J
José Juarez


Tomas es un joven taciturno y solitario. Todos los días observa a sus vecinos a escondidas con su videocámara, en especial una chica llamada Sofía. Sin embargo, un día, cambiará.


Suspenso/Misterio No para niños menores de 13.

#amor #introvertido #adultez #Postmodernidad #tiempo #soledad
0
2.3mil VISITAS
Completado
tiempo de lectura
AA Compartir

Tim

Está allí. Habla con los girasoles. Creo que les está dando consejos. Es un poco gracioso, ayer discutía con ellos... ¿Por beber más agua de la manguera de lo debido? Se mueve. Ahora se digirije hacia los arbustos. Parece que aun no se llevan bien. No se hasta cuanto tiempo seguirá en lo mismo. Creo que tiene más de dos años que no les habla. Ni si quiera quiere podarlos. ¿Porqué será Tim?
Por lo menos la Sra. Gladys hoy se encuentra animada. La semana pasada no salía con tanta regularidad a hablar con sus amigos. ¿Ya le hacían falta verdad, Tim? Seguro que sí.
Ahora acaricia más seguido a los girasoles. Es bastante interesante.
Tendré que dejar de grabar. La memoria se me está llenando. Todavía me hace falta mi Sof@x. Por lo visto hoy es miércoles. Por lo que dentro de poco va a salir de casa al parque, a contemplar el árbol. Entonces, te dejo preparado te daré tu desayuno. ¿Te gustá, verdad? Es bastante nueva la marca, pero no encontré más nada en la tienda.


***


No ha pasado mucho. Me he sentado en el sitio de siempre (detrás de la cerca) y he comenzado a grabarle a sus espaldas. Me intriga demasiado lo que siempre suele hacer en ese parque. Siempre se sienta en el banco, en la parte izquierda. Mira por una media hora, creo yo, el árbol. No le veo nada interesante, no es tan interesante como el árbol de la vecina que yo observaba. Éste es algo más grande, y se encuentra cerca de los columpios.


Ésta vez llevó un cuaderno de dibujos bastante usado (parece ser que es dibujante), y comenzó a dibujar el árbol. Pude hacer "zoom" con la cámara, y me percaté que lo dibujo de una manera ondulada, con muchas curvas y lo pintaba con colores cálidos. La textura del árbol le agrego un matiz dorado. Tenía largas sombras, porque lo dibujó durante la puesta del sol. Demoró más de lo normal, le puso mucho empeño al dibujo. ¿Qué crees que se trate, Tim? No tengo ni idea. El dibujo me parece un poco triste. Aunque ya sabes que las puestas del sol siempre me parecen algo triste. Porque pareciera que los haces de luz del sol fueran como recuerdos olvidados. Ese tono anaranjado pálido, de un sol que que es tragado por la tierra. Si, lo sé Tim. A veces me paso un poco. No me tienes que mirar así. Con tus hinchados y redondos mirándome a través del cristal de la pecera.


***


Tim. Hoy terminé de ver "El Stand de Besos". Verla me hace recordar la escuela. No es que fuera como el Noah ese (de verdad no lo soy, me rio con solo pensarlo). Pero ver la película me recordó las fiestas que se solían hacer. Creo que no sabes, pero no asistí a ninguna. Sí, es raro. Pero no me llamó la atención, ni las necesitaba. Era mejor quedarse seguro en este cuarto debajo de un libro.


Supe de las fiestas porque seguía a mis compañeros en Instagram. Tu sabes, subían de todo. Borrachera, perreo, meneo sucio. En el Stand de Besos hay una escena en donde Joey se mete en problema por tomar mucho en una fiesta. Casi se desnuda y se arroja a una piscina con todos los compañeros de la escuela. Noah Flynn le rescata. En mi vida nunca me imaginaria estar en una situación así. Hablo desde el punto de vista de Noah. Imagínate llevarte en tus brazos a Joey. Blanca, pequeña, con ojos adorables. Luego la subes a tu motocicleta y te la llevas a tu cama (sin hacer nada indebido), le cambias la ropa... Me daría demasiada pena, me quedaría congelado si tuviera que hacer todo eso. Tampoco tengo una motocicleta, el auto que me dejó mi viejo apenas puede arrancar. Ni tengo el look de un Noah Flyn.
Pensando en estas cosas absurdas, me deja pensando en Sofi@x. Mi imaginación me hizo pensar por un momento como sería pasar algo similar con ella. Tampoco es que sea tan distinta a Joey (en lo físico, y lo adorable). Pero sabes, ni siquiera la conozco. Aun así mi mente colorea aquellos vacíos con los colores de la fantasía. No creo que Noah no le haya quitado un beso (chiquitito) mientras ella dormía, te aseguró que no pudo soportar la tentación (no malinterpretes, no menciono nada de aprovecharse).
En fin, tuve que frenar en seco la burbuja que se había formado en mi cabeza. Pero, te digo. De que vale imaginarse todas aquellas situaciones salvajes, si la persona interesada ni tan siquiera conoce tu cara (y mejor que sea así). Prefiero que todo quedé con la distancia, porque se que en cualquier momento que hable con la persona, todo este monumento imaginario que se ha formado en mi cabeza a lo largo de estos años que la he observado durante su vida, puede colapsarse con tan solo unas pocas palabras. Me ha pasado, a todos les ha pasado. Pasa buenas noches Tim.


***

¿Crees que le gusten las flores? No eran las mejores, pero creó que le agradarían. Se parecen bastante a las que dibujó. Falta poco para que salga de casa. Según mi reloj son las 5:30 P.M. Hare lo mismo de siempre. Le dejo las flores, y vuelvo enseguida a esta casa. Ésta saliendo. Ya vuelvo.


Creo que no se ha dado cuenta. Lo digo por la manera como camina hacia su casa. Mira, se detuvo. Haré algo de zoom. Me encanta como se rié. Hasta se enrojeció un poco, Tim. Ahora, mira a todas las direcciones apresuradamente, tratando de adivinar de donde vienen. Siempre lo hace. ¿Las remojará en agua?


***

Hoy ha sido un dia extremadamente aburrido. Está tan pálido y nublado. Ni tan siquiera la señora Gladys ha salido a hablar con sus amigos. Lo único que me emociona es Sofi@x. Por lo que he visto hoy será el día que terminará de dibujar. Ya no le queda mucho por rellenar. Quiero realmente saber de que se trata ese dibujo. Quizás, si me acerco un poco más podría descifrar algo, o percatarme de un detalle. Quizás ha escrito algo por debajo, cerca de los márgenes. Haré un poco de espacio en la videocámara. Lo he llenado con tomas de las nubes, y de las gotas de lluvia que han caído. Acaba de salir de la casa. Ya te cuento como me fue Tim.


Tim. Tim. Tim. Ya te cuento que sucedió. Es como si estuviera en una especie de sueño, algo medio surreal. No se que pensar. Hay unos días que transcurren de lo más normal, pero súbitamente un conjunto de factores y circunstancias hacen que poco a poco se vuelva una especie de pelea entre la realidad y una ficción.


No me mires así. Mira. Lo que sucedió es que sabes que yo quería enterarme el porqué del dibujo. Entonces, me coloqué detrás de la cerca (como suelo hacer), y empecé a hacer zoom. Pero no podía ver mucho de lo que sucedía delante de mis ojos. Escogí un mal lugar. Y su espalda junto a su brazo tapaban el dibujo. Era inútil. Pero la curiosidad venció mi razonamiento. Como si fuera una polilla atraída a una fogata, decidí por acercarme más de lo normal.


Me acerque con pasas lentos. Contuve mi respiración. Y empecé a buscar un ángulo relativamente mejor. Lo estaba consiguiendo, pero la verdad es que el riesgo se incrementaba. Llegue a estar a menos de tres o dos metros diría yo. No iba a pasar más nada. Pero sin que yo supiera. La memoria de la videocámara se había llenado. Sonó el pitido de alerta. Sabes muy bien que a pocos metros ese pitido se escucha como si estuviera a tu lado.


Rápidamente escondí la cámara dentro de los bolsillos de mi jacket. Me miró Tim. Por primera vez pude verla cara a cara. Pude contemplarla con mis ojos, y no a través del cristal de una cámara. Nunca me había percatado de las pecas que tenía en su nariz. Ni la forma cuando gira su cabeza con curiosidad, una leve angulación parecido a una diagonal.


-¿Hola? - me dijó ella.


Tim. No pude soltar ni una palabra. Solo sonreí. Creo que me estaba poniendo más pálido de lo que ya solía ponerme cuando la grababa de cerca. Por poco los dientes me castañeaban. Sentí frio. Di unos cuantos pasos hacía su dirección. Noté como ella empezó a incomodarse. Agarró su cuaderno de pintar y se levanto del banco y dio unos pasos atrás.


-Busco... Busco mis llaves... No las encuentro.


Disimulé como si la palidez que se había apoderado de mi se debía a mi preocupación por las llaves. Empecé a recalcarle la importancia de mis llaves. No la miraba. Me agaché y miraba por todo el suelo buscando mis "llaves". Le explique que hace unas horas había pasado por aquí y que nos las encontraba. Comencé a comentarle mil y un detalles inexistentes sobre mi incesante búsqueda. Fue bueno comentárselo, así mi mente se comenzó a distraer. La palidez me disminuía. No solo eso, a ella también. Sentí una gran paz interior, y hasta me alegré cuando noté que ella también estaba buscando las llaves.


Me alejé de ella. Aproveché que no me miraba y arroje las llaves a un rincón al lado del camino pavimentado que intersecta el parque. Procuré que no ocasionaran un ruido haciéndolas que cayeran sobre la grama. Me fue a la otra esquina del parque a seguir "buscando". De vez en cuando le preguntaba si halló algo. A lo que me negaba. Creo que al fin me sale bien un papel Tim.


Después de un rato ella se acercó al lugar y las "encontró". Al verla otra vez cara a cara me puse contento. Pero no fue solo eso. Tim. Cuando fue a darme las llaves y mis manos rozaron las suyas. Sentí como sus delgados dedos blancos tocaban mi mano. La manera suave y delicada como movía su mano y sus dedos, es inolvidable. La sensación de tacto de mi piel entra la suya, a pesar que fue instaneo, hizo que mi interior explotará como pólvora. Suave. Blanca. Tierna. Fue con esta mano Tim. Aún puedo sentir el aroma de su crema.
Le di las gracias. Sonrió.


Las pierdes otra vez y... veras - se rió.
Sostuve mi llave por un rato sobre la mano. Ella la miró por un rato y creo que se percato de la inscripción.


¿Calle tercera? Casa amarilla, duplex. Vives exactamente al frente mío. Me sentía un poco incomodo. Ahora podía percatarse de lo que hacía.


¿Como? ¿Eres nueva? No. No creo. - se rié.


Empezó por contarme algunos de talles de su casa. Me encantó Tim. Notaba como ganaba más confianza. Se soltó y me conto tantos detalles que ya sabía. Procuraba hacerme el sorprendido. Le encanta hablar, eso sí. Yo simplemente agachaba y subía la cabeza afirmando algunas cosas que me decía. Pasó un rato, pero volví a ponerme un poco nervioso al seguirla viendo. Pensar en ella me pone nervioso.


Oye... Tengo que irme. No pasa nada.... Tomas ¡Tomas!


Le hice una pequeña seña de despedida. Me gire y di unos pasos.


-Si puedes podemos hacer algo otro día.


Tim. No quería ni girarme. Me mordí los labios e intente relajar mi cara. Me giré.


-Creo que puedo. Tengo que ver. -De todos modos.


Me dictó su numero de teléfono. Lo apunté en el mío. Después, agarro las llaves que aun tenía en mis manos (se me habían olvidado guardarlas, ya sabes como estaba Tim), y las guardó en mi bolsillo, riéndose. Volví a despedirme, y me giré suavemente.


Caminé con pasos lentos y ligeros. Contenía la emoción que me agitaba por dentro. Nunca la había sentido así de fuerte, no desde hace mucho tiempo Tim. Así acaba por hoy mi historia Tim. Te puedo asegurar que no se me olvidaré de este día. Ni de sus manos, ni del olor de su crema. Sigo sintiéndola, más fuerte que cuando estuve allí. No creo que pueda dormir hoy Tim. Y, ¿Qué pasará el día que nos reunamos? Eso creo que me hará que me hoy trasnoche moviéndome de un lado a otro sobre la cama. Con los ojos abiertos, en un estado semi-dormido, mientras alucino la película que mi mente proyecta. Pasa buenas noches Tim. No me lo digas a mí. Hoy no dormiré.

18 de Octubre de 2020 a las 01:17 0 Reporte Insertar Seguir historia
0
Leer el siguiente capítulo Viernes

Comenta algo

Publica!
No hay comentarios aún. ¡Conviértete en el primero en decir algo!
~

¿Estás disfrutando la lectura?

¡Hey! Todavía hay 3 otros capítulos en esta historia.
Para seguir leyendo, por favor regístrate o inicia sesión. ¡Gratis!

Ingresa con Facebook Ingresa con Twitter

o usa la forma tradicional de iniciar sesión