—Debemos lanzar al espacio la evidencia histórica de la existencia de este planeta, y si es que existen otras civilizaciones en el universo, la descubrirán. Suponiendo que esto no sea suficiente debido a factores que pudieran impedir que esta evidencia sea descubierta, por ejemplo, que en su trayecto algo se cruzará en su camino y la eliminara, podríamos transmitir, por medio de una pantalla u holograma de un tamaño superior al de la tierra, la historia de este planeta, para que esta luz viaje a través del espacio, y alguna civilización pueda captarla, pues se sabe que, una imagen vale más que mil palabras.
Aplausos en el televisor
—¿Qué opina usted?
—¡Bah! ¡Imágenes a la nada! —Contestó el profesor con evidente fastidio.
Gracias por leer!