Antes de entrar en casa, levanté la mirada y lo vi.
El mismo niño que maté en aquel accidente, estaba asomado en mi balcón.
Ahora está aquí a mi lado, obligándome a escribir estas últimas palabras.
Sabía que un día iba a tener que pagar por lo que hice.
Thank you for reading!
We can keep Inkspired for free by displaying Ads to our visitors. Please, support us by whitelisting or deactivating the AdBlocker.
After doing it, please reload the website to continue using Inkspired normally.