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Un domingo del mes de noviembre, una noche normal, aburrida, monótona, estaba Lucia una vez mas con sus manitas inquietas, prendida a su computadora, era ella una especialista en redes sociales, la maga de relaciones virtuales, sus amigas la ponían a menudo a charlar con sus pretendientes para saber como eran en muchos aspectos, y claro que lo lograba; esa noche termino de charlar con su novio virtual, ya toda su familia se había ido a descansar solo faltaba ella, que en el silencio total de su apartamento seguía tecleando, conservando ese noviazgo de hace 3 años con un hombre, 12 años mayor.

Triste la vida cuando se vive para perder la fe, cuando el espíritu se ensucia y no te deja ver la luz de otros semejantes, cuando tu ser ya no cree, asi era él Santiago, 42 años, mujeriego, libertino, sarcástico, insensible, y Lucia, joven fiel, expresiva, valerosa, confiada y sobretodo, hermosa.

Y ahí estaban ellos en su habitual conversación de 4 horas, planeando salir en dos meses a Honduras, para visitar las ruinas mayas de Copan, así que Lucia, esa noche se sentía feliz, apagó su computadora, luces y se disponía a salir en medio de la oscuridad para su habitación, cuando escuchó a través de los parlantes de su computadora, unas voces desconocidas

- Déjalo así, te queda muy bonito

- Pero no me gusta del todo

Lucia se sobresaltó, eran dos mujeres madre e hija y ella literalmente escuchaba esas voces por el parlante, continuó escuchando consciente de cualquier ruido dañaría esa confidencialidad que escuchaba

- Voy a preparar la comida

- Te espero, Susana debe estar por llegar

- Pero deja q Lucia vaya a dormir

En ese momento Lucia se sobresaltó y emitió un ruido gutural.

- Hace muchos meses me vio llevarte rosas, iba por el pasillo y me vio sorprendida

- A Joaquin tambien lo vio, sentado en el sofá.

Lucia pensó - ¿por qué,aqui?

- Porque la energía convive con lo mismo,  son espacios habitados en varias dimensiones, son campos magnéticos sobrepuestos, alimentándose mutuamente, acá vivimos felices, pero hay quienes son infelices por la energía que se vive en ese sitio, familias infelices o malas, conviven con seres de su dimensión de la misma energía

Lucia, no emitía palabra, solo pensaba - ¿pero como existen y llevan una rutina, si solo nosotros tenemos un cuerpo, un físico, somos materia?

- Nosotros tenemos un cuerpo, pero tu no puedes verlo

- Ocupamos espacio, llevamos nuestras rutinas y tenemos necesidades, sufrimos y nos alegramos

Lucia no podía entender, sintió su cuerpo, se dió cuenta que cada musculo respondía a sus órdenes, no se habia desmayado, estaba completamente lúcida.

-  Nosotros los escuchamos a ustedes fácilmente, estamos acostumbrados a sus ruidos, ustedes a nosotros no nos escuchan, porque para eso deben bajar el nivel de las ondas cerebrales, hoy tu escuchas pero mañana quizás ya no, por tu estado de ánimo has logrado mantener el nivel bajo de tus ondas y escucharnos, a medida que suban dejaremos de escucharnos.

Lucia comprendió de inmediato que debía mantener la calma de lo contrario perdería la comunicación, pensó - ¿cuántos mundos pueden existir entonces?

- Somos muchas dimensiones en este mismo mundo, según el nivel de energía de cada ser, nos ubicamos en una dimensión, no sabemos la verdad tampoco, pero creo que eso a lo que en su mundo llaman reencarnación es cambio de energía para vivir en otra dimensión y seguir experimentando.

Lucia pensó - ¿Y Dios?

- En todas las dimensiones somos energía, si ese dios que ustedes llaman, y a quien culpan muchas veces de sus alegrías o penas existiese solo debe ser energía superior, capaz de escuchar y alterar otras dimensiones, pero lo dudo.

Lucia pensó - pero, ¿ustedes viven en este apartamento?

- Vivimos en este apartamento, te lo describo mi sala tiene 4 sofas color naranja y crema, cortinas igualmente naranja

Lucia se dijo - los mios son blanco y vinotinto, y son 6 -

- Entonces, es el mismo espacio con diferentes caraterísticas.

Lucia recordó, las mil películas que ha visto de espíritus que viven en casas antiguas y pensó - seguramente están muertos y sus espíritus viven acá-.

- Estamos vivos, tal vez ustedes son los muertos, porque mi abuela murió la semana pasada.

Lucia pensó, - no puede ser, estamos vivos, acá la gente muere-.

- Somos muchas dimensiones - dijo la voz de la señora mayor - en nuestro mundo tenemos un dispositivo en análisis, ha recogido sonidos que sabemos es un lenguaje, lo están descifrando, así que somos muchos mundos, no solo en este mismo espacio también en el universo, solo falta medios y tener nuestros sentidos aptos para diferentes longitud de onda.

De pronto se hizo el silencio, y Lucia se dirigió a su habitación, donde la esperaba su hermana que estaba escuchando música, le dijo

- Acabo de escuchar unas voces del parlante de la computadora y ya la tenía apagada.

Lorena, su hermana le dijo: - No puede ser, seguro te lo imaginas.

- Nunca he estado mas segura de esas voces, me dijeron que vivimos en el mismo espacio con dimensiones diferentes.

- Todo es posible, siempre nos creemos únicos.

Y así Lucia cayó dormida, pensando en las ruinas Mayas y miles dimensiones, - todo es posible-  .