snwtch 𝐋𝐨𝐫𝐢𝐞 𝐑

Muy en contra de su voluntad, había accedido a aquel viaje en el cual su mejor amiga había insistido tanto. Viendo el lunar en el labio inferior de Taehyung pensó que el venir a París no había sido tan buena idea después de todo. O, de como Jungkook se termina enamorando de quién menos debía hacerlo.


Fan-Fiction #16 in Prominente Nur für über 18-Jährige.

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Paris

Con un bufido subió su maleta al carrito portamaletas, ahora estando en medio del Charles de Gaulle se arrepentía tardíamente de haberle hecho caso a Emily. Es que había que ser tonto, ¿en qué sano juicio era una buena idea el escapar de sus problemas? Y más si estos tenían nombre y apellido y una dramática historia romántica de por medio.

Suspiro mientras empujaba su cochecito y buscaba con la mirada la cara de su mejor amiga entre la multitud de personas que había en la zona de desembarque. De pronto, escucho un chillido proveniente de algún lugar detrás de todas las personas que estaban amontonadas. Un grupo se abrió paso frente a él y de entre ellos salió una mujer de cabello castaño amarrado en una cola alta.

―¡Jeon Jungkook! ―fue lo último que dijo antes de lanzarse a sus brazos.

Jungkook a penas y pudo responder a tiempo antes de sentir el choque de ambos cuerpos. La chica se había subido como un koala a su cintura y ya le estaba llenando la cara de besos.

―Bájate ―le pidió entre risas mientras la sostenía por la cintura― todo el mundo va a pensar que somos algo.

―No sabes el honor que seria que piensen eso, ¡pero mira que guapo estas! ¿Estás seguro que te han roto el corazón?

―¡Muy seguro!

Había conocido a Emily en un intercambio estudiantil siete años atrás, cuando ambos aún se encontraban en la universidad. Él era el chico nuevo coreano que a penas y hablaba francés y ella se había autoproclamado su guía personal ayudándolo en todo lo que necesitara, desde alguna clase que había quedado poco clara hasta enseñarle los mejores bares de ambiente del distrito.

Bendito sea el inglés.

Cuando Jungkook tuvo que regresar a su patria, por un momento pensó que aquella amistad se enfriaría y terminarían siendo un contacto más en una red social que usaba poco o nada, que equivocado estaba. Una vez que Emily entraba a la vida de alguien marcaba un antes y un después, y eso paso con Jungkook. La distancia y el cambio horario no fue un impedimento para que ambos siguieran en contacto.

Emily por fin se bajó de él y pudo verla con calma. La chica no había cambiado nada, sus ojos seguían siendo un par de faros color miel, la sonrisa era igual de bella y seguía manteniendo aquel cuerpo que podría infartar a cualquiera. Quizás la única diferencia era que ahora llevaba el cabello largo, y le quedaba bien.

―Vamos, tenemos que conseguir un taxi ―comento mientras tomaba el mango del cochecito y lo empujaba― en un inicio iba a venir con TaeTae, pero le surgió algo en el trabajo y no pudo venir. Te lo tengo que presentar, ¡lo vas a adorar!

―¿ TaeTae? ―pregunto Jungkook mientras se colocaba su mochila.

―Mi novio, ¡Kim Taehyung!

Recordó que hace mucho tiempo atrás, en algún momento entre aquellas largas llamadas que Emily adoraba y él odiaba, la chica le había comentado que conoció a un chico coreano con el cual había quedado embelesada. Suponía que ese chico debía ser el famoso Kim Taehyung, con quien ahora Emily se iba a casar.

―Y más vale que te aprendas bien su nombre, ¡porque nos vamos a casar! ―contó dando pequeños saltitos.

Lo que es el amor, pensó con un poco de envidia. Se sentía feliz por ella, aunque Emily siempre había tenido buena suerte en ese departamento, lástima que no se podía decir lo mismo de él.

―¡Wow! ¿Cuándo te lo propuso? ―se quedó a su lado en el paradero de taxis mientras esperaban que llegara el próximo― ¿Por qué no me lo contaste?

―Bueno, aún no me lo propone oficialmente ―contesto ella sacudiendo su mano restándole importancia― pero ambos hemos estado hablando sobre dar el siguiente paso, ¡y el siguiente paso es ese!

―Pues felicidades ―contesto con verdadera felicidad― pero, oye ¿no tiene ningún problema con que me quede contigo?

―No, para nada ―contesto mientras un taxi se detenía frente a ellos― él es muy comprensivo y entiende y sabe que eres mi mejor amigo y no puedo permitir que te quedes en algún hotel cuando puedes hacerlo en mi piso.

Subieron su equipaje al maletero y cuando ambos estuvieron dentro, Emily dio su dirección. Durante el resto del camino ambos se dedicaron a conversar de los planes que ella había armado por los próximos dos meses en los que Jungkook se quedaría; él, la escuchaba fascinado.

El pensamiento sobre la mala idea que fue venir a Paris quedo olvidado en algún lugar al fondo de su mente, no podía imaginar mejor lugar para sanar que al lado de su amiga. Mientras rodeaban el Arco del Triunfo pensó en lo mal que le fue al enamorarse de alguien mayor que él y que nunca más debería de cometer el mismo error, nunca. Yoongi, le había dejado muy amablemente aquella valiosa lección.

―¿Pasarás conmigo mi cumpleaños? ―la chica interrumpió sus pensamientos.

―Ese es el objetivo.

―¡Ay, Kookie! ¡Te he extrañado tanto! ―contesto mientras le daba un fuerte abrazo.

Quince minutos después el carro se estacionaba frente a un edificio gris lleno de balcones y con rejas negras. Bajo su maleta mientras Emily arreglaba cuentas con el taxista, una vez solos lo dirigió dentro y subieron al quinto piso.

Cuando entro al departamento no pudo evitar pensar que, definitivamente, el lugar le pertenecía a Emily. Solo ella podría decorar un lugar con paredes celestes, bordes de ventanas blancos y muebles caobas y aun así hacer que el lugar se viera precioso.

¡Bienvenue chez moi, mon ami! ―gritó desde la puerta viendo orgullosa la cara de asombro de su amigo.

―Por un momento pensé que me dirías “humilde hogar”

―Lo pensé, pero sería pretencioso. Bueno, ¿Qué te parece? ―pregunto mientras cerraba la puerta.

―Es muy bonito ―contesto con una sonrisa viendo la chimenea que había en la sala y acercándose a las dos ventanas de piso a techo que había al fondo ―¿Cómo haces para pagar el alquiler? ¿Tu novio te ayuda?

―¡No, para nada! ―contesto riéndose― es un regalo de mi padre.

―¿Tu padre no quiere adoptarme? ―se burló mientras la miraba.

―¡Ya quisieras! Ven que te muestro tu habitación ―contesto mientras jalaba la maleta de Jungkook por un pasillo a la derecha.

Su habitación no era muy diferente, salvo que estaba decorada en tonos verdes y estaba iluminada naturalmente por el balcón que tenía.

―Mi habitación esta al costado ―comentó la chica colocando la maleta de Jungkook en la cama mientras él se dedicaba a curiosear dentro de los muebles que había en su habitación― cruzando el pasillo está el baño, solo tenemos uno. La cocina está detrás de la puerta blanca a la izquierda entrando, no te sientas corto de coger lo que quieras cuando quieras, ¡por favor!

―Muchas gracias, Em ―contesto Jungkook con una sonrisa― por un momento pensé que venir era una mala idea.

Emily rio sentándose en la cama: ― ¿Cuándo aprenderás que mis ideas nunca son malas, Jeon Jungkook?

De pronto el celular de la chica sonó asustando a ambos. Mientras ella salía al pasillo a conversar, Jungkook empezó a desarmar su maleta y guardar sus cosas en el armario empotrado que había dentro.

Justo cuando terminaba de sacar todo lo que había traído, un sobre al fondo de su maleta llamó su atención. Pero ni bien la abrió se arrepintió en el acto, era una antigua carta que le había dado Yoogni de cuando aún eran felices.

Sin querer, o quizás queriendo matarse un poco, empezó a leer las líneas que el chico le había escrito. En ellas volvía a confesar todos aquellos sentimientos que tenía por él, cuanto deseaba quedarse a su lado por muchos años más, los infinitos planes que tenían juntos y como de segura y estable estaba su vida solo a su lado.

Pero todo eran mentiras, Yoongi lo terminaría dejando a la primera oportunidad de mejora que tuviera. No podía culparlo por tener ambición, él también la tenía, ¿pero era mucho pedir un poco de consideración a todo el tiempo que compartieron juntos? ¿Era necesario recurrir a acciones tan bajas para conseguir tus objetivos? Al final, él se quedó queriendo solo en esa relación.

Kookie ―hablo Emily, entrando nuevamente en la habitación y asustándolo un poco― no sabes cuanto lo lamento, me han llamado del trabajo y me piden que me reincorpore porque mi reemplazo ha sufrido un accidente, ¡la rabia que tengo! Había pedido estas vacaciones justo para pasarlas contigo.

―Oh, no te preocupes ―contesto con una suave sonrisa― si me dices donde puedo alquilar una moto, puedo arreglármelas.

―¡De eso nada! Le diré a TaeTae que te haga compañía y sea un buen anfitrión, él tiene mayor flexibilidad de tiempo con su trabajo así que no será problema. No olvides que estas en tu casa ―siguió hablando la chica mientras entraba y salía de la que era su habitación con una cartera y una casaca jean y caminaba a la puerta de salida siendo seguida por Jungkook― date un baño, come algo, mira la tv; yo voy a coordinar con TaeTae para que se dé un salto ni bien pueda por si necesitas algo y ¡no te preocupes! Yo me encargo que tu estadía aquí sea maravillosa.

Le dio un beso en cada mejilla y salió hecha un bólido. Con un suspiro regreso a su habitación, terminaría de desempacar, se daría una ducha y se prepararía algún sándwich mientras esperaba que TaeTae decidiera hacer acto de presencia. Por un momento se sintió un niño pequeño en espera de su niñera…lo que sea que hiciera feliz a Emily.




¡Hola otra vez!

Qué raro de mí que este tan activa y tan pronto, lo sé...pero esta historia la había escrito ya hace un tiempo, con otros personajes, y ¡tenía tantas ganas de compartirla aquí! Así que esta es una versión taekook que espero les guste (:

Voy a ir actualizando una vez por semana porque el capitalismo me oprime de lunes a viernes de 8AM a 6PM y el editar los capítulos se cruza con mi agenda de querer llorar de frustración :3

¡Así que espero que les guste y lo disfruten!

Un beso!

- L

1. März 2022 18:58 0 Bericht Einbetten Follow einer Story
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