Querido diario, la semana que viene cumplo dieciocho años. Debería estar feliz, pero no lo estoy. De hecho, ahora mismo, me gustaría no cumplir años nunca más. Hace unos días mi padre vino a mi habitación y me dijo que pronto me casaré y seré una buena esposa. Quiere que me case con Juan. Pero a mi Juan no me gusta. Es muy gordo y huele muy raro. Cuando nuestros padres nos hicieron encontrar por primera vez, Juan tenía el pelo sucio y engominado. Era ridículo. Parecía un actor de las películas en blanco y negro. Mi padre me dijo que si nuestra familia se enlaza con la de Juan, tendremos muchos privilegios. Pero a mi no me interesan los privilegios. Yo no quiero casarme con Juan. Ni mañana ni nunca. Quiero ser libre y poder elegir yo misma mi propio novio cuando me apetezca. Mi padre me dijo que los padres de Juan pagarán todos los gastos de la boda y que será la boda más grande y bonita que se haya visto nunca en el pueblo. Pero a mí todo eso me da igual. Por eso he decidido que esta será la última página que escribo de este diario. Ya tengo la maleta preparada con las pocas cosas que quiero llevar conmigo. Pienso irme de aquí.
¡No me importa adonde!
Solo quiero ir a cualquier sitio donde nadie tenga que decirme a quién tengo que amar y con quién tengo que vivir el resto de mi vida.
Gracias por leer!
Podemos mantener a Inkspired gratis al mostrar publicidad a nuestras visitas. Por favor, apóyanos poniendo en “lista blanca” o desactivando tu AdBlocker (bloqueador de publicidad).
Después de hacerlo, por favor recarga el sitio web para continuar utilizando Inkspired normalmente.