A orillas del legendario rio Mississippi, se encontraba un rudo y solitario granjero, al que la gente llamaba Chuck, un hombre muy trabajador, que trabajaba de sol a sol, descansaba bajo un árbol´, dejando de lado su sombrero de cowboy, mientras comía una jugosa sandía y escuchando su canción favorita : Sitting in the dock of the bay por Ottis redding,sudando la frente, era un verano cruel.
En la casa continua, estaba su vecina Linda , que tenía visita, su prima Rhonda de la ciudad, ambas miraban extasiadas al hombre: -¡es tan guapo y sexy!, dijo Rhonda, - se dice que es gay, contesto desanimada Linda,sólo caballos, paja del granero, caballos y mierda, ¡hey!, tengo una idea exclamó Linda, ¿tú siempre quisiste mi yegua favorita Snow no?,-¡sí! dijo Rhonda, claro, -ok Rhonda, es tuyo si te atreves a acostarte con el granjero, sin dudar, Rhonda dijo -hecho. Entonces se dirigió hacia el hombre, caminando como una gatita sexy, contoneandose con su vestido veraniego floreado , tan corto como era posible, mientras se abanicaba dijo: -hola señor, wow,¿ calor no?, ninguna respuesta del joven, sólo la miró de lado, mientras Linda observaba la escena detrás de los arbustos,- ¿verano duro no?, insistió la joven, -si ñora, sin dudas , dijo al fin chuck, quién sin mediar palabras se quitó la camisa, dejando ver un cuerpo musculoso con el bronceado típico de los granjeros y la tiró en el pasto, tomó a la joven como a una muñeca y la apoyó contra el suelo, la chcia estaba con los ojos abiertos de par en par, el granjero le fue subiendo el vestido con sus masculinas manos y comenzó a escurrir el jugo dulce de la sandía por el cuerpo de la joven, subiendo su vestido , dejando sus pequeños pechos al descubierto, la chica se sintió asaltada, casi violada, parte de aquel extravagante lugar, eran parte de los animales, naturaleza y paisaje, el granjero bebió el jugo de la sandía del cuerpo de la joven, primero las piernas, luego la pancita, pechos y boca, una boca que lo esperaba ansiosa , hambrienta. De pronto, ocurrió, él sacó su falo y penetró sin tregua a la joven que gemía y gritaba ante un solitario hombre que hacía tiempo no tocaba una mujer, con lujuria, pasión y deseo, hasta los animales huyeron por los gritos de la joven, quién se aferraba a los hombres de Chuck como quién se le va la vida en ello , quedando ambos en forma de una concha de perlas,él sólo pudo decir, -fue hermoso mi sucia niña
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