A la habitacion entraron esos hombres llevando a Adrian alzado por los brazos Emanuel, el capo mafia, acompañado del hermano del chico, su nuevo amante y el Doctor de la organización miro la cara de Adrian deforme por golpes. No aceptaba ser mascota o mujer de sus hombres.
- Adrian te puedes sentar.
- Prefiero quedarme parado.
Marcial uno de sus guardias lo tomo del cuello.
- Cuando el jefe te diga que te sientes te sientas.
Lo sento. Adrian pego un grito le dolia su cola. Marcial quedo agarrandole el cuello.
- ¿Sabes que es un doncel? – Dijo Emanuel.
- No.
- Adri cuando hables con el jefe dile señor. - Otro guardia le dio un golpe en la cabeza.
- Si.
- Dinos amo ¿Quieres que te pegemos?
- No amo – Grito el muchacho llorando.
Los dos guardias quedaron con las manos en la cabeza de Adrian. Emanuel sonrio estaba siendo bien adiestrado.
- ¿Adrian sabes lo que es un doncel? – Repitio.
- No. No señor no lo se.
Emanuel miro a su nuevo amante preocupado por su hermano. Adrian fue cobarde no lo defendió cuando los secuestro ni a el ni a su hermana. El Doctor le dijo.
- Adrian en la sociedad hay hombres, mujeres, donceles y nekos. Un doncel tiene órganos femeninos dentro por fuera órganos masculinos.
Emanuel vio como sus guardias sujetaba fuerte a Adrian. Les parecía bien compartir su mujer entre ellos pero si aparecia otro hombre se volvían locos de celos.
- Eres doncel como tu hermano. Lo normal en hombres es cincuenta por ciento de testosterona, mujeres veinticinco, donceles veinte y neko diez. Tienes ochenta por cierto. Tendras ataques.
- De algo hay que morir.
Adrian con una voz muy triste dijo.
- No puedes decir eso. - El Doctor intento tocarlo.
- No lo toque es nuestro. - Gruño un guardia.
Emanuel se reia ante los celos de sus hombres.
- Libereme señor – Dijo Adrian llorando.
- Adrian no puedo hacer eso piensa en Alvaro.
- ¿Y cuando se aburra señor?
- No me voy a aburrir de el. – Grito. – Lo amo.
- Alvaro – Lo miro llorando– Dile que me deje ir.
- Que hay que darle para que no se muera. – Un hombre interrumpio.
- Tengo un frasco. Le di otro a Emanuel. Denle una píldora antes de las comidas en un mes tendrá su periodo.
- Porque no me matan y ya – Dijo Adrian – Yo no defendi a mis hermanos por el miedo.
- Tu padre me debía dinero.
Marcial lo levanto del cabello a Adrian y se lo llevo.
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