La humanidad desde tiempos inmemorables ha vivido con miedo, con angustias en su corazón, si bien el miedo es una parte fundamental para la existencia humana, en otras ocasiones rebelan en nosotros errores cometidos, en este capítulo me enfocare en lo segundo; ¿Has escuchado la frase “El que nada debe, nada teme”, pues bien, esta frase popular tiene cierta razón de ser, cuando el ser humano habito por primera vez esta tierra, no tenía noción de lo que es bueno o malo, porque era inocente, como un pequeño que solo sabe jugar y reír, como un hermoso niño que en sus primeros pasos puede verse su felicidad inmensa, mira a sus padres con ternura, porque sabe que con ellos está seguro, porque está confiado que no lo dejaran caer.
Los primeros hombres de la tierra amaban a su creador, confiaban en él por qué sabían que no los dejaría desamparados, vivían en un huerto maravilloso, donde miles de animales convivían juntos, donde los deliciosos frutos estaban a su alcance, no tenían necesidad de cultivar la tierra, ni de regarla porque todo estaba listo, todo lo hacia Dios para ellos. Que dichosos era en aquel entonces, pero su felicidad termino por una envidia, una desobediencia, un anhelo que aparentaba ser algo bueno, termino en vergüenza.
Una serpiente que solo planeo destruir al hombre, quizá ella pensaba que si el hombre se rebelaba contra Dios serian destruidos o quizá buscaba burlarse de la creación; sus motivos pudieron ser envidia, egoísmo o simplemente rebeldía; cuales fueran las razones destruyo la vida del hombre; una mujer que se dejó seducir por las hermosas palabras de la serpiente seguramente sería castigada.
Pero ¿Por qué ella hizo lo que hizo? Puede ser que quiso compararse a Dios, y conocer los secretos del universo, ¿O también el fruto era tan tentador que era codiciable a los ojos?, quizá el fruto era desapercibido y pasado por alto, hasta que esta serpiente envolvió con dulzura a una mujer que termino cayendo en el error por su insistencia; pero tampoco quería estar sola en el asunto también invito al hombre a participar en el error y ambos con propia conciencia y conocimiento sin duda habían desobedecido a una sola petición.
“Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos, entonces cocieron hojas de higuera y se hicieron delantales. Éxodo 3:7”
“Tuve miedo porque estaba desnudo” Éxodo 3:10
La primera vez que el hombre tuvo miedo fue en aquel entonces. Hoy por hoy tenemos miedo, hasta del más mínimo insecto, como las cucarachas por ejemplo, pero ellos vivían entre animales salvajes y no temían, pero cuando desobedecieron a Dios, entonces empezaron a tener miedo a causa de la vergüenza, a causa de su condición pecaminosa.
Y a pesar de ello, Dios no los destruyo, es verdad, fueron desterrados de aquel paraíso, las cosas ya no serían fáciles, pero Dios misericordioso, les dejo vivir y todavía podrían disfrutar de su vida, claro ahora tendrían que esforzarse en cultivar para sembrar, pero gracias a su misericordia hoy estás leyendo esto, y vives bien, desde que estés leyendo esto es porque tienes mejores oportunidades que otros ¿o no?, tienes que confiar y ser agradecido de estar en donde estas, es decir todavía puedes mejorar en tu caminar, pero debes enfocarte; primero pide sabiduría para poder encontrar el camino correcto, no tengas miedo como el pueblo de Israel que en alta voz dijo: “Pero no hable Dios con nosotros, para que no muramos” Dt. 5:22
¿Por qué tendrían miedo de hablar con Dios? Hay una pasaje en la biblia que dice que no hay hombre que vea a Dios y viva, quizá tendrían miedo por su naturaleza pecaminosa, por sus errores, imagínate un momento si vieras a Dios cara a cara, ¡huao!, ni siquiera imaginarlo, porque sería algo maravilloso,
Poder escuchar su voz es algo que tú puedes hacer, no tengas miedo de hablar con él, porque gracias al señor Jesucristo somos justificados por su gracia, por su sangre derramada en la cruz, ¿Por qué temes?, Solo tenemos que tener el corazón en completa sinceridad y entregarle a él esas cargas, esos miedos de los cuales somos prisioneros.
Si en verdad le buscas entenderás que este amor es perfecto, es más agradable que cualquier amor terrenal; él nos ha brindado esta oportunidad de encontrarlo, solo dejemos nuestro miedo, si cometimos un error, bueno, reconozcamos que fuimos débiles, que nos dejamos seducir por el pecado, pero no nos quedemos en el pasado, ya paso, sigamos adelante, si estamos cansados de sentirnos avergonzados, no sigamos cometiendo los mismos errores, dejemos todo eso en manos de Dios.
Sé que la ansiedad te atormenta, cuando existe un vicio que no puedes dejar, pero dijo el señor, que dejemos nuestra ansiedad en él y obrara en nosotros, no es fácil, es un reto, pero ocúpate en otras cosas, sal al aire libre, siembra un árbol, cría una mascota, corre, haz ejercicio, lee un libro, lo importante es que ese tiempo que ocupas en lo que te atormenta, lo ocupes en algo más productivo para tu vida. Para tu salud física y mental. No tengas miedo Dios está contigo.
“Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros. Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo. Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.” 1 Pedro 5:7-10
Nancy Cruz
