La historia de una violación Seguir historia

Era un día soleado, pero con ligeras nubes como si predijera una tormenta temprana. Cindy, una chica de 19 años, estaba saliendo de sus clases y caminaba a casa como de costumbre. La calle estaba sola y no había absolutamente nadie. Cindy pensó que eso era muy normal, cuando de repente alguien la tomó por detrás poniendo un trapo mojado en su cara. Cindy forcejeó lo más que pudo, pero esos brazos fuertes no la dejaban ir, todo esto mientras cindy perdía el conocimiento. Después de unos minutos la chica cayó dormida por el efecto del trapo.

Momento del juego

Cuando Cindy despertó, se encontró a oscuras con los brazos amarrados por una soga, sus piernas también estaban sujetadas con sogas también, pero las tenía separadas. Su boca estaba amordazada con un pañuelo, podía hablar, peromuy poco. Cindy estaba totalmente exausta por el forcejeo ante, lo que ella pensó, un secuestro para pedir rescate. Cindy lloró, levemente en que estaría muerta.

*** puerta se abre ***

Cindy guarda silencio mientrss escucha como una puerta detrás suyo se abre. Se enciende la luz, y Cindy puede ver a su alrededor un colchón tirado con una maleta encima. Ella piensa rápidamente en cuchillos y pistolas.

. - Vaya... Hola, Cindy. - decía un tipo mientras se acercaba a la chica.

. - Espera - pensó la joven - esa voz es de mi vecino, Bob.

. - Hola, niña. Me diste pelea, pero gracias al cloroformo dormiste y pude traerte aquí.

La chica pensó en ese momento que el tipo estaba por extorsionar a su familia.

. - ¿Bob? ¿Qué quieres? ¿Dinero? Tengo ahorros. Déjame ir y te daré el dinero - dijo la chica com dificultad por el pañuelo.

. - jaja ¿Dinero? ¿Es lo que piensas que quiero? - dijo el hombre mientras se acercaba al colchón y abría la maleta. No, niña, no te confundas.

Bob abrió la maleta delante de ella sacando varios juguetes sexuales vibradores, consoladores, aceites y demás.

.- Yo no quiero tu puto dinero. Yo lo que quiero es tu culo en mi verga. Quiero romperte y abrirte hasta hacer que te vengas y me pidas más leche. Quiero que me ordeñes mientras te nalgueo... Eso es lo que quiero, niña.

Cindy estaba asustada, muy asustada, pero sentía un ligero cosquilleo en su entrepierna. Esa sensación la molestó un poco.

De pronto, con rapidez y fuerza, se levanta Bob del colchón, haciendo la maleta a un lado, se dirige a Cindy y le agarra la boca bruscamente con sus manos.

. - Cindy, di que eres mi puta. Dilo.

Cindy se reusa a hacerlo.

. - Vamos, Cindy. Di que eres mi puta, que eres mi perra y que quieres mi verga en tu boca.

Cindy estaba muy exausta, pero no quiera decir eso, ella no solía decir groserías.

. - ¿ah, sí? No quieres aceptar lo que eres.

Bob lá cachetea levemente, y baja su mano para desabrochar el pantalón de Cindy. Después, Bob escupe su mano mete su mando pasando el pantalón y el calzón de Cindy para tocar su vagina.

Cindy comenzó a sentir como Bob comenzó a jugar con su clitóris levemente. Cindy perdía el control, perdía las fuerzas, no podía hacer nada ante la mano raspoza de Bob. Cindy hacia todo por impedir lanzar ruidos extraños.

. - Sé que te gusta, maldita zorra. Sé que te encanta que te manosee, sé que te gusta que mueva mis dedos así en tu huequito lindo y con poco pelo.

Cindy perdía el control poco a poco. De repente, Bob le mete dos dedos a Cindy, los metió de repente en su vagina. Cindy lanza un gemido fuerte.

. - Vamos, Cindy. Di que eres mi puta - decía Bob mientras metia y sacaba sus dos dedos.

. - Soy tu puta, yo soy tu maldita zorra - dijo Cindy con los ojos totalmente en blanco.

. - veo que te gusta, perra.

Bob saca su mano y de su parte posterior saca una navaja y con ella le rompe el pantalón y el calzón a Cindy.

. - Me exita tanto que digas que eres mi puta, maldita zorra.

Bob le rompe el pantalón a Cindy, se saca el pene y se lo mete a Cindy rápidamente.

. - ay, Cindy. Pensé que no querías mi verga, pero me aprietas tan bien.

Bob comienza a penetra a Cindy lentamente... Pero después comienza a hacerlo más y más rápido, haciendo que Cindy grite con el pañuelo en la boca. Bob no paraba, movía su cadera tan fuerte que los pies Cindy terminaron desamarrados. Cindy estaba exausta por el forcejeo, pero le encantaba lo brusco que estaba siendo Bob.

.- Cindy, tu coño me desea, yo lo deseo. Estás súper rica. Me aprietas tan bien. Ay, Cindy, te amo, te amo. Eres mi puta.

Bob seguía penetrando a Cindy con mucha fuerza. En ese momento Bob alzó las piernas de Cindy y las puso en sus hombres. Cindy sentía dolor por el movimiento, pero perdía la cordura con cada embestida que Bob hacía.

. - Cindy, estás rica, mi amor. Toma mi verga, tómala, Cindy.

En eso, Bob se quitó por completo el pantalón, y desató de las manos a Cindy quien, con las piernas temblorosas, cayó al suelo sentada.

Bob la cargó y la puso de inmediato en el colchón.

. - Cindy, mámame la verga, Cindy.

Cindy la vio cerca de su cara y pensó "me quiero comer esa verga gorda, negra y venuda verga". Así que, sin pensarlo, se la llevó a la boca para comenzar con un oral.

. - ay, Cindy. Qué buena mamada das. Así succiona, chupa, mi amor. Quiero que me dejes totalmente seco.

Mientras Cindy hacía el oral, Bob se escupió la mano y comenzó a manosear a Cindy en su vagina.

. - ¿te gusta, mi amor? ¿Te gusta? - decía Bob mientras bruscamente le jugaba el clitóris a Cindy.

. Sí, que rica verga tienes. Está gruesa y venuda. Casi no me entra en la boca - decía Cindy mientras continuaba chupando.

En ese momento, Bob comenzó a embestir la boca de Cindy más y más duro hasta que Bob se vino en su boca.

. - Ay, Cindy, toma toda mi leche. Es para ti. Trágala toda, Cindy - decía Bob mientras se venía.

Cindy se tomó hasta la más última gota. La chica pensó que se había terminado y sintió un poco de desilusión, pero con s cuerpo quería demostrar que deseaba irse.

. - Cindy, eres buena.

Bob, de repente, volteo a Cindy, quien toda cansada, no hice ni el más mínimo esfuerzo.

. - Cindy, mi amor, dame el culo.

La chica al escuchar eso forsejeó, pero Bob era muy fuerte y ella estaba muy cansada.

. - Mira, Cindy. Se me volvió a parar la verga. Qué suerte tienes.

Bob de un salto, se puso sobre Cindy, se escupió la mano y le metió un dedo muy brusco al ano de Cindy.

. - ay, mi culo no... Por favor, por el culo no - gritó la chica.

Bob comenzó a mover su dedo expandiendo poco a poco el ano de Cindy, todo esto mientras de la maleta sacaba un aceite que comenzó a echar en toda la parte posterior de Cindy.

. - Bien, pongamos aceite para que te resbale mi verga en tu culo hermoso. Cindy, estás muy culona, así que mi venuda verga se va a dar un festín rompiéndote - decía Bob mientras untaba el aceite.

. - No, Bob, no lo hagas, por favor - decía Cindy llorando.

Bob terminó de untar el aceite, y de la maleta sacó un dildo con vibrado. En ese, Bob se recostó sobre Cindy, y acercó su cabeza a su oido.

*** muestra el dildo ***

. - Cindy, mira esto. Te voy a meter esto tan duro que vas a brincar al cielo y caer de nuevo.

Mientras Bob decía eso, penetra a Cindy en el ano muy brusco, tanto así que la chica dio un grito desgarrador.

. - Cindy, perdón por no avisarte, pero el grito que diste hizo que me verga creciera más y me apretás te sabroso.

La chica gritaba de dolor, pero, poco a poco, esos gritos se fueron convirtiendo en gemidos. A Cindy le estaba gustando la rudeza con la que era violada. Mientras Bob seguía moviéndose sobre Cindy, penetrándola cada vez más.

Cindy estaba perdiendo la cordura, la exitación fue tanta que tuvo su primer orgasmo.

. - ¿te viniste? Jaja hay que celebrarlo con más cabezazos - dijo Bob mientras aumentaba la velocidad en sus embestidas.

Cindy temblaba completamente por s orgasmos y las embestidas que no cesaban. Cindy estaba teniendo la mejor experiencia sexual de su vida mientra era humillada.

. - Vente en mi culo, quiero sentir tu leche espesa en mi culo. Vamos, cabrón. Dame más duro maldito, rómpeme el culo... Aaaaah - decía Cindy mientras tomaba las manos fuertes de Bob, las cuales estaban apoyadas al colchón.

. - ¿así, perra? Te voy a llenar de leche.

Bob se vino en el ano de Cindy.

. - Rica, sabrosa y espesa leche. Puedo sentir como llena mi culo - dijo Cindy

Cindy no terminaba de decir esa cuando fue volteada, y Bob le metió un vibrador de bolita por el ano.

. - Mi amor, Cindy, vamos por la última.

Bob comenzó a meterle su pene aún duro por la vagina, mientras con la mano controlaba un control de volúmenes. Cindy estaba en extasis total. Sentía como el pene de Bob penetrava su vagina, mientras su culo vibraba... Todo era placer.

. - Maldito perro, dame esa verga, dame esa maldita, rica, venuda y gruesa verga... La necesito - decía Cindy con las manos tomando el colchón.

En momento, Bob tiró el control, y comenzó a ahorcar a Cindy. La chica no podía respirar, pero eso le daba aún más placer.

. - eres mi puta... Mi maldita puta, mi cerda. Que rico me aprietas. Tu concha está deliciosa. La voy a dejar guanga, mi amor.

Cindy comenzó a escupir a Bob. Bob se. Exitaba más y comenzó a cachetear a Cindy, la cual con cada cachetada su placer aumentaba.

.- Soy tu puta, maldito bastardo. Rómpeme lá pucha, rómpeme el culo, mátame de placer... Esa verga me encanta... Qué pito más rico. Soy tu saco de semen, lléname, papi.

Bob no aguantó más y se vino en la vagina de Cindy, mientras la chica venía también y tenía otro orgasmo más.

Bob quedó exausto, mientras Cindy tenía semen por todos lados y el vibrador aún seguía funcionando en el ano de Cindy.

. - estuviste fanática, mi puta.

Cindy quedó exausta de tanto placer. Jamás pensó que él ser violada fuera a ser la experiencia más deliciosa y dulce de su vida.

Desde ese día, Cindy regresa con mucha frecuencia a aquel lugar donde su violador la penetró por primera vez. Cindy aceptó ser el saco de semen personal de Bob, y Bob la ve como su puta favorita.