Recuerdos falsos Follow story

El umbral de las cosas que no son reales es definitivamente muy borroso.

Sueño que has preguntado por mí esa noche que entre pastillas me dormí, vi tu mensaje, lo leí y algo cálido me acarició el dolor en el pecho; vi esa comida que ustedes echaban al contenedor de la basura, quería comerlo pero caducó, eso aseguraron en mis recuerdos; fue una noche terrible y cansada. Al despertar no estaba aquel mensaje de mi familiar y en el refrigerador estaba aquella comida intacta, tal y como se compró… pero en mi cabeza el recuerdo era tan real como verlo allí.

Nadie se preocupa en realidad por el deterioro de mi mente y el mundo sigue tal cual como si yo no estuviera aquí, inerte.

Fantasmas vivos, fantasmas muertos, fantasmas que se deleitan reviviendo todos mis traumas mientras el cerebro intenta como puede desconectar todos sus cabos sueltos. Dormido, despierto, insomne y ansioso, pensamientos que no tienen lógica se contraen en una pululante masa de desperdicios del inconsciente que el estado medio drogado con químicos que no tenía y no se sabe si realmente los necesitó, urden y traman, tejiendo espasmos del sueño que se sienten reales y no lo son… o son, sin identificarse, se presentan, irrumpen, atragantan el fluir calmo del estado REM, que resulta estar en guerra con la puerta semiabierta de un abismo de universo que no debería venir a explorar al sujeto que desea descansar.

Despierto, dormido. Pesadillas reales, tocan y rasgan las heridas a medio cerrar, traumas a medio tratar. Vomitan ácido corrosivo en la carne palpitante del soñador. Oh, pero en el colegio perdiste el transporte otra vez, te quedaste sin crédito en el metro otra vez, estás sólo en medio de la ciudad abarrotada de gente que tira sus sonrisas hasta deformar el cráneo.

¿Llegó el payaso del globo de nuevo? Le había dicho que se fuera muchas veces, siguió parado sonriendo mientras de fondo aquellos que fueron llamados amigos te invitan a tomar un helado. Esos malditos que te rompieron y patearon tu masa sanguinolenta de pierna quebrada, el payaso habla con voz aguda…

¿Lo recuerdas verdad? Recuerdas como les importó nada que estuvieras a punto de matarte, mejor hazlo, mejor matarse que ser tú. ¡Mejor matarse que ser tú! ¡Preferían colgarse que ser tú! Decían que no entendías nada porque no te has ido de la burbuja, ja, ja ¡La burbuja que te ahogó cuando la epidural penetró en la espalda como un aguijón! Eso dolió igual que la otra penetración que dejó rastros de sangre ¿te acuerdas? ¡Dime que te acuerdas! En esos sueños cuando aquel amigo ja, ja metió su lengua en tu boca y ni siquiera te acuerdas de lo que pasó ¿verdad? Ja, ja ¡Los sueños te lo recordarán siempre! Golpea, golpea, golpea. La sangre no se lava ¡La sangre no se lava! Pobre ¿Quieres llorar, vas a ir a ahogarte con alcohol? Ja, ja, ja…

El umbral de las cosas que no son reales es definitivamente muy borroso.

Nadie se preocupa en realidad por el deterioro de mi mente y el mundo sigue tal cual como si yo no estuviera aquí, inerte.