Después de la gran batalla que sostuvo Harry con sus inseparables amigos Rom y Hermione tras del innombrable Lord Voldemor y su derrota, los compañeros regresan al colegio de Magia y Hechicería Hogwarts no como estudiantes si no como representantes de sus hijos donde les esperaran nuevas aventura pero unos de los mas grades misterio del mundo mágico regresara de mas allá y desatándose de un gran poder pero todo esto lo llegara lograr con la ayuda de Albus Serverus Potter.
Al pasar 13 años después de aquel enfrentamiento con lord-Voldemort. La escuela de magia y hechicería << (Hogwarts)>> había logrado surgido de sus escombros, restituyendo la entrada de alumnos a un nuevo comienzo de clases, agradeciendo en una gran ceremonia a los caídos en la guerra, que lucharon sin dejar torcer sus varitas, sus valentías, y su orgullos de ser magos o hechiceros, protegiendo así con amor a sus familias y su casa-hogar "Hogwarts".
Así Construyendo una enorme lapida de mármol azul cielo, tallando en ella con la misma magia cada unos de los nombres de aquellos profesores, alumnos y criaturas mágicas que dieron sus vidas para un mejor futuro del mundo de los magos y Muggle y para la escuela de magia y hechicería. Donde serán recordados atreves del tiempo.
Personajes como Harry Potter, Hermione Granger, Rom Weasley, Neville Lombotton Y sus amigos fueron pasando de grado logrando convertirse en los hechiceros más queridos y respetados por muchos, Y famosos en sus épocas de la historia de Hogwarts, logrando sus logros y sueños; como Harry que debuto como el mejor buscador de Gryffindor en el juego Quidditch. Hermione con sus destrezas en los hechizos, conjuros y pociones y en sus entendimientos sobre la historia de la magia, se convirtió en la mejor hechicera. Rom mejoro sus hechizos y conjuro gracias a Hermione, y logro ser capitán de Quidditch, cumpliéndose lo que pudo ver en aquel momento en el espejo de "Oesed "donde tomaba y levantaba la copa de Gryffindor y la de Quidditch. Y Neville con su gran conocimiento en la Rama de Herbologia pudo convertirse en profesor de Hogwarts destituyendo a la profesora Sprouts que tomo largas vacaciones pero aun ejercía su asignatura cuando Neville Lombotton salía de Hogwarts para sus viajes de encuentros con maravillas e historia sobre la Herbologia.
Mientras los demás también siguieron sus más anhelados sueños, culminando así en Hogwarts sus estudios como estudiantes pero regresando en generaciones al acompañar a sus hijos a la estación de -King Cross- Y despedirlos a sus primeros cursos a la escuela de magia y hechicería.
Harry uniéndose en matrimonio con su amiga y compañera de estudio Ginny Weasley. Que sentía desde pequeña algo especial por él, trajeron al mundo de los Muggles y al de magia a tres niños: James Sirius Potter, Albus Serverus Potter y a Lily Luna Potter. Dos varones que en sus nombres tenían compuestos los nombres de los magos más importantes para Harry conocidos durante su estancia en Hogwarts. Uno de trece años de edad, delgado, con una piel blanca y cabello negro lizo algo desordenado como lo habituaba tener Harry cuando había cumplido sus trece años. Teniendo así James dos años como estudiante en el colegio de magia y hechicería donde fue elegido en Gryffindor y hermano mayor de Albus que era de una piel blanca parecida a la de la madre con un suave y sutil color salmón, donde sus cachetes se enrojecen al contacto por el frio, ojos de color gris como el del padre que resaltan a plena vista, y un cabello lizo marrón corto casi al estilo hongo, teniendo la edad comprendida de un estudiante de Hogwarts en su primer año. Faltándole a su hermana menor Lily cinco años para juntarse a ellos en el mágico mundo de Hogwarts. Nombre que proviene de su abuela y la amiga de Harry, "Luna Lovegood."
Harry y su esposa Ginny Weasley vivían en la casa que fue de los padres de Potter en el valle de Godric, lugar poblado por Muggles y Magos. Cuya casa fue reconstruida al ser despojada del maleficio que había realizado Voldemort a intentar matar a Harry cuando era un niño pero algo en aquel momento salió mal, el hechizo se realizo pero la maldición al salir de su varita estallo en el aire, volando una gran parte de unas de las esquinas de la habitación donde dormía Potter y hacer huir al personaje que le marco de por vida en la frente una cicatriz con forma de rayo. "Ya conocen la historia"
*** Mi historia comienza aquí… Un día de verano por las calles del valle de Godric la luz del sol irradiaba todo a su paso, nada en el camino se podía escapar de los diminutos rayos de ese gran astro.
Las casas del pueblo de Godric se detallaban a lo lejos distorsionadas por el vapor que surgía del asfalto de las calles solitarias debido al intenso calor. a la hora de la mañana la gente del valle escuchaban en las noticias por la red de climatología que a las horas de la tarde un oleaje de calor azotaría al oeste, donde indicaban que tomaran precauciones al salir de sus hogares, con protector solar y suficiente agua por si llegase ocasionar alguna deshidratación, prohibiendo así las visitas a playas y sugiriendo estar con poca ropa estrecha y gruesa que provocasen acaloramiento si se disponían salir a cumplir sus deberes laborales, pero aclarando y resaltando "la protección al sol"
Mientras otros se resguardaban dentro de sus hogares tomando suficiente líquido o deleitándose en ocasiones con bebidas y helados de varios sabores o disfrutaban en familia el baño de una piscina.
Los magos y hechiceros que habitan en el pueblo de Godric a elevar y hondear sus varitas pronunciaban algunos encantamientos colocando sus hogares en un cálido clima dejando pasar aquel oleaje que perduraría por dos días.
Una joven de estatura media de piel blanca vestía de forma casual con jeans azules holgados y franela roja con su cabello ámbar recogido en forma torbellino sujetado por una varita, Se disponía abrir unas de las puerta de un carro marrón que permanecía estacionado en el porche de su casa, mientras saludaba a una vecina de al frente que regaba el césped de su porche.
Un fino césped totalmente verdoso aceitunado adquiriendo brillo por las minúsculas partículas de agua que quedaban atrapadas en la delga piel, agua que le brindaba vida aquel manto verde, cortado cada semana a las horas de la mañana por un mago famoso que llevaba como cicatriz un rayo en la frente.
¿Sabrán de quien le estoy hablando?
_ ¡Buenos días, Ginny! _dijo agitando la mano _ ¿Regando con esta onda de calor? _preguntó la joven mientras llevaba su mano derecha a la manilla de la puerta del coche, y de pronto un gemido corto se pronuncio en el aire, quitando la joven rápidamente su mano al sentir lo caliente que estaba. Al Pasar unos segundos frotando sus dedos con la palma de la mano, Tanteo de nuevo, tomando apresuradamente la manilla. Y Un clip se oyó al abrirse la puerta del coche.
_ Hola Carlocht. ¿Como estas? _Respondió Ginny sonriendo mientras giraba la manguera hacia su derecha apuntando a unos arbustos de rosa rojos y blancos situadas en las horillas de la pared de su casa. _Solo las estoy refrescando un poco.
La joven Carlocht inclinaba un poco su cuerpo al interior del coche, que en segundo de salir traía en sus manos una especie de sobre de forma cuadrada de color amarillento debido al pliego que lo envolvía. Ginny de donde estaba podía observar el sobre que mantenía su vecina en una sola mano por lo pequeño que era. Miraba de reojo, mientras continuaba de regar los arbusto produciendo un fuerte roció al colocar un dedo de su mano en la punta de la manguera ocasionando un diminuto alcoíris cuando las luz del sol penetraba las partículas del roció.
Carlocht al cerrar la puerta del carro se dirige a cruzar la calle acercándose a donde estaba Ginny aun regando. Ginny miraba a su vecina aproximándose, pero su vista se deslizaba hasta la mano que mantenía aquel sobre, no podía evitarlo, sus ojos se dirigían al sobre. Pudiendo ver así en unas de las caras del sobre un escudo muy conocidas por ella. El escudo del ministerio de magia que se divisaba marcada en el sobre en un color rojo vivo, y unas finas líneas con ondulaciones que se notaba entre los dedos de Carlocht que llegaban a tapar lo que podía ser una firma del quien lo haya enviado.
_ Esperando que pase esta onda, Ginny. _dijo Carlocht llevando los brazos junto con el sobre atrás de su espalda inclinando su torso a la derecha para ojear adentro de la casa de los Potter y continúo _Y esperando que se mejore Tritón.
El rostro de Ginny cambio repentinamente, al preocuparse por lo que le allá pasado a la lechuza de su vecina.
Ginny Aun permanecía regando, prestando oído a lo que su vecina decía donde observa su extraña actitud que llevaba cuando miraba a dentro de su casa.
mientras aparta el dedo de la boca de la manguera para que fluyera el agua con normalidad, que al mirar al suelo se percata que había creado algunos posos alrededor de los arbustos, tomando así la decisión de cerrar la llave mientras le preguntaba a su vecina.
_ ¿Y qué le ha sucedido a Tritón? _ pregunto Ginny cuando se dirigía a cerrar la llave que se hallaba entre los arbusto de rosas rojas y blancas. Mientras Carlocht aun ojeaba la casa de los Potter.
Las calles de Godric a un permanecían desoladas solo una repentina brisa arrastraba las hojas marchitas de los arboles, pero un grito descontrolado hizo que Ginny y su vecina miraran a ver que era, el alarido era corto y se percibía cada vez más cerca.
Ginny estando agachada coge una de las puntas de la manguera que había permanecido en la boquilla de la llave y se levanta rápidamente haciendo pequeños aros al estar enrollando la manguera en sus manos mientras se dirigía a hacia Carlocht que miraba a lo lejos de la calle por unas de las esquinas y a continuación de ella salió disparado un joven en una bicicleta, tabaleándose de un lado a otro. << Hacia aparentar que no tenia practica manejándola>> doblando la esquina al sentido donde estaban Ginny y Carlocht gritando a toda voz que no llevaba frenos.
_¡Cuidado…! ¡Cuidado…! ¡No llevo frenos! ¡Suban a las aceras…! ¡Qué voy volando! _exclamo el joven mostrando un rostro y una risa de malicia al pasar al frente de Ginny y Carlocht.
Ginny termina de enrollar la manguera y desvia la mirada hacia su vecina pudiendo ver aquella firma legible en el sobre escrita con pluma y tinta negra, que al leerla pudo saber, quien se lo había enviado. Ginny ya savia desde donde procedía el sobre y la persona que lo envió, solo le quedaba algo una pequeña inquietud de lo que podría haber adentro del sobre. Inquietud producida al saber que el sobre de forma de cubo era enviado desde el ministerio de magia, un lugar que de costumbre predominaban los problemas, Y en sus diferentes apartamentos se realizaban los juicios de aquellos magos que utilizaban la magia para el mal y en otras controlaban todas normalidades de las criaturas mágicas, y muchas cosas más. Pero lo más resaltante del ministerio de magia es que los mismos trabajadores, ocultaban secretos muy peligrosos conllevando que algunos de ellos formaran parte de ellos.
Carlocht al terminar de ver al joven que se desaparecía por el vapor que despedía el asfalto y por lo lejos que estaba, seda vuelta para mirar a Ginny que aun miraba el sobre mientras sostenía con su mano izquierda la enrollada y pesada manguera.
_ ¡Que Muggles tan locos hay aquí en el valle de Godric! _dijo Carlocht con rostro sorprendida mientras negaba con su cabeza. _Son tan peligrosos para sus propias vidas que no respetan a los que habitan con ellos. ¿Imagínate nada más si tuvieran una escoba? _dijo Carlocht mostrando un rostro como si fuera una locura mientras repetía una frase de lo que había dicho el Muggle _Que voy volando… _continúo en modo de susurro. _Locos.
Ginny al escuchar y asentar con la cabeza lo que decía Carlocht, le vuelve a preguntar sobre su lechuza.
_ ¿Qué fue lo que le sucedió a Tritón?
Carlocht miro a Ginny al rostro y le cuenta el trágico momento de su lechuza moviendo el sobre de un lado a otro cuando explicaba. Haciendo que la vista de Ginny siguiera el sobre algunas veces.
_ A mi esposo se le había olvidado darme este sobre en el trabajo. _Dijo Carlocht mostrando el sobre amarillento _pero yo ya me había ido del ministerio para el entregármelo. Tomando el la decisión de enviármelo con Tritón… Pero la tonta en vez de volar a la casa y esperarme a que llegara y entregármelo. Nooo…hizo lo contrario. Fue volando por la autopista, y me alcanzo planeando sobre el carro donde se lanzo estrepitosamente por el porta brisa del coche, produciéndose varios golpes en el interior… _Carlocht negaba con la cabeza por lo sucedido _Quedando inconsciente en los asientos de atrás pero aun respirando. El susto fue tan grande Ginny que casi me hizo chocar con un camión _mencionaba Carlocht llevando la mano que mantenía el sobre a la altura de su pecho mientras colocaba un rostro de asombro al recordar aquel momento de sobresalto.
Ginny mostraba en su rostro un sentimiento al recordar que su lechuza había pasado por algo igual, entrando un día del mes de navidad por la chimenea de la casa, ocasionándose varios golpes que le hizo fracturar unas de sus alas. Saliendo totalmente negra por caer en los carbones de la chimenea.
_Pobre Tritón debe de estar adolorida.
_ ¡No vale…! _Negó Carlocht jadeando con la mano que contenía el sobre. _Ya está mejor, es una lechuza fuerte. Pero no te miento, al principioo… _decía Carlocht con la voz algo cortada _estaba totalmente tirada en el suelo sin poderse levantar. Pero solo cuando fui por una manticas para recostarla y un pedazo de carne de la nevera… la muy condenada se alzo rápidamente, brincando en una sola pata hasta el pedazo carne. Ahí fue que me di cuenta que no era tan grave los golpes, que solo se había lastimado una patica. Haya está en la cocina disfrutando de la carne y recuperándose rápidamente. Pero no te voy a negar Ginny estaba asustada porque si no se repondría…y si se llegaba…
_Unnmm…ya no digas tonterías. _Interrumpió Ginny.
La expresión de Ginny había cambiado mostrando una alegría en su rostro y una risa en sus labios de color carne rojiza, al oír que Tritón se estaba mejorando.
Carlocht al terminar de contar el estado en que se encontraba su lechuza una repentina brisa se empezaba a sentir por las calle, haciendo que el cabello de Ginny se alborotara por alguna partes, mientras su piel acalorada con rastro de sudor sentía indicio de escalofrió por el pequeño frió que traía el aire donde sus pantalones blanco holgado con empañaduras de agua, provocada al regar se agitaban.
Ese extraño viento que empezaba azotar el valle de Godric se hacía cada vez más fuerte agitando a los arboles de un lado a otro desprendiendo cada vez las hojas y esparciéndolas.
Carlocht y Ginny colocaban una expresión de extrañeza en sus rostros sabiendo que habían escuchado y visto por la radio y televisión el pronóstico que paria para los días citados por la red de climatología.
Las gentes del valle salían de sus hogares a mirar que ocasionaba aquella corriente de aire tan repentina, los vecinos de Carlocht y Ginny se detenían al frente de sus casas, otros observaban desde las ventanillas de sus viviendas mirando por los alrededores, llevando sus miradas hacia el despejado, amplio y azulado cielo, donde no divisaban ninguna anormalidad en el, ni rastro de nubosidad se notaba, que llegaran a manifestar y a explicar la imprevista brisa. La unión del frió que traía la ventisca y el intenso calor que azotaba el valle de Godric provocaban en las personas una sensación de escalofrió. Ginny con la manguera enrollada y Carlocht con el sobre. Voltean intuitivamente hacia lo que parecía ser unas nubes grisáceas que se extendían por las diminutas montañas del pueblo de Godric que se avecinaban cada vez más ocasionando estrepitosas brisas que arrastraban toda basura y hojas de los arboles por las calles y por los aires.
Una extensa nube opaca cubriendo poco a poco el cielo tapando los intenso rayos del sol.
Ginny con su extraña expresión de asombro voltea a ver a su vecina que aun miraba la nube que se aproximaba.
_ Al parecer el pronóstico de hoy de climatología se equivoco otra vez_ dijo Ginny soltando una risa burlona. Mientras Carlocht volteaba a verla al escuchar lo que decía.
_ Eso es lo que parece. Aparecer esta onda de calor que pronosticaron para dos días, solo era que se aproximaba una tormenta. _dijo Carlocht haciendo un gesto de incredulidad al saber que ni la red de climatología de Muggle no funcionaba ni para ellos.
_ Si vale… _de repente un gemido de Ginny se produjo ocasionado al acordarse de que había tendido una ropa en el patio _ disculpa Carlocht hablamos otro día, por lo visto tendremos lluvia _dijo Ginny dándole la espalda para dirigirse a dentro de su casa mientras decía: _ ¡espero que se mejores Tritón por completo! _Su voz se elevaba más al alejarse de Carlocht.
Carlocht se sorprendió y dio vuelta a la calle para dirigirse a su casa.
_ Ok… Me les das saludo a tus hijos y Harry…
Ginny al estar dentro de su casa y dirigirse por sala observa a James acostado en el suelo viendo unas caricaturas. Y a Harry sentado en una butaca de madera en la cocina, con el cabello desordenado y con la cicatriz aun en la frente, sus ojos grises ojeaban a través de sus lentes redondos unas páginas de un periódico, lo que parecía ser <EL PROFETA> por que las ilustraciones en la pagina se movían.
La casa estaba aclimatada por un hechizo que Ginny había realizado para que no se sintiera la onda de calor dentro de ella. A nivel del techo decaía una especie de lluvia blanca muy parecida a la nieve, pero no llegaban a caer en el suelo desvaneciéndose a la altura de Harry y Ginny que solo podían tocar la mágica y blanca nieve.
_Iculto diluzsion… _pronuncio Ginny. Haciendo que el hechizo que estaba esparcido por toda la casa manteniéndola fresca, desapareciera. Harry estando aun en la cocina percibe el cabio en la temperatura _ ¿Dónde está Albus? _pregunto Ginny a Harry. Que aun leía el periódico. Mientras ella entraba a la cocina, llegando cerca de unos gabinetes de color caoba, que al abrir la puerta de uno, lanza la manguera enrollada al interior. "trac" se oyó un golpe al cerrar la puerta _ ¿Harry donde está Albus? _pregunto de nuevo Ginny mientras se acercaba hacia él, colocando una mano en la página que Harry estaba leyendo.
De pronto un gemido de impresión salió y elevando su cara observa que Ginny lo miraba fijamente.
_ ¿Y Albus donde esta? _repitió _ ¡No está con James viendo caricatura! Harry doblo el periódico y lo coloco en el mesón mientras mostraba una leve sonrisa.
_Si no está con James… entonces debe estar en su cuarto _respondió al levantarse de la butaca _a por cierto… ¿desvaneciste el hechizo? ¿Por qué? _pregunto Harry dirigiéndose a la nevera, sacando un vaso de vidrio y una jarra que contenía un jugo de naranja. Llena el vaso y vuelve a meter.
_Ya no vamos a necesitar el hechizo… se aproxima una tormenta. _respondió Ginny mientras salía de la cocina.
Harry tose repentinamente a escucharla. Saliendo de su boca y nariz chorros de jugo de naranja, Haciéndolo ahogarse y estornudar.
_C…como… como que una tormenta _dijo Harry aun estornudando y con los ojos lagrimados _Si en la radio d… dijeron que era… una onda de calor que perduraría por dos día.
Harry estornudando sigue a Ginny que se dirigía a la sala llegando los dos hacia un pasillo que conducía al patio.
La sala estaba pintada de un color morado opaco, se podía observar en ella unos cuadros de la gran familia maga, como en una; James, Lily y Albus sonreían y en otras se encontraba Harry y Ginny abrazados con un fondo de un atardecer de una playa deslumbrante, mostrando los dos una esplendida sonrisa.
Aquellas fotos se veían diferentes, no realizaban ningún movimiento. Como lo acostumbraban hacer los cuadros de Hogwarts. Que murmuraban cuando un profesor o estudiante pasaba por su lado, dando la bienvenida o un simple saludo pero en ocasiones esas palabras de amabilidad se convertían en maldiciones o groserías por algunos retratos que no apreciaban a los alumnos.
Las fotos corrientes, sin movimiento de la casa de los Potter eran solo tomadas por fotografía normales que existían en el mundo Muggle, para no impresionar y asustar a quien llegara a visitarlo, previniendo que los visitantes fueran Muggle. Solo un cuadro en aquella sala sobresalía de los demás, en el se podía ver a un señor adulto con una gran chiva y cabello blanco plateado que se extendía hasta las rodillas, brillaba al solo mirarlo haciendo imaginar que tuviera escarcha esparcidas. Sus ojos de un color azul intenso brindaban a través de unos lentes medialuna una escalofriante y aguda mirada de rectitud y seriedad, sintiendo en aquel que la observara una impresión de que se trataba de alguien que era recto en lo que decía y lo que se proponía hacer.
Ginny recogía las ropas de sus hijos, de Harry y de ella en el tendedero del patio. Pero la fuerte brisa bombeaba las prendas de un lado a otro produciendo ruidos en el aire, su cabello de color castaño se movían estrepitosamente por su cara, su pantalón de jeans blanco ondulaba al ritmo de la brisa.
Aquel cielo que ante era azulado ahora era de un color gris fuerte que arropaba todo el firmamento sin dejar escapar ni un rayo de sol.
Ginny luchando con el fuerte viento de la tormenta se apresura a recoger las ropas de las cuerdas, pero al estar cerca de una blusa rosa con estampado de una fresa, siendo de Lily. Se desata rápidamente del tendero dando giro por el aire hasta caer en las partes de césped del patio.
Se produjo un Gemido acompañado de un grito de parte de Ginny.
_ ¡HARRY!
Harry observando rápidamente y con paso largos se dirige a recoger la blusa rosa de su hija. Su cabello desordenado de costumbre, sostenía una batalla por la fuerte ráfagas de aire, agitándose de un lado a otro.
_Tedas cuenta que tenía razón _dijo Ginny.
Harry de regreso le coloca la blusa en la mano a Ginny y responde al tener la mirada hacia el cielo.
_Si Ginny. Es verdad… _Harry asentaba levemente con la cabeza _que raro hace una horas era la onda de calor y ahorita es un…
_ ¡Lo… que veo es que la red de climatología se equivoco! _interrumpió Ginny sosteniendo en sus manos una montaña de ropas _En sí…, es de esperarlo. Los Muggle se la pasan estudiado el clima en todo momento, tratando de adivinar que deparara para el día, para el tiempo, y el cielo. Que si una tormenta de lluvia o de nieve caerá o una onda de calor como la de hoy azotara al mundo _exponía Ginny con un rostro de incredulidad mientras se dirigía a tomar la única prenda que quedaba en el tendero, saltando a un su cabello en varias direcciones _ ¡lo que no entienden es que la naturaleza es pura magia! _proseguía mientras elevaba su voz _ ¡En cada rincón desde donde sus ojos Muggle se metan y escudriñen! ¡Es pura magia...! Si pudieran estudiarla en lo más profundo, entenderla, o escucharla, con solo escucharla podían interpretar en lo que en verdad como se comporta la naturaleza o lo que en realidad quiere hacer. Pero siempre se dejan llevar por lo poco que sus ojos Muggles simples pueden ver en ella. _ Su voz disminuía _Bueno…como lo hace siempre Kinston Blecherr.
Harry observaba el cielo gris mientras escuchaba a Ginny criticando a los meteorólogos del mundo Muggle de su mal entendimiento a la naturaleza.
_ Los magos que estudian la naturaleza deben de tener una respuesta para lo que está pasando _dijo Harry al llevar su mirada hacia Ginny, que se agachaba para recoger una camiseta de color purpura _Tendríamos que esperar si el profeta mañana comenta algo _dijo alcanzando a Ginny para ayudarla con la montaña de ropa.
Los dos se pararon mirando aquel cielo nublado donde las nubes grisáceas se combinaban con otras más claras, revalidando en todas ellas una de colores oscuros. A Harry. Las nubes oscuras, le hacían recordar a los temibles Dementores, por tener formas parecidas a ellos, y por sus sombrías apariencia. Rememorando aquellos momentos que estuvo cercas de montones de ellos, sintiendo por un instante aquella presencia escalofriante y desagradable que hacían sentir, desgarrando y absorbiendo con su beso de dementor los más puros sueños y momentos de alegría que hayas vivido. Solo Dejándote aquellos tristes y no anhelado sentimientos.
_ ¡Mama!… ¡mama!…
Harry y Ginny voltean al mismo tiempo al escuchar a su hijo.
_ ¡Una lechuza enorme acabo de aterrizar en la mesa de la sala! ¡Y lleva un sobre en su pico!
Harry y Ginny al escuchar a James decir que la lechuza traía un sobre en su pico, los dos corren, dejando atrás aquel cielo nublado y dementorizado por los recuerdo de Harry. Harry que sostenía las ropas, deja caer varias prendas al estar de prisas. Entran al pasillo que conduce a la sala y observan lo oscuro que estaba, al no tener la luz del día.
El manto gris en el cielo no dejaba que los rayos del sol iluminaran la casa de los Potter y al Valle de Godric.
Al llegar a la sala, los dos admiran a una enorme lechuza sobre la mesa de centro de color negro brillante, los objetos que adornaban a la mesa estaban esparcidos por los lados de la lechuza y por el piso. Las magnificas garras de aquella ave habían desgarrado la mesa negra, varios trazos de distintas direcciones se observaban desde lejos, producidas por el aterrizaje brusco y descontrolada de la lechuza al tocar el liso y resbaloso borde de la mesa.
La lechuza era extremadamente monumental, su plumaje era espectacular para la vista de Ginny y Harry. Hacia imaginar que era piel de un tigre pero con colores más llamativos, vivos y brillantes. Sus alas como su cuello y cabeza eran de unas plumas de color amarillo intenso con un punto de color negro en el centro y al final se contemplaba de negro-verde esmeralda una forma de luna curva. Su rostro era del mismo color, con cejas largas de color blanco donde mostraba una profunda mirada, y su pico dorado sostenía un sobre en el. Y sus ojos de color amarillo radiante con un rayado en el medio Completaban el magnífico cuerpo de la lechuza.
Harry podía ver de reojo a Ginny que respiraba profundamente inflando su pecho y desinflándolo al ver que la mesa favorita de su sala había sido arañada, desordenada y estropeada por una lechuza. El sobre era grande y amarillento por ser de pergamino y hacia imaginar que era pesado al estar revelándose a cada segundo del pico del ave.
¡AMORRR…! Mira… un sobre _dijo Harry mirando a Ginny y dirigiéndose hacia la lechuza al dejar la montaña de ropa encima de un mueble _Nos mandaron una carta, ¿de dónde será? ¿Quién n…nos habrá… mandado una carta? _pregunto Harry. Tartamudeando y aun mirando a Ginny con rostro de certidumbre esperando su reacción y tratando de distraerla con el sobre, para Que mirara hacia lo que tenía la lechuza en su pico y no al desorden y la mesa arañada.
James contemplaba y se acerca en pasos cortos al ave. Harry toma el sobre del pico dorado de la enorme lechuza haciendo que produjera varios chillidos agudos y afilados para los oídos, como si alguien estuviera agarrando un objeto puntiagudo y afilado y lo pasara por un elemento metálico varias veces haciendo producir aquel estrepitoso ruido.
Harry, Ginny y James se tapan los oídos rápidamente quejándose por los fuertes chillidos. Mientras la lechuza se echaba hacia atrás evitando a Harry, produciendo otros rasgados en la mesa.
Harry se da cuenta lo que había provocado y abre el sobre lo más rápido que pudo mirando con susto y con el corazón algo acelerado hacia Ginny. Que lo miraba a él con ojos chicos y labios contraídos. Harry trataba de pensar y imaginarse de lo que estaría pensando su esposa en su mente. - (Si eran maldiciones o trataba de recordar que conjuro o hechizo sería bueno para él)-
De pronto unos pasos se escuchan seguidamente como si alguien estuviera bajando de unos escalones rápidamente, esos crujidos de madera siendo pisada venían de una escalera situada al costado de la pared del pasillo que lleva al patio, donde una joven bajaba la escalera, llegando a la sala con rostro sorprendida preguntándose qué es lo que estaba pasando, solo sabía que ese crujido venia de algo que llevara alas y que tenía que estar relacionado con la magia. Lily en seguida se percata de la lechuza y el desorden en la mesa y del piso, donde pudo ver que algunos cuadros estaban tirados juntos con el florero de girasol que su madre había comprado para su mesa favorita. Viendo a así su padre que sostenía en sus manos unas cartas, mientras Ginny hacia todo lo posible de espantar a la lechuza de la mesa, pero no pudo lograr que se moviera. James estaba más cerca de ella, hasta que una voz aguda y angelical pregunta.
_ ¿Padre y esa lechuza de donde viene? ¿De quién es? _Lily se acercaba hacia Harry, mientras el desdoblaba la carta para leerla.
Ginny deja quieta la enorme lechuza que arruinaba su mesa con sus extravagantes garras y se aproxima hacia Harry, al ver que el expresaba una alegría en su rostro.
_ ¿Qué paso Harry? ¿Y esa sonrisa…? ¿Qué dice la carta? ¿Quien la envía? _pregunto Ginny ubicándose a un lado de Harry para ojear y leer la carta colocando el mismo rostro de impresión que Harry había hecho al saber el motivo de la carta.
"Hogwarts" Colegio de magia y hechicería. Directora: minerva Mcgonagall.
Estimado, queridos y recordados Señor y señora Potter. Me he tomado la decisión y el gusto de escribirle la carta dándole la notifica que su hijo Albus Serverus Potter con la mayoría de edad correspondiente que exige la escuela, dispone de un cupo en el colegio Hogwarts de magias y hechicerías. Por favor, como ya tienen conocimiento de la lista y libros que necesitara el niño. Aquí de igual modo se les coloco marcado nuevos utensilios para su primer curso.
Las clases tienen inicio el 1 de septiembre del 2017. Lo espero con alegría y con los brazos abiertos (y con ansias de pincharle los cachetes a Albus) Los quiere la directora Minerva Mcgonagall.
Posdata: besos a todos y disculpen a Urion. Espero su carta.
Harry sentía una gran emoción por dentro, aunque sabía que algún memento tenía que llegar una lechuza con un sobre que contuviera el cupo para el colegio de magia y hechicería para su hijo Albus, ya que había cumplido la edad requerida para asistir en ella.
Ginny sonreía mientras contenía la alegría para no armar un alboroto y evitar risas y burlas de quienes las miraban, sabiendo que su hijo se iba a unir muy pronto con su hermano mayor James a disfrutar las aventuras de Hogwarts.
Lily brincaba alrededor de su padre para ver lo que decía, pero un grito de Harry se oyó en toda la sala.
_ ¡ALBUS…! ¡ALBUS…! ¡BAJA PRONTO! ¡TE TENEMOS UNA SORPRESA! ¡APÚRATE...! _Albus permanecía en su habitación pero de repente se escucha un fuerte golpe como el cerrar de una puerta, acompañado con unas palabras agudas.
_Voy…voy bajando…
De nuevo los pasos en la escalera al bajar y el rechinar de las maderas se escuchaban. Hasta que aparece en la sala un chico blanco, arreglándose el cabello desordenado aplastándoselo en la cabeza mientras agarraba una forma de hongo, su franela roja y pantalones arrugados tenían pequeños hoyos y en sus pies solo llevaba un zapato con las trenzas sueltas.
_Di…díganme padr…… _se interrumpió al ver que al lado de James y sus padres estaba una lechuza extraordinariamente bella, su rostro fue de asombro cuando la vio. Los ojos de color magenta de la lechuza voltearon a ver hacia Albus dejando la mirada fija en el.
_ ¿De quién es la lechuza? _pregunto Albus a sus padres _ ¿Es para mí? ¿Ese es mi sorpresa? Hablando muy rápido se dirige hacia la lechuza pero la voz de su madre Ginny lo detiene.
_ No… hijo la sorpresa esta… en esta carta _dijo Ginny mostrándosela _está escrita aquí. ¿La quieres leer por ti mismo? _pregunto Ginny.
Albus estira su mano y toma la carta, la ojea volteándola y observa un sello de lacre de color rojo sangre con un escudo donde un ave con las alas abiertas tenía entre sus pies una letra H. Le da vuelta de nuevo y observa la escritura. Colocando un rostro de asombro al darse cuenta de donde provenía la carta. Un silencio se expuso en la sala. Albus no hablaba, no se movía solo estaba parado mirando la carta, sus ojos estaban fijos.
James estaba tratando de tocar la lechuza pero el ave se sacudió desplumándose por completo echando su pico dorado hacia los dedos de el para picarlo pero fue rápido quitando la mano ante que la lechuza lo mordiera.
Lily miraba a sus padres, que mantenían ellos la vista hacia Albus, callados, esperando su reacción.
Albus veía cada palabra de la carta, no demostraba ninguna facción de agrado o de desagrado al querer o no querer el cupo en el colegio de magia, solo la miraba, la contemplaba. La tensión en la sala se empezaba a sentir, sus padres esperaban alguna señal de alegría en el. James se había sumado a sus padres a la espera de la reacción de su hermano dejando tranquila a la gigante lechuza, ya que él sabía que la única razón de esa carta y la expresión de sus padres era que su hermano Albus lo asestaban con un cupo en la escuela de magia.
Albus sin decir ni una palabra mira a sus padres y a sus hermanos , después seda vuelta y se dirige a la escalera dejándolos con las ansias de su respuesta.