iru-emi Lady Tsuki

Me pierdo en su mirar, en su piel morena, el sabor de sus labios, en su lengua raspando la mía; sus dedos traspasando mis costillas. — Eres exquisito, SeokJin — Terminado: 2 de Noviembre del 2016 Los personajes no me pertenecen pero la historia si. Registrada en SafeCretive


Fanfiction Bandas/Cantantes Sólo para mayores de 18.

#bts #kpop #jin #rm #seokjin #namjoon #army #namjin
Cuento corto
40
3.1mil VISITAS
Completado
tiempo de lectura
AA Compartir

XQ

Gente yendo de un lado para otro vistiendo disfraces extravagantes desde lo más colorido a lo mas oscuro, de lo más escalofriante a lo más ridículamente tierno o simplemente ridículo.


La calle se volvió mas estrecha conforme avanzaba debido a los puestos en ambos lados de la calle.


Nunca fui aficionado a las festividades, no me emociona el vestir de algún personaje de película de terror o de películas animadas así que simplemente hubiera pasado de largo evadiendo a todo "monstruo" o "princesa" (no entiendo porque se visten de Blancanieves, al menos le hubieran puesto un hacha en la cabeza o un lápiz en el ojo, pero bueno tampoco es que importe mucho) sin embargo el tumulto de personas me impedían el paso y sin ánimo de pedir permiso (empujarlos) decidí ver cada puesto.


Algunos vendían calaveras de dulce, disfraces, velas, frutas, flores de cempasúchil (flores de color naranja, amarillas o de ambos colores) cuyo olor causo cierto picor a mis fosas nasales, puestos de pan tradicional a la fecha, ahí no me detuve o rompería mi dieta y no, eso si sería terror puro.


Murmullos llamaron mi atención y observe a todos mirar un punto en especifico, una chica bailaba a mitad del pasaje, vestía un largo kimono de tonos morados, lilas, rosas y azules, el escote era algo provocador sin llegar a lo vulgar, su rostro blanco pálido enmarcado por unas cejas finas y oscuras, ojos grandes delineados de negro le hacían ver felina e intrigante; con hermosos labios carmín. Su danza era delirante cautivando a todo mundo.


Un escalofrío recorrió mi espina dorsal cuando un hombre en traje blanco apareció a su lado, parecía resplandecer, su tez morena brillaba bajo la tuene luz amarilla, su porte era impotente y atrayente a la vez, tomo la mano de la "geisha" sumándose a la danza haciéndola más hermosa.


No me di cuenta en que momento la gente comenzó a aplaudir pues me había perdido en el cautivante hombre, en sus ojos carmín y labios seductores.


Contuve el aliento cuando nuestras miradas se encontraron y olvide como respirar cuando el se acercó a mi, ahí fue cuando me percate de su altura y torneado cuerpo, pronto deseé esos macizos brazos me envolvieran y no me soltaran nunca.


Mis piernas flaquearon y mis latidos aceleraron cuando escuche su grave voz y sus labios curvearon en una seductora sonrisa. Alude su magnifica presentación y la de su acompañante quien después de mirarme, hace una reverencia y susurrar algo en su oído se retiro. No pude dejar de mirar su porte elegante y misterioso; sin duda era hermosa.


Él, tomo mi mano y delineo mis dedos con sus frías manos. Me condujo entre la multitud que parecía cederle el paso (pues cuando iba yo solo no podía dar ni tres pasos).


Una fuerte punzada en mi entrada me saco del trance en el que caí.


¿Cuándo llegamos a este oscuro callejón?


¿Cómo es que terminé entre su cuerpo y la pared?


¿En qué momento fui despojado de mis ropas?


No lo se, lo único que se o mas bien lo único que puedo sentir son sus manos frías sobre mi pecho acariciando mis pezones (erectos por los vientos de noviembre) su enorme y húmedo glande abriéndose paso en mis paredes saca un gemido a mis cuerdas bucales.


Arremete contra mi cuerpo una y otra vez, sus testículos contra mis nalgas y estas golpeando la pared forman el sonido más grotesco y excitante que e escuchado.


Su lengua juega dentro de mi canal auditivo, muerde el lóbulo y yo rodeo su cintura con mis piernas en busca de más, quiero sentir su frío cuerpo con el mío que parece hervir.


Posa sus manos en mis muslos, acaricia descendiendo hasta mis pantorrillas las cuales aprieta con fuerza y separa mis piernas de golpe, él acalla mis gritos con su boca pero las lágrimas brotan empapando mis mejillas, su pene toca mi próstata y siento morir, el placer y el dolor de mi ingle rota son éxtasis.


Siento líquido resbalar entre mis piernas pero él no se a corrido así que debería asustarme por lo que esa humedad significa pero, no me importa, solo me pierdo en su mirar, en su piel morena, el sabor de sus labios, en su lengua raspando la mía; sus dedos traspasando mis costillas.


— Eres exquisito, Seokjin —


Su voz gutural llega hasta mi miembro que tiembla expectante de ser atendido, estoy a punto de acariciarme pero él me detiene con un gruñido, sus enormes manos acarician mi falo, juega con mi glande apretando e introduciendo su uña en la uretra, duele y duele aún mas cuando aprieta mis testículos pero no le detengo, sus ojos escarlata me dicen "no lo hagas o todo termina", sería estúpido terminar con las sensaciones que invaden mi cuerpo, con el delirante placer que es tener al hombre dentro destrozando mis paredes, cada órgano; cada extremidad.


El ardor de mi espalda provocado por la fricción de este contra la pared no se compara al ardor de mis tetillas rasgadas entres sus dientes ahora rojos como sus ojos, como la sangre en mis costados, como el liquido entre mis piernas...


Una estocada más le lleva al orgasmo y consigo trae el mío, hebras de semen salen de mi pene manchando su camisa.


Unimos nuestros labios en un beso lento y cálido, transmitiendo el sentimiento más puro.


Sus ojos brillantes me observan y esboza una sonrisa.


Ambos permanecemos sentados uno al lado del otro, observando la luna llena con nuestras manos entrelazadas. El cantico de Dulce o Truco se escucha a lo lejos.



Nunca fui aficionado a las festividades, no me emocionaba el vestir de algún personaje de película de terror o de películas animadas y odiaba lidiar con la multitud que impedía mi paso, pero gracias a ello conocí al hombre de tez morena e hice el amor por primera vez y, aunque ahora no siento nada, aunque no siento mis piernas y mi cuerpo se ha vuelto carmín... por primera vez en mis veintidós años me sentí amado.


- Exquisito -


19 de Octubre de 2020 a las 23:38 0 Reporte Insertar Seguir historia
14
Fin

Conoce al autor

Lady Tsuki Escritora de fanfic novata, me hackearon en otra app, así que busco nuevo inicio. Espero escribir pronto una historia larga con personajes propios.

Comenta algo

Publica!
No hay comentarios aún. ¡Conviértete en el primero en decir algo!
~

Historias relacionadas