Eran las 7 de la mañana cuando Lucía, se despertó sobresaltada por un sueño raro.
Se despertó y como era habitual se duchó y desayunó.
Cuando eran las 8 de la mañana bajó a su perro y comenzó a llover. Lucía en ese momento que no se trajo paraguas decidió seguir el camino que hacía habitualmente con su perro.
A las 8:30 le tocaba subir a casa y Lucía se percató en que se había dejado las llaves de su casa.
-¿Y ahora que hago? Tengo que irme a trabajar a las 9:30.
Empezó a llamar a números de cerrajeros, pero ninguno le contestaba.
Apareció el vecino que tanto le gustaba, porque se parecía a George Clooney, le dijo:
-Javier, ¿podrías hacerme un favor?
-Claro que sí Lucía, dime.
-Está lloviendo y no tengo como entrar a mi casa porque me he dejado las llaves, ¿tú sabes abrir la puerta de mi casa?
-Sí, lo único que te va a costar 50€.
-Vale, con tal de que me abras la puerta.
Javier le abrió la puerta de su casa y Lucía le pagó, dejó al perro y se cambió de ropa ya que se empapó por culpa de la lluvia.
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