La Traición de un nuevo Líder Follow story

En una pequeña cafetería en las orillas del puerto, estaba una chica sentada en una de las sillas de madera, mientras jugueteaba con un trozo de su cabello corto, llevaba demasiado tiempo esperando en ese mismo lugar, pero no dejaba de mirar aquella gran ventana de cristal con vista al estacionamiento.

- "¿Entonces ser un hada o ser una sirena cumple con tu deseo?" – Una dulce voz angelical resonaba en la cabeza de la joven.

- "Ya te dije que no quiero nada" – Contestaba como si frente a ella se encontrara una persona real.

-"¡Dime que quieres ser!" – La voz rechinaba.

-"No molestes que estoy ocupada" – La chica golpeó su frente tratando de sacar la voz de su cuerpo.

-"Solo te la pasas mirando esos aparatos de metal ¡qué ocupada!, mejor regreso después" – Pasaron unos segundos para que el ruido de la gente que hacía a su alrededor la volviera en sí.

–Muy lindo – Se decía así misma cada vez que le llegaba una nueva taza de café.

Miraba una y otra vez su celular buscando una respuesta entre sus mensajes de las redes sociales, sabía que no descansaría hasta saber que realmente había pasado, pero el tiempo era tan lento para ella, que se dedicó a observar aquellos autos que entraba y salían del estacionamiento.

-Hola, – la interrumpió aquella voz que sonaba ya cansada – Siempre eres muy puntual – Intento sacarle una sonrisa a la chica que sostenía nerviosa la taza de café.

La chica dejó atrás el estacionamiento, allí estaba su amiga ahora más delgada que años atrás, con una falda larga de colores estilo hindú y una blusa rosa fajada, adornada por un collar liso y un cuarzo verde de colgante, su cabello recogido de color café y las puntas de morado ya descolorido, se mantenía fijo en su coleta de cabello.

- ¿Has cambiado de lentes? - Trato de sonreírse, luego prosiguió para darle un sorbo a su café.

-¡Sí! Ayer los compre, ya casi me estoy acostumbrando – Imitó la sonrisa de su amiga, jalo la silla de enfrente para tomar asiento y poner su mochila en sus piernas.

- ¿Sofía? – La chica de lentes se dirigió a su amiga tratando de que sus palabras les dieran brillo a sus ojos opacos - Yo...

- ¡Ya llegamos! – Interrumpió sin medir su voz, un joven de cabello corto y oscuro, su cuerpo daba la forma cuadrada, algo robusto, pero no significaba que le afectara, siempre se defendía con un "soy pachoncito", su barba era lo único que podía demostrar que era un adulto – Me topé con Charlotte estaba algo perdida – Guiño su ojo – Y gracias a mí, logro encontrar la cafetería – mostró su dedo pulgar expresando un éxito a su responsabilidad, sin dejar atrás una gran sonrisa.

Charlotte se apenaba por las palabras del chico, sonreía sarcásticamente, vestía con pantalones de mezclilla y camisa de manga larga, su pelo lacio y corto brillaba con el tono oscuro de su piel, se podía decir que el corte y el color eran muy similares a la chica que trataba de beber un poco de café.

-Bueno, ya estamos todos – Interrumpió Sofía dejando la taza en la mesa – Valeria... - Se dirigió a su amiga de lentes, mientras esperaba que los demás se sentaran – ¿Imprimiste los carteles? – La pregunta que surgió de la voz de la joven, silencio a todos. Estaba mal que trataran de jugar en un momento de desesperación, pero a ella no le molestaba, al contrario, le ayudaba a concentrarse sin llegar a la locura.

Valeria abrió rápidamente su mochila vieja, llevaba mucho tiempo sin utilizarla – si... son quinientas copias – saco un montón de papeles impresos con palabras que ningún amigo desearía que le pasara "Se busca", repartió las primeras hojas a sus compañeros sentados en la mesa - ¿Lucas? – dejo caer su mano en el hombro del chico.

- ¿Sí?... Valeria – se había perdido en la fotografía de la impresión de su amiga de cabello chino que lo miraba seriamente sin parpadear, aunque la imagen fuera en negro y blanco, el aun recordaba perfectamente el tono moreno de la chica perdida.

- ¿Creaste la página en Facebook? – Ella sacó su celular de su bolsita de la mochila – Para buscarla y empezar a compartirlo.

-Termine de hacerlo, antes de venir – Lucas prendió su celular para buscar la página – Ahora mismo se las comparto a todas.

- ¿Estás bien? – Charlotte había notado algo extraño en Sofía y eso no era normal, aunque para esta chica lo normal no existía.

-Siento que esto es inútil – se mordió el dedo pulgar, tratando de contenerse, todos fijaron la mirada hacia Sofía que dejaba caer la copia – Me dirás que estoy loca, pero siento que Aurora le paso algo fuera de lo que es real – Tomo una melena de su corto cabello deslizándolo hacia atrás, aunque este regresara a su lugar otra vez.

-Sofía, por favor, ya hemos hablado de esto – La chica de cabello corto se rascó la cabeza tratando de explicarle– Prometiste que no involucrarías tus... -

- ¡Sueños! Ya losé – levanto la mano haciendo señas a la mesera para que le trajera el mismo café que había tomado todo ese tiempo – Tienes razón – suspiro tratando de recuperar el aliento – Gracias por recordármelo – Sonrió al sostener otra vez el papel.

- ¿Disculpa Sofía? – fueron interrumpidos por una mujer mayor, de piel morena, cabello lacio, largo y oscuro, tenía una falda negra muy corta, "demasiado para una mujer" pensó Valeria, la blusa la cubría un chaleco del mismo color oscuro – Necesito hablar con Sofía – miro fijamente a la joven que la miraba extrañamente, no recordaba exactamente donde había visto a esa chica que apareció de la nada frente a la mesa.