en un traje de baño tipo short de color verde agua. De la nada, apareció Paulo, el amigo con el que decidí ir de vacaciones junto con nuestras novias. —¿Y cómo te fue con Leila? —pregunté. —Estuvo de rebelde otra vez. ¡Se cree que puede hacer lo que quiere! ¡Dios! Me gustaría golpearla de nuevo.

Apenas Paulo terminó su historia, corrí hasta el hotel a 300 metros de la playa en el que nos hospedamos. No pensé, solo corrí; después de escuchar la declaración de Paulo no podía fingir que todo estaba color rosa, así que corrí a ver a Lidia. Cuando llegué me sorprendí que estaba la puerta abierta. Entré y vi la habitación hecha un desastre y el cuerpo de Lidia en el piso. —¿Lidia? —pregunté acercándome. Una parte de mi tenía fe en que estuviera desmayada. Pero no era así, estaba muerta.

—¡Alguien a matado al señor Morton —exclamó el detective retirado, Ulises —Y es mi deber, tanto como el de los presentes dar resolución a este caso debido que, además, alguien, supongase el asesino, ha cortado la linea del teléfono por lo que no podemos dar parte a la policía; es necesario, pues, que todos permanezcamos en esta sala hasta que se aclare el asunto.

—No ha pasado algo así por mi mente —aseguró el detective Ulises —, me refería a que, sin quererlo, pudo haber escuchado algo que pudiera desvelar algo de luz al asunto, debido a su disposición como mayordomo de la casa entiendo que tiene que ir de un lado a otro de la casa y, sin quererlo, escucha cosas que usted no tiene intención de escuchar, pero el trabajo es el trabajo y eso es, en términos sencillos, un gaje del oficio.

—Bueno... ya que lo pone de esa manera —William puso cara de estar pensando sus palabras —, es como usted dice, señor Ulises, que, sin quererlo, he podido escuchar parte de la conversación del señor Fortesque con el señor Abraham —señaló a ambos con un gesto de la cabeza —. Recuerdo perfectamente que mencionaban algo sobre pegarle un tiro al señor Morton, casi que podría jurarlo.

—Ya veo —Ulises calculó las palabras del mayordomo —¿Qué tienen que decir al respecto de esta afirmación? ¿Señor Abraham?

—Bueno... —carraspeó el señor Abraham —evidentemente no es una situación en la que uno pueda ocultar cosas. Es cierto que hablábamos a espaldas del señor Morton, pero no era nada que pudiese desembocar en un asesinato, simplemente maldeciamos la suerte del viejo... quiero decir, bueno... —Abraham buscó en Fortesque algo de apoyo, este simplemente asintió —, bueno, resulta que nos ha estado yendo mal en los negocios y, resumiendo, maldeciamos a su suerte y sí, también viejo Morton.

—Pero —aclaró Fortsque —, no hicimos mención alguna de pegarle un tiro al señor Morton eso, sin duda, se lo ha inventado este tipejo —señaló al mayordomo —, mira que poner palabras ajenas en boca de otros, lamentable.

—Si me permiten la palabra —interrumpió la señora de Vermin —, he de decir que nosotras, antes de escuchar el golpe, también escuchamos algo más. Una especie de conversación que venía de las escaleras; como pueden ver, no estamos muy lejos de las escaleras y las paredes de esta casa ya son algo viejas al igual que las puertas, por lo que se escuchan muchas cosas... claro, sin que una tenga intención de escuchar.

—Y, díganos, señorita, ¿qué fue lo que ha escuchado? —la cuestionó Ulises, intrigado.

—Escuchamos la voz del señor Morton, me imagino, hablando con alguien. Por lo que pudimos escuchar parecía que el señor Morton estaba algo enfadado al igual que la otra persona con la que hablaba, solo que no pudimos escuchar la voz de quien era ni mucho de la conversación, pero pudimos entender qu se trataba de algo de dinero o trabajo.

—Ya hemos llegado señor Ulises —anunció uno de los criados acompañado de dos policías —, como usted me dijo, he ido a la casa de los vecinos a pedir prestado un teléfono y llamar a la policía; ya hemos llegado —Todos se miraron perplejos a excepción de Ulises que sonreía.

—Bueno, creo que es un buen momento para desvelar la identidad del asesino —los presentes miraron a Ulises con asombro —. Es evidente que tenemos por lo menos tres sospechosos que pudieron cometer el crimen, en este caso por cuestiones de dinero o trabajo, pero también resulta obvio que el crimen fue cometido por una única persona y esa persona no es ni más ni menos que el señor William —dijo, señalandole con un dedo acusador.

Había una vez un pequeño salmón que todos los días se asomaba a la superficie para ver al pequeño niño jugando a la orilla del rio. Chapoteó y pensó: “Desearía ser un niño".

-``Que... es este lugar? Todo está oscuro. No puedo moverme...`` -Aaaaarlooo! Aaaaarlooo!! -``Arlo? Quien... Es? De dónde viene esa voz? No puedo ni hablar..`` -Arlo! Ahí estabas, no me des esos sustos. Te volviste a dormir en el campo, de llevar tanto sol te vas a enfermar! -``se refiere a mi? Yo.. Soy arlo? Ya siento mi cuerpo! Podré abrir mis ojos?`` -Vamos, levántate ya! *Lo levanta bruscamente* -*inhala una gran bocanada de aire y empieza a toser* -Arlo!! Estás bien? Respira cálmate.

Dorian R. Sweet. Ese era su nombre. Nadie recordaba lo que la "r" significaba, pero todos solían llamarlo por su nombre completo. Inusualmente, tenía un apellido. Y este, aún más inusual, se pavoneaba entre su nombre con sencillez y galantería. ¿Cómo un pordiosero como Dorian podía poseer tal llamado? Las calles de Quebec se enredan por infinitos caminos, mientras Dorian patea una lata vacía, caminando sin rumbo, sonriendo... Porque no importa cómo le llamen, él sabe quien es realmente.

—¿Mi nombre han dicho? —era imposible que no supieran de donde prevenía, pero ellos solo fingían no saberlo, pues mi cabello blanco y mis ojos brillantes púrpuras, indicaban claramente su perdición.—Mi nombre es Altais Chroniel y tengo dieciséis años. Hija del General Edasich Chroniel y su amada esposa Eltanin Chroniel. Habitante de la constelación de Draco y sus estrellas adyacentes. Y juro, por la memoria de toda mi gente, que cada uno de ustedes pagará, cuando traiga de regreso al guardián.

FESTIVIDAD DE LA ESTRELLA MADRE. SALA DE LOS 5 MIEMBROS DEL CONSEJO GUDAN. —Hace aproximadamente un año, una pequeña joven de apellido Chroniel salió de este lugar prometiendo algo. Todos ustedes se burlaron, diciendo que si volvía hablarían de su venganza ¿pero saben una cosa? Yo no soy bueno hablando, soy bueno aniquilando a seres como ustedes. Y antes de que pregunten quién soy, mi nombre es Draco, o mejor conocido como el Dragón del Universo. Y hoy, se extinguirá el Consejo asesino Gudan.

CONSEJO GUDAN —¿No me digas, Inder, que aún te preocupa que en verdad esa niña haya encontrado al guardián? Es un mito, hombre, una figura antigua de un supuesto guerrero que le dió vida a toda la constelación del Dragón. Tú mejor que nadie deberías saber que muchas veces esas leyendas son pura fantasía. Además, ha pasado más de un año y no tenemos noticias de los informantes. Así, que quítate ya ese mal humor,en un par de semanas es el Festival de la Estrella Madre y podrás divertirte en grande

—Pensé, que después de la Guerra de la Estrella Madre, todos en el universo vivirían en paz. Sacrificamos nuestra reputación por brindarles el universo que tanto anhelaban. Los 3 guerreros dieron parte de su energía para formar las constelaciones, y después, de 8 milenios ¿vienes a decirme que nuestro esfuerzo fue en vano?. En fin, encontraste a tu Guardián, Draco se encuentra allá—señalando a un hombre — él te ayudará a detener la extinción que se propone Inder Solar. El Consejo Gudan morirá.

Pequeñito, negro, alocado y vivaz. Agitaba velozmente sus alitas, piaba sin cesar. ¿Llamaba a alguien? No estoy segura si buscaba algo o si solo se trataba de una llamada de atención. Era perseverante, emitía un sonido estridente algo penetrante, rebosante de alegría, transmitía vida. Irrumpía en mi habitación todos los días a la misma hora, no fallaba nunca.

Cris y Fiorella estaban siendo envueltos por la multitud cuando la magia comenzó a fallar y la gente no sabía qué era lo que ocurría. Lastimosamente ambos escucharon algo que no debían dentro del Castillo.  ㅡ ¿Qué vamos a hacer? Si nuestros padres se dan cuenta que estamos espiandoㅡ Christopher estaba seriamente preocupado por las represalias de haber escuchado ㅡ Fiorella debemos irnos.

Nunca...Salgas de casa sin despedirte de tu familia. Tampoco, pelees por tonterías y le desees lo peor a esa persona. ¿Y por qué te digo esto? El karma existe, y está cabrón. Yo, no me despedí de mis hijos pensando que los vería a la mañana siguiente. Pelee con mi esposo y nos gritamos cosas muy hirientes, quedando muy mal. Hoy, estoy en la Fortaleza de un lunático de cabello rojo fuego. En el universo infinito, muy lejos de mi hogar y mi planeta. Han pasado 65 años desde que me secuestraron.

Los dos me miraron sorprendidos -Vosotros dos... -Yo no soy de nadie -Ni de tí Apunté a uno -Ni de tí Apunté al otro Ellos intentaron levantarse -No os mováis Ellos se quedaron en el suelo sentados -Tendría que haberme ocupado de esto hace tiempo, supongo que ahora es un buen momento para hacerlo Les sonreí -Sois lo peor que pude llegar a conocer -Nos vemos en el infierno Levante la pistola y.. *Disparo* Después fuí al otro que estaba asustado y.. *Disparo* -Por fin libertad

Nadie entendía como de un año atrás al actual, la magia había decaído. ¿La magia nacía en los habitantes? Esa era la pregunta que muchos hacían, muchos se preguntaban si realmente de esa manera o había algo que el Reino les había ocultado. ... Fiorella la princesa del Reino Fiorella, fue rodeada por los pobladores, sus padres no decían nada y la joven chica era la única que podía dar respuestas, pero ¿de qué? ¿Ella realmente sabia lo sucedido? Ella solo quería tener su cuento de hadas.

Existia Uma garota-fera Com garras afiadas Com uma língua comprida Dentes de animal Ela era muito forte Mais forte que qualquer homem Portanto sua mãe a trancou em uma jaula De onde ela não podia sair E só a alimentava com pessoas Você é um monstro, um animal, ela dizia, e animais matam E daí ela matava os homens E com fome os comia Mas a garota-fera nunca sabia como eles apareciam Ela nunca os via chegando ...

Olhou para a imagem refletida no espelho, e de seus lábios escapou um lamento sôfrego. Uma nova cicatriz, outra lembrança da criatura repugnante que tornou-se desde o fatídico dia em que fora mordido. Remus Lupin tentou arrumar a franja de modo a cobrir a marca de garras que entrecortava a pele de seu rosto, maculando-a com fundas e irregulares linhas vermelhas. Queria, com tal facilidade, esconder quem era. Mas com a vinda de cada lua cheia, sua situação apenas fazia piorar. O que faria agora?

Zoldak, siempre ofrece mercancía unica y de buena calidad. En mi afán de escapar de una muerte espantosa, caí en una habitación donde se encontraba uno, de los cinco seres más aterradores del universo, el Valg de Fuego. Lovac no sabía que era yo, pero algo hizo se encaprichara conmigo y aunque era considerada basura, un error que no debió llegar a ese lugar, pidió que me anexaran a sus pertenencias como "Gesto de Buena Voluntad". Tal vez hubiera sido mejor morir, que estar en posesión del Valg.

En la parte más profunda de un bosque que estaba en medio del continente un grupo de aventureros se encontraban en medio de una misión que podía costarles la vida. — ¡Todos sabemos el riesgo, pero no es momento de echar para atrás! —dijo uno de los aventureros que parecía ser el líder de la partida—. ¡Debemos encontrar esa entrada sin importar el costo! —Levantó su puño para dar ánimos a sus camaradas. La algarabía llenó el bosque—. Akku —Se dirigió al de su lado—, prepara los caballos ya.

—Calma mocoso, todo estará bien. En el momento en que Blade dijo esas palabras, gritos de terror resonaron en todo el bosque. Sin pensarlo dos veces golpeó su caballo y casi volando fue al frente de batalla. Era el troll, les había seguido el rastro. Sin más opción que luchar, Blade sacó su inmensa espada mágica y se colocó en posición de ataque, pero un rayo cayó sobre el monstruo y lo partió a la mitad. Solo se oyó una voz. —Valientes, bienvenidos. Esto es Ibelikor, la fortaleza de los dioses.

Esa voz retumbó en los oídos de todos pero al momento hubo un silencio abismal. Una idea se fijó en la mente de Blade: "Sigue el camino". El camino no estaba definido, pero en su mente si lo estaba. Se aventuró y todos le siguieron, fue una caminata de unos diez minutos a través de las montañas, Hasta que allí estaba. Esculpida en la roca de la montaña y brillante como el sol e invisible al mismo tiempo. — ¡Esa es...! —Gritó Blade. Exacto, era la fortaleza de los dioses en la tierra: Ibelikor.

—Como nunca...— Respondió esbozando una pequeña sonrisa acariciandole el cabello a Izan —Jamás olvidaré la sonrisa de Izan... Cumplió uno de sus tantos sueños. Darío sonrió levemente terminandole de ajustar la aguja del suero. —Dejemoslo dormir, está cansado. —Vamos. Se fueron de la habitación cerrando la puerta. Martín llevó su mano a una foto instantánea que estaba en su chaqueta, en esta estaba Izan y él en un acuario sonriendo mientras que él mayor apuntaba una especie marina.

Ambos estaban mirando como el sol se escondía en la extensa agua salada llamada océano, se encontraban sentados en una manta en un silencio cómodo. Él mira al pequeño niño que juró jamás encariñarse sabiendo su triste final. —¿Cuál es tu mayor sueño Izan?. Preguntó el mayor obteniendo toda la atención del pequeño niño de nueve años.

¿Qué probabilidades hay de que seas secuestrada por alienígenas?, es como decir que viajaste con Los ReyesMagos y Santa Claus; nadie lo creería posible. Sin embargo, no los vemos por que usan disfraces humanos, y actúan como uno. Tres enormes serpientes en trajes de hombres me secuestraron. Pedí ayuda en medio de una carretera, pero el tiempo se detuvo y solo pude tomar una foto que envié por WhatsApp a mi cretino esposo; no lo abandoné por otro hombre, tampoco me fuí para rehacer mi vida...

La pequeña niña Ya no quería volar, Tenia tantas heridas Que la habían hecho llorar. Las personas que más amaba Fueron las mismas que la atacaron Sentia que ya no podía, Sentia que se moría. Pero siempre sale el sol, Siempre hay anhelos que contar. Veía el sol brillar, Sentia el aire al caminar, Sabía que el amor seguía sonando, Entendía que la tristeza la iba abandonando.

La pequeña niña Ya no quería volar, Tenia tantas heridas Que la habían hecho llorar. Las personas que más amaba Fueron las mismas que la atacaron Sentia que ya no podía, Sentia que se moría. Pero siempre sale el sol, Siempre hay anhelos que contar. Veía el sol brillar, Sentia el aire al caminar, Sabía que el amor seguía sonando, Entendía que la tristeza la iba abandonando.

Siempre me habían dicho que la persona al otro lado del espejo se llamaba Eugene. Era una imitadora de primera clase siempre estaba copiando todo lo que yo hacía cada vez que me asomaba a verla.

— ¿Pues qué demonios crees que estamos haciendo, Dianita? —Replicó Saúl, al mismo tiempo que le ofrecía a la niña el vaso de agua y sacaba de su bolsillo una píldora rojiza de aspecto extraño— Somos tan buenos que te estamos alimentando y dando tus vitaminas especiales para que estés muy bien cuando nuestros amiguitos vengan por ti...Ahora, cállate y bebe.

— ¿C- Cuáles amiguitos? ¿C-cómo que me voy a tener que ir con ellos?— Tartamudeó Diana, haciendo una casi imperceptible mueca de disgusto mientras engullía la extraña píldora con un poco de agua— Yo no quiero irme con ninguno de sus “amiguitos”. No quiero trabajar para ellos. No los conozco y aún así sé que de seguro son unos tipos igual de malvados que ustedes ¡Quiero a mi papi!

— ¡Ay, mi niña! ¡Tan poderosa y tan jodidamente ingenua! —sonrió Luis—No te estamos preguntando. Es una decisión que ya tomamos. Para nosotros, eres solamente una niñita insufrible, pero encontramos a un grupo de personas dispuestos a aguantarte hasta que tu papi regrese. ¡Claro! A cambio de darnos un par de milloncitos.

— ¡Idiotas! —Musitó entre dientes la pequeña rubia, ahogando entre sus labios un sollozo— Mi papá me va a encontrar antes de que vengan por mí los tontos de sus amigos. Ustedes van a perder este juego, ya verán. No crean que les tengo miedo a ustedes…Ya lo verán. No tienen ni idea de lo que soy capaz.

— ¡Ay, preciosa! —Replicó Saúl con una sonrisita burlona— ¿Qué puedes hacer en contra nuestra? Somos dos contra una, y además, de seguro ya lo sabes, pero te recuerdo que es cuestión de segundos para que tu pastilla haga efecto. En medio irónico que lo que alimenta te deje tan vulnerable, ¿no crees? Te vas a quedar fuera de la pelea por lo menos una media hora.

—Piénsalo de nuevo— sonrió Diana con infinita seguridad, justo antes de escupir con coraje la píldora. La había escondido debajo de su lengua—Ustedes son tan tontos, que todo este encierro sólo me hizo más fuerte. Me callé para ver qué tan lejos llegaban, pero ya no puedo….

—Ya enloqueciste, cariño—afirmó Luis, fingiendo frialdad total, al tiempo que acariciaba con un dedo la pálida mejilla de la niña— Por ser tan mala y respondona, te vamos a tener que dar ahora dos píldoras. Nadie, ni siquiera tú, puede jugar con nosotros ¿Verdad que lo sabes mocosa?

—No. Lo único que sé, es que se les acabó el juego. — vociferó ella, al tiempo que levantaba sus dos brazos hacia el cielo, rompiendo en cuestión de segundos las ataduras. Violentas descargas eléctricas brotaron desde las puntas de sus dedos. Todo se volvió negro para los dos hombres

— ¡Me lleva el diablo! — alcanzó a maldecir Luis con todo su corazón, antes de que las descargas eléctricas redujeran a ambos hombres a cenizas. De la peor forma aprendieron que se habían metido con la chica equivocada.

— ¿Papi, dónde estás? —masculló Diana, al tiempo que se enjugaba los ojos con su pequeña manita. Los días habían pasado y ella todavía no se había acostumbrado a permanecer todo el día en ese oscuro cuarto. Extrañaba jugar en el parque con sus amigos, y sobre todo, su antigua vida.

Carlos: Últimamente los teléfonos no paran de sonar, de un día a otro la delincuencia subió y los policías no nos damos a basto. Es como si todos los delincuentes de alguna manera se reunieran en esta ciudad. Nicha: Muy interesante mi amigo, te haré una pregunta; ¿si un montanista solo ve el pie de la montaña sabrá que tan lejos está de la cima? Carlos: Es claro que no, nadie con solo ver el inicio de una pista pueda saber el final de ella, por lo cual debe ver toda la pista para saber el final.

Nisha se le quedó mirando atentamente a su compañero y habló: -Es un momento desesperado, solo nos queda dejarlo en libertad y después volverlo a atrapar con más calma. Carlos: ¿Estas segura de eso?.... Una bala hiere al oficial Nicha: Losiento, pero ahora tienes que saber la verdad, yo soy la mala acá y hasta acá quedaste. Carlos:¿Porque?¿porque tu? Nicha: Lo que realmente paso acá es que cayeron en mi trampa y muy pronto seré la criminal más temida de todos los tiempos...

Joel no pestañea sin dejar de mirarlo: " mis dedos recorren el teclado te imaginas que nadie descubre aún la verdad de las palabras. Nunca pensaron en las palabras de autores pasados. No creo que sepan la verdad ahora" Deja de hablar y retira su mirada a la pantalla: "Sabes querido. Sigues bello como la vez que nos vimos en ese bar"

Marie se sacudía frotando sus manos limpias por todo el piso sucio del lugar. —¡Marie, tranquila!— parecía no oírme. Pronto se detuvo. El sonido de una baldosa rota me indicaba que era el momento. —Sh, déjame a mi...— dije mientras me acercaba hacia una parte del suelo que, sabia, podía quitarse. Mi mano encontró la prueba del amor hacia Marie. Oculta bajo ese cobertizo, una caja de madera con carne podrida y despellejada. —Ya no hay bestia, ¿Ahora recuerdas? Hace 10 años dejó tu cama...—

Abrí la puerta del cobertizo de aquella vieja casa que no visitaba hace 10 años. Quién diría que allí, en aquel descuidado y sucio lugar había pasado los mejores años de mi infancia. Ahora solo era un lugar abandonado de maderas rotas, llenas de humedad, con un hedor desagradable, putrefacto. La oscuridad no me permitía visualizar mucho pero al ingresar el olor era aún más intenso, casi vomitivo. —No sabía que un recoveco podía oler tan mal...—dije. Los recuerdos se empezaban a distorsionar.

El tiempo avanza y todo continúa en el mismo estado de quietud. Llevan años compartiendo las mismas actitudes. Cada cual con propios pensamientos envolventes concernientes al otro. Las mentes poseen un único protagonista: Para Thomas es Mark Jung, el chico coreano que proviene del extranjero y con quién cursó el nivel secundario tiempo atrás. Ahora ambos son universitarios y Thomas no abandona sus intentos por captar la atención de Mark —Mírame ... —le susurra desde la lejanía en la clase.

Ante la confesión, el alma de Mark casi da un vuelco estrepitoso. Los latidos resonaron en los oídos pequeños. Mantuvo el mirar en Thomas por algunos instantes previo a dirigirla hacia la mesa y contemplar la frase dicha. ¿Le gustaba a Thomas? ¡Eso era la gloria misma! Llevaba años guardando su amor, soportando las actitudes de brabucón de éste sólo para estar con él. —Déjame pensarlo —vaciló en si confesarse también. Él no supo que Thomas con el tiempo había logrado que lo mirara al fin...

Houve há muito tempo, em um lugar incerto, uma menina. A menina era muito triste, e estava sempre a chorar. Tinha raiva de seus olhos, por sempre fazê-la chorar; até quando ela não queria. Então, com os olhos ainda úmidos de lágrimas, ela os arrancou do rosto e os guardou em uma pequena caixa de madeira. A menina não chorava mais, mas agora as pessoas tinham medo dela. Ela não parecia uma pessoa. A menina não tinha mais sentimentos. ...

Has dicho que de mi algún día te cansarías, lo entiendo, realmente lo entiendo. Ya lo han hecho, ya se han cansado de mi. La cosa es que se, que de todas esas personas que se cansaron, tú serás la que me dolerá más. A veces estamos en desacuerdo, a veces me has caído mal pero mi amor por ti sobrepasa todo eso. Dices que es una advertencia que prefiero que nunca llegues a cumplir. Me duele que esto sea así. Intento dejarte un poquito en paz, pero cuando busco molestar a alguien más te molesta.

- ¿Por qué debería tenerle miedo a ese fenómeno? ¿Sabes? Si no me hubieras dicho algo como eso, no se me hubiera ocurrido una gran idea. Lo entregaré al gobierno, o mejor aun utilizaré nuestro pequeño comodín para casarme. sabiendo que puedo delatar a su amiguito, Aiden no va a negarse.

(¡Lo maté!) Pensé mientras seguía mi polvoriento camino, mientras masticaba la carne seca que quité a ese anciano. Lo cuidé mucho, de otros ladrones, a cambio debía darme su parte y no quería... Tuve que darle una paliza, y se me fue la mano. ¡Aprendió! El mundo es más frío que yo, y si no le quitaba su comida, otro lo iba a hacer. Somos todos animales en este planeta. Todos, cuentan con nadie. La falta de humanidad, y libros de educación social y mental nos convirtieron en luchadores salvajes.

-¿Por que tengo que hacerlo? ¿Es tan difícil que alguien me ame? ¿Tan mala persona soy? Solo quiero un poco de amor, ese amor que tienen todos aqui dentro. Desde que estoy en esta fortaleza no hay nadie para mi nunca. ¿Por qué?

Esta noche en vivo tenemos la exclusiva de la muerte de varios modificados ilegales, en los barrios bajos de Cicuta en el distrito de Cicuta, si bien grupo Souls donó los terrenos para que pudieran vivir una vida relativamente tranquila tras todo lo que vivieron, la seguridad y alimentos están a cargo de otras empresas y casi nadie viene a esta zona. Aunque no podemos transmitir todas las imágenes, varios de los cuerpos fueron brutalmente descuartizados, y parecen carecer de sus inhibidores.

Realmente ¿cuánta importancia le adjudicas a la escritura? ¿Te apasiona o es un mero pasatiempo? Cualquiera sea el camino que elegiste, gozalo, exprime ese arte como si no hubiera un mañana. Con tu pasión puedes lograr tus objetivos y llegarás muy lejos. Con el pasatiempo adquirirás experiencia y quién niega que en algún momento te decidas a tomarlo con mayor seriedad. No te rindas aunque creas que es difícil, mejor intentarlo a que no hacerlo. Escritxr, cree en ti. Nadie lo hará como tú.

- ¿No es mejor dejarlo por lo sano?Nadie te asegura que las cosas saldrán como lo estas planeando. No lo chantajees no va a funcionar. En el peor de los casos, tendrás que ceñirte a las consecuencias.

Te giras hacia mí y me dedicas una parte de la estrofa. Sonrío al ser el receptor y te respondo con una mirada y canto. Te observo de manera indiscreta. Estamos cantando en un programa de música junto con nuestros compañeros. Me echas un vistazo fugaz y sonríes en un atisbo. Giro el cuerpo por completo hacia ti y mantengo el foco sobre tu encantador rostro. Sé que sientes mi mirar. Tus orejas se tornan rojas y bajas las orbes hacia tu ¿pelvis...? ¿Acaso te estremecí hasta ese nivel?

-Rique, esto ya suena muy descabellado. -¿Tienes una mejor explicación? Además te digo que esto no se ha terminado. Pronto habrá más víctimas y presiento que en esta ocasión será alguien importante. Bajo el tapete del cuarto una tabla suelta resonaba. Al revisar, debajo encontramos un paquete con una USB. -¡Lo sabía! Sabía que aquí había algo. ¡Qué te parece Sus! No creías que podría logra.. ¿Sus qué haces? -Este ratón no supo esconder bien el queso. Y ahora sabes demasiado. ¡Dame la USB!

Me dirigí hacia la oficina de Sus en el ministerio público debajo de una tormenta y, aunque manejaba tranquilo, con la palma de mi mano golpeteaba el volante tratando de calmar mi ansiedad. Ni en vacaciones me puedo alejar del trabajo y es que, la incógnita de este caso me tiene sin dormir. Con la gabardina empapada entré a la oficina sin tocar la puerta. -Hola Susana, sé que es tarde pero te quiero pedir un favor. Necesito acceso a la carpeta del caso 'Barreta'. Te prometo que será rápido

- Ese tipo es el que siempre esta con tu ex tóxica Aiden. ¿Por qué lo dejaste estar con nosotros? -Apaga tus ojos de zombi Johan, te pueden ver y lo invite porque era obvio que el tipo quería descubrir algo de nosotros y al parecer no lo encontró.

Susan estaba consternada, en el sorteo universitario, ella esperaba que le tocara cualquier persona e incluso un desconocido en el amigo secreto. Pero le tocó Tom, ella no sabía como lidiar con el remolino de emociones divagando en su corazón. Porque ella le había dicho hace dos años que lo queria y él había sido cruel con ella. Ahora ella sentia que estaba perdida, sabia que regalar. ¿Quién no conoce perfectamente al chico del que gusta? o solia gustar.

—Pero Haru, por XAE, emociónate, mira todo lo que nos regaló Alika, además vamos a pasarla genial, es un plan divertido, relajado… no vamos a pelear con nadie, solo vamos a pasear por las dos Europas, aprender sobre el pasado y sobre el futuro...

—No sé chicas, igual nada de esto es real, odio el hecho de que ni las conozca, no me siento de ánimo para nada, no sé por qué accedí, tal vez no debería conectarme nunca más… Chicas afuera existe una vida real, nosotras hemos pasado nuestra vida conectadas, deberíamos planear un viaje sí, pero para vernos, así Alika sea de una Colonia más alta que la nuestra… Solo digo...

¡Así me gusta, joder! Bien, recapitulamos. Álex, pásame el whisky. A ver, tenemos a un investigador incompetente que recurre al espiritualismo para resolver el caso. Hay una red de tratas que rodea al juez, y que puede ser la causa más probable de los asesinatos. Esto involucra a las otras dos víctimas, una de ellas un empresario ricachón con suficiente pasta para pagar jovencitas... Bueno, ¿alguien tiene algo para cerrar el caso? ¿No? Me lo imaginaba, yo tampoco. Está bien, otra ronda.

Espera un momento. ¿Cómo va después a casa del juez? ¿Lo conoce? Bueno, si abusa también de él, conocerá donde vive, claro. Después de asesinar a la primera víctima, y que este hecho salga en las noticias, para poder relacionarlo con la trama de prostitución decide ir también a por el líder de la trama. El juez Gárregui. Es magistral. Pero, ¿cómo un chico, menor de edad, es capaz de hacer todo esto?

La red de trata es con menores. Lo sé, es asqueroso. Una vez contacté con un juez que había llevado un caso de este estilo... En fin, el hijo del psicólogo es parte de esta red. Se encuentra con la primera víctima cuando ésta se va a duchar, acaba de abusar de él y en un momento de impulsividad, sin poder soportar más la situación, le ataca, causándole esas laceraciones. El juez Gárregui es el líder de la trama, por ello, el chico va a su casa por la noche para acabar con él.

No te aguanto, joder. Siempre haces lo mismo. ¿No te cansas de ganar? Ya, ya... Yo tampoco me cansaría. Está bien, yo no tengo nada más. Miguel, es tu oportunidad de darle la vuelta a esto, al menos quiero ver cómo se va humillado por una vez.

La tercera víctima no está involucrada. La mujer descubre que tiene un affaire, lo típico. Él lo reconoce esa noche, y cuando la discusión se descontrola, la mujer lo ahoga. Le hace los cortes para relacionarlo con las dos primeras víctimas y no ser el centro de la investigación. Las parejas siempre lo son. Pero, claro está, no existe el crimen perfecto. El ADN acaba confirmando la infidelidad, y como es natural, identificando al agresor de las dos primeras víctimas. El hijo del psicólogo.

Mira, chaval. Llevas poco tiempo en el cuerpo, así que entiendo que aún no te hayas visto en una de éstas. Pero te aseguro que no sabes de lo que es capaz una persona cuando se encuentra en el límite de su capacidad para soportar vivencias traumáticas. Lo vemos cada día, en mayor o menor medida. Créeme. Lo que no cuadra, Álex, es la tercera víctima. ¿Cómo lo explicas?

El hijo del psicólogo que dice ver el aura del señor Gárregui tiene un hijo menor de edad. Ya está, sí. Bueno, si te parece muy corto...  Está muy interesado en el caso, y acompaña a su padre en una de las ocasiones que visita la casa de la víctima. Eso es todo. El caso ya está resuelto, me faltaba una ronda más para terminar de darle sentido. Gracias, Rodrigo, me has dado la clave. Os podéis rendir si queréis.

Pues te vas a quedar con las ganas, Rodri. Lo de la trata de blancas da mucho juego, pero no sé cómo relacionar al hijo del psicólogo. A ver, cabrón. ¿Qué tienes?

Voy a dejar de llamarte para la noche de novela negra, te lo aseguro. Joder, es frustrante. La próxima en mi casa, y traed cerveza, que ya me queda poca. No me mires así, Rodri, es el mejor. Álex siempre acaba llegando a la solución más probable. Acéptalo, chaval, y dormirás mejor. Anda, sírvete otra. Brindo por el chico del psicólogo, y por mandar al ficticio hijo de perra de Gárregui donde se merece. Por suerte. Esta vez solo es un juego. ¡Salud!

Viernes, 6am. El cuerpo se encuentra en postura fetal entre la ducha y el lavabo. La desnudez puede implicar que se iba a duchar, o ya se había duchado. Tiene cortes en los brazos y el costado; no son limpios. Los dos vasos en la terraza y la puerta sin forzar indican que la víctima conocía al agresor. Cuando la policía llega, las ventanas están abiertas, el vendaval ha tirado muchas cosas y las puertas están golpeando las paredes haciendo un ruido estridente. No se encuentra el arma homicida.

Él: _"Entre mil espejismos, tu rostro es el único que siempre reconozco. Suelo preguntarme si es que haz vivido en mi mundo, o simplemente lo eres."

Ella:_ "Ahora sí puedo decirte el por qué. Eres nuestro príncipe, y yo solo una médium que te ha encontrado mediante la energía de tu madre. Viviste hasta hoy con un anciano que te adoptó para hacerte trabajar en su beneficio y lo llamaste familia. No es tu abuelo, tú ya lo intuías. Cuando hablo, son mis palabras pero la voz es de la reina. Cuando me mirás, es mi imagen pero la esencia es de ella. Tu verdadera familia es la que más te espera."

Oye Nate, ¿ya entregaste tu ensayo?, voy a necesitar a mi escudero éste fin de semana. Apuesto a que no adivinas a donde iremos ésta vez, definitivamente es el sitio más ilegal y espeluznante en el que nos hemos metido hasta ahora. Y lo será por un tiempo, tía Lori me matará si se entera que te arrestaron por acompañarme. ¿Estás vivo?, solo bromeaba, no van a arrestar a nadie. Entraremos rápido y en silencio, ni los muertos nos oirán llegar. La cámara está lista amigo, dime si podrás.

—Desde que llegaron, ninguno de ustedes dos preguntó o habló por Mateo, aún cuando es más que su vecino; es un integrante de tu club, Eduard, y no lo niegues. —Le apunto con mi dedo para continuar diciendo a todo los presentes—: Créanme o no, alguno de ellos dos tiene relación con lo que acabamos de presenciar… Solo espero que… me esté equivocando en juzgar a Yulith y Eduard, —termino de decirlo y llevo mi mano a la boca, poniéndome a pensar y conjetar en algo que no nos lleve al peligro.

El visitante había llegado, dice investigar un caso de hace 7 años, aunque tenga mis dudas, hoy también viene el hermano de la chica a la que investiga, la paciente Metzia, etiquetada como una persona con problemas mentales, tal vez estar en un manicomio es algo… natural. —Entonces… ¿vamos? —le digo levantándome. Lo llevo donde ella, el cuál él se mantuvo de pie observando las preguntas rutinarias a los pacientes; no había sospechas hasta que ella nombra: "Estelar"; él lleva su mano a su muñeca.

Tenerte aquí, frente a mí es un torbellino de sentimientos. —Hola— dije a An. —¿Qué quieres?— me respondiste. No supe que decir ante tu dureza. Te deje ahí porque me destrozaba verte así de distante. Caminé hasta la biblioteca y espere que páginas tras páginas calmará mi dolor. Sin darme cuenta anocheció. El solo hecho de salir de ahí me atemorizaba, por lo que decidí esconderme del vigilante hasta que se fuera. Mi desgracia fue que no estaba sola, un par de ojos me observaba...

La Realidad y la Fantasía son lo mismo, porque uno nace sabiendo como es la realidad, otro nace sabiendo como es la fantasía. Pero yo, veo al mismo tiempo, lo llamo Realidad Fantasiosa. Es tonto ponerle un nombre que ya ah existido, pero, lo mío es especial. Puedo ver criaturas, grandes y pequeñas, nudo de color y más. Tal vez tenga fallos de la realidad, pero, sin ella, no sabría que decirte lo que hay, más allá de nuestra realidad, veo mucho más que los demás. “Tengo miedo, pero se que hacer".

—¡Ya te dije que no sé cuándo comenzó! Eh... era como esa especie de circunstancia que sabes cercana, pero que no ouedes comprobar... como si... como si escucharas que afuera llueve, pero al salir, el sol está en lo alto, burlándose del poco sentido común que se escurre entre tus ojeras, o entre tus pestañas, hartas de la vigilia. No sé cómo es posible que todavía pueda hablarte como lo hago ahora, solo sé que... lo que vi fue real. No, no, no me mires con esa cara, demonios hablo hablo en s...

—No puede ser... Esa cosa no puede ser real. Me estoy volviendo loco, eso es lo que pasa. Y, ¿ahora qué?, ¡quita esa cara de "te lo dije", es molesta. Solo conduce... Santa madre, no puedo creer que en el mundo existan animales tan... ¿Era eso un animal? Quizá no hemos dormido lo suficiente.

—Pero muchach... ¡Muchachos, no! ¡Mis lechugas! Parecen un par de salvajes. ¡Van a asustar al rebaño, dios mío!, ¿pero qué les pasa?; ya saben que a mí no me gustan sus bromitas, soy muy vieja para eso. No, no, suficiente tengo con que el descarado de Marco me llame "Vicky" como si fuera su compañerita de la escuela. A ver si...

—¡Perdónanos Victoria! Pero sus rebaños... No, déjese los rebaños, todo el pueblo está en peligro. Allí, cerca de los bosques, hay un horripilante animal. Leo y yo estamos seguritos de que lo vimos. No nos siguió, pero es escalofriante pensar que algo tan horrible como eso está a dos pasos de nuestras casas.

—Marco tiene razón, Victoria. Estamos diciendo toda la verdad. ¿Ha contado últimamente su ganado? Seguro que hacen falta cabezas... Rondando por ahí, con esas horribles patas ensangrentadas. ¡Podemos ayudarla a llevarla lejos de aquí, a usted y a doña Carmen. A todo el pueblo de hecho... No, no entiendo. ¿Por qué nos mira de esa forma?, no nos cree, ¿cierto?

—Leo... Leo, cállate. ¡Cállate ahora!, ¿Qué no te das cuenta de lo que hace esta maldita vieja?

—No se preocupen muchachos... Uno de ustedes sobrevivirá. Y mañana no tendrá que lidiar con el dolor de perder a un amigo... Porque no recordará nada. Ni sobre mí, ni sobre mi adorada mascota; esa, esa es la verdad. FIN.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

DAN Los he visto, Luke, estaban allí mismo, a plena luz del día. Eran tal como los describía el abuelo demente este, ¿te acuerdas? Con sus alas raras, como si fueran cuerpos con los huesos saliendo de sus espaldas, sin una membrana o plumas. No sé tú, pero yo estoy a punto de considerar que al final estamos cazando a las uñas del verdadero monstruo. Y, maldito sea, esa cosa de seguro que sabe perfectamente que vamos tras sus huellas.

Fiore corrió hacia Christopher, los entes oscuros habían sido derrotados. ㅡ No no no noooㅡ Fiorella lloraba mientras sostenía la herida de Chris, el chico sonrió levemente ㅡ no te vayas por favor, Chris, no me dejesㅡ Ambos estaban solos en aquel frío subterráneo, lágrimas rodaron sobre sus mejillas, un último beso de despedida ㅡ Te amo mucho Chris, en verdad te amo, con toda mi vida, gracias por salvarme. T-Te amo. Fin.