🌸 ϙᴜɪᴇʀᴏ ᴜɴ ʙᴇsᴏ Seguir historia

Su alterada respiración hizo que la ventana comenzará empañarse a causa del frío que así, mantenerse oculto jamás había sido algo en lo que fuera sencillo. Sus pies dolían por el frío y sus manos estaban cansadas por el esfuerzo que hacía para poder lograr ver a su Hyung.

El alfa entraba recién al aula que estaba un poco vacía, su lugar se encontraba casi en el centro del salón y eso dificultaba que JiMin pudiera ver al pálido desde la ventana.

Sus feromonas eran ocultas por ese neutralizador que le había regalado su hermano mayor, y eso hacia que el omega se sintiera un poco más seguro al saber que su aroma no se notaba al resto.

Su mejor amigo JungKook siempre le decía que se acercará a hablarle, pero el omega penoso nunca lo intento, el otro omega le había comentado anteriormente que YoonGi pensaba que JiMin era un simple Beta, haciendo que el menor se sintiera más pequeño de lo que ya era.

El alfa estaba con su mochila sobre sus muslos y el celular en la mano escribiendo rápidamente, JiMin soltó un bostezo al sentirse algo cansado por despertar más temprano de lo normal, sus ojitos se sintieron llorosos y soltó un pequeño sonidito de desagrado, alzó su vista nuevamente a la ventana mientras que el alfa soltaba un bostezo que duró un poco más, uno que expresaba cuán cansado se encontraba.

El omega de JiMin chilló al no poder acercarse y mimar al alfa para poder relajarlo. Su cuerpo inconscientemente se fué hacia el suelo al notar que el alfa miraba a su alrededor esperando encontrar a su amigo por el lugar. El corazón de JiMin latía con fuerza y su piel se erizó, de ahora en adelante iba a tener más cuidado.

Se sentó en el suelo y sacó su botella de agua, bebió un poco para luego volverla a guardar, tomó su mochila al ver que JungKook recién llegaba al instituto.

— ¡JiMin Hyung!— Chilló el menor.— ¿Qué hace tan temprano aquí?— Preguntó cuando vió al chico de mejilla esponjosas se puso de pie para avanzar hasta él.

— Vine a ver a YoonGi hyung.— Se sacudió las rodillas y su trasero a causa del polvo que había en el suelo.

— Hyung... ¿Cuántas veces le debo de alentar para que se acerque y hablé con él?— El menor estaba cansado que siempre sucedía lo mismo.

A pesar de que JiMin tenía dieciocho años recién cumplidos, no se animaba a la idea de hablar con el alfa. Suspiró cuando pudo ingresar al primer piso para llegar a su aula, las personas pasaban chocando los hombros de ambos, pues estaba claro, no eran omegas populares.

Un fuerte empujón hizo que JiMin perdiera el equilibrio, haciendo que chocará con JungKook para intentar sostenerse, acción que no funcionó. El impacto en su trasero le dolió más que su primer celo, sus caderas dolieron por el choque fuerte en el suelo. El chico que le causó su caída se acercó asustado intentando ponerlo de pie.

— Lo siento, lo siento, lo siento...— Repitió varias veces antes de tomar la mano del omega, alejando a JungKook de él. El alfa lo puso de pie con un sólo brazo levantó el pequeño cuerpo del menor.

— Está bien.— Habló débilmente, tratando de no enfocarse en el dolor en su trasero.

— Lo siento, soy muy torpe.— El alfa paso la mano derecha por la espalda de JiMin, así bajandola hasta tu trasero limpiando cualquier tipo de polvo que estuvera de más.

— ¡No lo toque, sucio!— Gritó un poco alterado JungKook, así llamando la atención de los demás alumnos.

— Disculpa.— Habló con torpeza.— Soy NamJoon.— El alfa se alejó de JiMin y le extendió su mano.

— JiMin.— Le estrechó su mano para luego soltarla y pasarla a sobar su trasero.

— ¡Kim NamJoon, hoy vas a morir!— Un chico con cabello castaño y labios grandes lo señaló.— ¡Ven ahora!— Ordenó.

El alfa murmuró un par de cosas que no entendieron los omegas y el mayor se dispuso a correr, el chico que lo había señalado comenzó a seguirlo y se detuvo dónde se encontraba el omega lastimado.

— ¿Él te a tocado?— El chico recién llegado preguntó con un tono molesto.

— ¿Qué?— Murmuró JungKook confundido al darse cuenta que él extraño le hablaba a su amigo.— Solo iba caminando rápido y chocó con él, terminó en el suelo ¿Verdad, Jiminnie?

— ¿Estás bien?— Volteó a ver al chico de mejillas regordetas y el menor sólo asintió.— Ese estúpido alfa es un brusco.— Habló indignado.— Pero éste omega le dará una lección de modales.— Se señaló a sí mismo y se despidió de la mano para ir con el chico que se fué.

JungKook siguió su camino, aún faltaban pocos minutos para entrar a clases y no quería llegar tarde, le dió un golpecito a JiMin en su brazo antes de avanzar en señal de lo siguiera. JiMin por su parte estaba distraído por el fuerte aroma a café que había en el lugar, lo conocía bastante bien, cerró sus ojos y se puso de puntitas, el único estiramiento antes de entrar a clases, su altura no cambiaba nada y siempre le habían llamado "piojo" en la escuela de danza a causa de eso.

Caminó con pereza y sonrió, bajó su vista al saber que su Hyung favorito estaba a unos metros de él, sus mejillas tomaron un color rosita y sus manos temblaron. JungKook había entrado a su aula, dejando a JiMin en el olvido. Un gruñido asustó al menor y cuando menos se lo esperó, el alfa ya estaba acorralandolo entre unos casilleros. YoonGi puso una de sus manos en la puerta de metal y la otra la pasó por la cintura del menor, el suéter grande que llevaba JiMin se amoldó a su cintura, acto que le fascinó al alfa.

El mayor acercó su rostro al menor, muy cercas pero no para hacer que sus narices se rozaran, el alfa sonrió de lado y bajó su rostro hasta el cuello del menor, el menor de los nervios puso sus manos dentro de la bolsa que tenía su suéter amarillo pero eso no fué por mucho tiempo, sintió la necesidad de querer sujetarse de algo, su respiración se cortaba a medida de que el alfa se acercaba más a su cuello. Sus manos se acercaron a la chaqueta de cuero que llevaba el pelinegro, apretó sus manitos en la tela y cerró sus ojos con fuerza.

Los ruidos del pasillo no eran algo importante, dejaron de escucharlos cuando el alfa comenzó a pasar su naríz por el cuello del menor, su alfa aruñaba y gruñía cuando el chico estaba con otro alfa. YoonGi tenía la necesidad de marcarlo con su aroma, en señal de que era subeta, pues no tenía ni una idea de que el rubio era omega.

El alfa separó sus labios y dejó un beso tras otro en el cuello del menor, sus dientes inconscientemente salieron, dejando en cada beso un pequeño rasguño. Un jadeo de JiMin hizó que el alfa se alejará un poco de esa zona, el alfa al sentir un poco del sabor metálico comenzó a lamer el cuello de JiMin.

No tenía las palabras exactas para describir el alfa lo que había sentido cuando su compañero de aula había tocado el trasero grande del chico, simplemente el siguió sus instintos y ahora estaba allí. Sus lamidas acabaron, pero comenzó con sus pequeñas caricias en la cintura del menor. Ambos seguían con sus cuerpos juntos, las clases no les importaba por el momento. El omega soltó un chillido al sentir una mano intrusa por su piel sencible de su vientre.

El mayor se alejó del menor y sus vistas se cruzaron al estar tan juntos, sus respiraciones está vez si se mezclaban un poco, el omega se sintió desfallecer cuando el fuerte aroma del alfa lo envolvía. Las altas feromonas del omega hicieron que su neutralizador se terminará rápidamente.

Ahora no había nadie más en ese pasillo ni en ninguno otro, solo ellos dos disfrutando de la presencia del otro. El alfa al sentir el aroma a algodón de azúcar con fresas cerró sus ojos concentrándose en robar todo de ese delicado aroma, su alfa estaba demasiado feliz.

— Hyung...— La dulce voz de JiMin hizó que YoonGi abriera sus ojos.

Los ojos oscuros del mayor trataban de encontrar alguna imperfección en los ojos avellana del omega, sin embargo, falló, no encontró ninguna. El alfa se acercó un poco más al rostro del omega, acariciando su nariz con la contraría, haciendo que esa muestra de afecto le afectará a JiMin en cierta forma, ahora no quería alejarse. El alfa alzó su rostro y besó la nariz pequeña del omega, ocasionando que sus ojos se cerrarán.

« Beso, beso, beso...»— La mente alterada de JiMin no dejaba de pensar en eso.

YoonGi besó con delicadeza uno de los grandes mofletes rosados de JiMin, el chico más bajo apretó más fuerte la chaqueta del mayor al sentir un horrible dolor.

Tenía que ser una broma, una estúpida broma.

El pálido al sentir como el aroma del omega se intensificaba besó el otro moflete rosado, haciendo que JiMin soltará una risita. La mochila del menor evitaba que su cuerpo se pegara demasiado en la puerta de metal, haciendo que su cuerpo estuviera un poco encorvado, comenzaba a cansarse y en mayor lo notó.

Pasó su otra mano por la cintura del menor y lo enderezó, a JiMin le temblaban las piernas por los pequeños mimos que le daba su alfa, se sentía en la gloria.

»— Hyung... creo que es hora de volver a clases.— Murmuró en tono bajo el omega, el dolor en su vientre era insoportable y tener al alfa ahí, frente suyo, solo hacia que sintiera ese impulso de acercarse a su cuello y no alejarse jamás.

— Por unos días no habrá clases para tí, pequeño.— Comentó con una voz ronca y profunda el mayor, ocasionando que JiMin se pusiera más nervioso al saber que YoonGi le habla a él.

— Pero...— Habló bajito el menor.

— Nada de peros.— Interrumpió el mayor.—Mi Omegaestá en celo, no regresará a clases, no estos días.

— Hyung...— Reprochó el menor.

Iba continuar hablando pero los labios de YoonGi sobre los suyos lo hicieron callar. Sus ojitos estaban abiertos, haciendo que se sintiera estúpido al ver con vergüenza al mayor que los tenía cerrados. Cerró sus ojos y sintió como los labios de YoonGi besaban su labio superior, haciendo presión y lamiendolo con extrema delicadeza.

El alfa separó sus labios al sentir su falta de aire, pegando ya frentes y respirando un poco del aliento del omega. El alfa dió pequeños besitos esquimales sobre los labios del menor, él cuál, tenía sus ojitos cerrados solo disfrutando de ello.

— JiMin.— El omega sintió su corazón acelerarse más al escuchar su nombre por parte de la persona que le gustaba,su alfa.

— Hyung...— Abrió sus ojos y observó al alfa.— Fué mi primer beso.— Murmuró más bajito que anteriormente el menor.

— Nuestro primer besocachorro.— Aclaró.— También fué el mío.— Confesó un poco avergonzado.— Ahora vamos, te llevaré a casa.— Tomó la mano del menor y tiró de él para llevarlo al auto.

JiMin se encontraba un poco en shock, la persona que le gustaba le había reclamado comosu omega, también le había robadoun besoy mencionó que era tambiénel suyo.

Sus dolores comenzaron a ser más fuertes, haciendo que se doblará un poco hacia adelante cuando iban bajando las escaleras. Hizo mucha presión en la mano del alfa y se aferró al barandal.

El celo se sentía como si fuera el mismísimo infierno.

— Hyung.— Gimió JiMin por todo su dolor.

El alfa no sabía bien que hacer, pero su mente y cuerpo reaccionaron rápido al levantar el pequeño cuerpo del omega estilo nupcial. El omega se acercó al cuello del mayor sintiéndose seguro, pero tenía miedo y mucho dolor.

— Tranquilo bebé, tu alfa aliviará tu dolor, no temas.— Susurró para darle confianza al omega y avanzar lento.

Ahora YoonGi caminaba al auto con su pareja en sus brazos, su omega, su futuro esposo, el futuro padre de sus cachorros.

Sabía que JiMin era suyo desde la primera vez que se habían conocido, desde la primera vez que lo vió a lo lejos en aquella calle, desde la primera vez que había ido su casa por un proyecto escolar que tenía con su hermano...

Era suyo desde antes de que él lo supiera.