sweetmegan Megan Ferreira

¡Oh! Nunca pensé que fuese tan excitante acostarme con el amigo de papi, aunque... Eso puede traer ciertos problemas. Pero no hay nada que un poco de sexo no solucione... O eso dice Charlotte.


#24 en Erótico Sólo para mayores de 18. © Copyright Megan Ferreira 2021-2022© Todos los derechos reservados.

#Erotismo #drama #contenidoexplicito #papi #celos
145
30.0mil VISITAS
En progreso - Nuevo capítulo Cada 30 días
tiempo de lectura
AA Compartir

Descubriendo a Charlotte.

—Ay sólo es Steve, no pasa nada con él. — digo hablando por teléfono con Jenny, una amiga.

—Definitivamente no sabes mentir, al menos no cuando estás enamorada. Ví cómo se miraban, yo sé que te gusta, es demasiado obvio. — dice Jenny.

—Ay ya cállate Jenny eso no es cierto, ¿Cómo crees que Steve y yo tengamos algo? Es demasiado feo para mí. Estás loca definitivamente —digo riendo.

—Bueno está bien, si tú lo dices.

Escucho a mi padre llegar a mi habitación y tan rápido como puedo ordeno todo.

—Oye Jenn tengo que cortar, papá viene, mañana hablamos.

—Sí claro mañana hablamos, ven a la escuela con una ropa sexy para Steve.

—Aish que ocurrencias tienes, bueno adiós.

—Más vale que vengas mañana a la escuela.

Se corta la llamada y entre que estaba diciendo esas palabras y ordenando ya me tiro a la cama y me hago la dormida.

—Oye, Charlotte ábreme — Su padre toca toca la puerta.

No le contesto intentando hacerle creer que estoy dormida

—Vamos si no abres la puerta tú, lo haré yo cariño.

No abro la puerta y me quedo así con los ojos cerrados.

—Bien no digas que no te lo advertí —abre la puerta y me encuentra en la cama "dormida" —Oye Char, sé qué no estás dormida, vamos arriba.

No muevo un solo músculo y es la mejor actuación en toda mi vida.

—Bien, supongo que si realmente estás tan dormida no te molestará que vaya a comer pizza sin ti.

—¡No! Está bien, sí estoy despierta —digo riendo.

—Oye te escuché hablando por teléfono ¿Quién demonios es ese tal Steve? —dice acomodándose para sentarse en la cama.

—¿Escuchas mis llamadas? —pongo una cara de disgusto.

—No respondas una pregunta con otra Charlotte. Responde, vamos.

—Ay ya papá no es nadie, es sólo un idiota del colegio, no pasa nada con él.

—¿Segura?

—¡Sí! Estoy muy segura.

—Sabes esa mirada tenía tu madre cuando estaba enamorada de mí.

—¿De qué mirada hablas? Bueno ¿Sabes qué? Déjalo así, además imaginarme eso me dieron náuseas.

Se queda callado por unos minutos en la cama sentado, observándome.

—¿Qué me ves?

—Eres... eres idéntica a ella, igual de hermosa cómo cuando la conocí. Tú mi amor, eres el regalo que ella me dejó antes de que se marchara.

—Oye no, ya sabes que no me gusta hablar de eso —digo con lágrimas en los ojos.

—Ven aquí cariño —Lo dice abriendo sus brazos para que me acurruque en ellos.

Voy hacia él para abrazarlo sentada en su regazo.

—Escúchame Charlotte, yo sé que estoy a años luz de ser un buen padre pero tú sabes que te amo con todo mi corazón y eres lo más importante que tengo por encima de cualquier cosa, ¿lo sabes no? —Dice tomándome de la cara hablándome con lágrimas en los ojos.

—Papá... Tú sabes que te amo muchísimo, a pesar de que apestas horrible —digo riendo y secándome las las lágrimas.

—¿Ah sí? —me tumba en la cama y me da cosquillas y me da un ataque de risa.

—Ayy ya basta está bien quiero respirar y me da calor —digo riendo de forma descontrolada.

—Está bien cielo, la cena está ahí abajo, baja enseguida. Yo iré a ver televisión en la sala.

—Sí papá ya bajo enseguida.

Se va y me quedo sola en mi habitación pensando muchas cosas.

—Supongo que ser la niña mimada de un padre no muy bueno pero muy cool no está tan mal, ser la loca del grupo de amigas, la creída del salón, etc. Me pregunto qué pensara mi mamá de mí, de cómo soy. Bueno esa pregunta me la hice una infinidad de veces así que solamente vivo mi vida para ser feliz, como toda madre hubiera querido que su hija sea feliz.

Mi vida no es perfecta pero la siento así, es un vaivén y siento que se vienen muchas cosas locas y todas ellas son como una droga que me deja dopada en mis pensamientos por horas y horas hasta perder la noción de todo...

—Charlotte baja ya a cenar ¡Tienes que dormir temprano porque mañana tienes escuela! —exclama mi padre desde el comedor.

—Síii ya voy papá —grito desde mi habitación para que pueda escuchar.

Bajo para cenar, ceno todo luego de una cena entre padre e hija, risas y demás cosas y luego voy a la cama.

—Demonios mañana debo ir a la escuela —digo pensando en las cosas que tengo por hacer y entre tanto pensar y pensar al fin me quedo dormida.

27 de Julio de 2021 a las 19:33 3 Reporte Insertar Seguir historia
12
Leer el siguiente capítulo Dónde todo comenzó.

Comenta algo

Publica!
No hay comentarios aún. ¡Conviértete en el primero en decir algo!
~

¿Estás disfrutando la lectura?

¡Hey! Todavía hay 10 otros capítulos en esta historia.
Para seguir leyendo, por favor regístrate o inicia sesión. ¡Gratis!

Ingresa con Facebook Ingresa con Twitter

o usa la forma tradicional de iniciar sesión