Lo llaman AMOR Follow story

Sí, lo sé. Para mí es solo ella porque la puedo ver. Por su atractivo, por sus facciones perfectas. Sus ojos seductores, su voz cautivante, su sonrisa complaciente, su cabello, lo primero que me seduce. Y no puedo evitar que su cuerpo me excite, que me perturbe de tal modo que no pueda dejar de pensar en él. Por otro lado, ella es dulce, interesante, y guarda un magnetismo difícil de eludir, pero eso la hace aún más especial.

No puedo controlar lo incontrolable por ver lo primero que veo, y ojalá pudiese renegar de esa superficialidad que no para de asaltarme y que la convierte en mi debilidad. Esto demuestra que los impulsos primarios superan siempre en primera instancia a ese concepto denominado, "amor a primera vista", y creo que cualquiera que lo contradiga solo lo hace por haber sido convencido de que esa pasión es fruto de un enamoramiento, y no de una obsesión.

Sin embargo, al final lo vi. Ella ha hecho que así lo hiciera. Me demostró que el tiempo pasa sin que pueda saber si a la mañana siguiente seguiría a mi lado. Si ella, la persona por la que un día luché, a la que pude conquistar, a la que me aceptó pese a mis imperfecciones, sería capaz de soportar mis extravagancias. Me mostró que en mi poder estaba el considerarla una más o la exclusiva irrepetible. El verla como todas o como ninguna. El ser un simple cuerpo al que follar o la excepción para quererla de verdad.

En nuestra vida al final conoceremos a mucha gente, lo malo será no ser consciente de quién es la indicada y acabar perdiendo lo que siempre buscamos. Es inevitable que el tiempo sea lo único que nos abra los ojos ante dos cuestiones que se desean y aborrecen al mismo tiempo, y es el mismo tiempo el que nos mete prisa para que tomemos ya una decisión.

Luego llega lo inesperado, el sufrir por "amor". Nos intentamos convencer de que no nos importa el físico que inevitablemente lo hacemos porque no queremos ver que lo que realmente buscamos primero es el sexo con esa persona para luego tener algo más con ella. Pensamos que nos convierte en mejores personas apreciar más el interior cuándo no somos peores por querer echar primero un polvo. Ignoramos nuestros sentimientos por ser víctimas de la lascivia, y cuando al fin desahogamos esa necesidad, nos atacan los motivos que dañan nuestras emociones. ¿Cómo no vamos a sufrir? Si dejamos que el deseo controle muestras vidas. ¿Cómo no vamos a sufrir? Si rechazamos a la mínima a esa persona que no nos excita por muy humilde que sea.

El amor es bonito mientras creemos que lo experimentamos, pero ni nos imaginamos lo hermoso que puede llegar a ser si llega a ser real.