Sobre Pantera Negra y Youtube
Me acabo de enterar que la casa productora que llevó a la pantalla grande la película Pantera negra (Black Panter), va a ser todo el lobby necesario para que esta gane un Oscar en la categoría mejor trama.
Créanme cuando les digo que esta idea de aupar a la gloria a la película del rey T’Challa, me parece maravillosa, una excepción ya que cuando se quiere forzar el éxito de ya sea una u otra cosa, por lo general no digo que fracase, sino que no se lo merece, punto.
Ahora bien, no crean que soy un ávido seguidor de las aventuras del rey de Wakanda y por esto defiendo o voy a defender en esa entrada de blog a capa y espada la posible futura nominación y más que incierto éxito en la premiación hollywoodense, no para nada.
Aunque no lo crean, yo a mis más de cuarenta años de transitar por este mundo que a veces parece tan maravilloso y a la vez caótico, no tenía ni la más remota idea de qué diablos era eso que llamaban Pantera Negra, T’Challa, Wakanda y cosas relacionadas a ese superhéroe africano, tan lejos de lo que Marvel y DC nos llegaban a mostrar desde el cansancio.
Debo desglosar esta entrada y tocar varios puntos que a mi parecer deben ser, valga la redundancia, ser desglosados.
¡¿Cómo es posible que a más de la mitad de mi vida natural, no haya jamás escuchado de Pantera Negra?! Fácil, lo único que apareció por décadas ya sea en la pantalla chica como en la grande, fueron no muchos, sino unos cuantos superhéroes americanos que puedo contar con los dedos de una sola mano, ya que si bien sus películas fueron numerosas, en realidad cada vez que aparecía una, siempre empezaban desde el principio contando sus orígenes. Superhéroes menos conocidos ni opción tenían de participar en un dibujo animado, salvo la excepción de la serie animada Los Súper Amigos, donde salían personajes tan diferentes a los acostumbrados sujetos de las capas, como Samurái y Jefe Apache, pero ni por asomo un latinoamericano o un afro descendiente, imagínense un superhéroe venido del continente negro como le llamaban en los tiempos de mi padre, ¡menos!
No es de extrañar que cuando salió el tráiler de dicho personaje nacido no en Estados Unidos, sino en un país que ni siquiera albergaba una población con predominio en el censo de caucásicos, sino en lo más profundo de África, me quedé fascinado y con ganas de ver la película, ¡y eso que para entonces estaba harto, cansado y descompuesto de tantas películas de superhéroes! ¡Que ellos me salían hasta en la sopa!
Así que mi primer acercamiento al campeón africano, fue gracias a YouTube y vino lo que sería mi primera grata sorpresa y al mismo tiempo mala experiencia.
¿Pueden dos sentimientos tan diferentes tener cabida al mismo tiempo? ¡Claro que sí mis gatos!
Verán, las imágenes me mostraban un universo tan diferente a los clásicos hombres de capas que quedé maravillado. No sólo se trataba de un tipo de la capa africano, de hecho, ¡ni siquiera tenía capa! (la tipa bajita de Los Increíbles de seguro estaría contentísima), sino que mostraban una sociedad donde la tecnología se mezclaba a la perfección con la cultura del lugar. Cosas así sólo las había visto en Japón, y en esta película no sólo mostraban justo eso, sino que en vez de darle una chapucera amalgama lo habían hecho con respeto. Lástima que de Wakanda sólo se podían ver segundos y el tráiler se centró más en las acrobacias de T’Challa sobre un auto en plena carrera, que no desmerecía, sino que se veía asombroso.
Lo malo del tráiler era la pésima música que le pusieron de fondo, un rap acostumbrado al que ponen los afro descendientes en Estados Unidos.
¿Por qué ocurrencia le ponían una música así? ¡Era porque se trataba no de un típico súper héroe caucásico sino afro descendiente? Si ese era el caso, ya me temía lo peor de la película, me imaginaba como tres horas máximo siendo torturado por dicho género musical que no desmerece pero que a mí no me agrada, respeten mis gustos o en este caso desagrados. Por fortuna, ya al ver la película, dicha música no se oía ni por asomo, sigo sin entender el motivo de que la hayan puesto en el tráiler.
Ni que decir que me sorprendió el nivel de racismo en los comentarios en todos los vídeos que mostraban el tráiler. Créanme cuando les digo que yo disfruto leer los comentarios de la gente, puede que incluso más que los vídeos mismos, de hecho, y si me lo pienso con calma, estoy seguro que así es.
Como iba diciendo, los comentarios racistas eran sorprendentes, sin ánimo de exagerar, les puedo asegurar que un noventa y seis por ciento de los comentarios en YouTube eran muy racistas y xenófobos. Con comentarios tan hirientes que las críticas a la música rap eran lo de menos y los más suave por lejos.
¿Por qué criticar tanto una película cuando ni siquiera se había estrenado? Y luego no es de sorprender que ganase Donald Trump, que bien sabido es, que es racista; nadie sea ingenuo para negarlo o defender lo indefendible… Tiemblo al pensar que si tan sólo la mitad de esos ciudadanos en serio son el voto duro de Trump, entonces ya tiene ganado un segundo mandato.
Una vez estrenado el film, y ya los porcentajes variaron, se dio vuelta la tortilla o como yo prefiero decir la hamburguesa. Todas alabanzas y loas al film del superhéroe de Wakanda, respecto a todos los campos: música, escenografía, actuación, trama, diálogos, efectos especiales, lo que se les antoje; y ese noventa y seis por ciento, pasó a ser un cuatro por ciento.
Eso está bien, pero me pregunto, ¿dónde estaban esos fanáticos acérrimos de Pantera Negra antes de estrenarse el film?, ¿estaban en África tratando de localizar Wakanda? ¿Por eso no comentaron en YouTube? La interrogante a esto no tiene respuesta pero muestra que los troles del internet al menos tienen las agallas para expresarse aunque sea para mal y eso mis gatos es muy malo, malo, malo.
Me voy a extender más respecto a Pantera Negra, pero como superé las mil palabras para esta entrada lo haré en la siguiente, nos vemos en Wakanda.
Vielen Dank für das Lesen!
Wir können Inkspired kostenlos behalten, indem wir unseren Besuchern Werbung anzeigen. Bitte unterstützen Sie uns, indem Sie den AdBlocker auf die Whitelist setzen oder deaktivieren.
Laden Sie danach die Website neu, um Inkspired weiterhin normal zu verwenden.